La temática social y ambiental del Festival Ecozine triunfa en su extensión del Matarraña

La sección Matarraña del Ecozine Film Festival sigue consolidándose y, por tercer año consecutivo, ha celebrado su particular edición con la proyección de distintos cortometrajes de temática social y ambiental a caballo entre Valderrobres y Peñarroya de Tastavins.

El viernes fue el restaurante Inspira Food de la capital de la comarca y el sábado el Santuario de Virgen de la Fuente en Peñarroya de Tastavins, cuya hospedería gestiona la empresa Torre del Visco. Esas han sido las localizaciones en las que se visualizaron producciones realizadas por autores de países europeos y latinoamericanos, todas ellas de temática socioambiental, que es a la que está dedicada este evento cultural nacido en 2008 fruto de la colaboración de la Asociación Cultural Ecozine y el Ayuntamiento de Zaragoza. Desde entonces no ha parado de crecer y de ampliarse con extensiones en Teruel, Navarra y Valencia.

En sus 17 años de trayectoria, el Ecozine Film Festival se ha convertido en un certamen de referencia en temática relacionada con el Medio Ambiente y ha sido miembro fundador de la Green Film Network así como de la Red de Festivales y Muestras de Cine de Aragón.

Con cuatro extensiones

El Festival ha crecido tanto que han surgido varias extensiones que se han sumado a la principal que se desarrolla en la capital aragonesa. Además de las proyecciones que acoge Zaragoza, en los últimos años este evento cinematográfico ha ampliado miras llegando a Aranda del Moncayo (Zaragoza), a Eliana (Valencia), Pamplona y Matarraña. En esta última comarca, el restaurante Inspira Food de Valderrobres y la Hospedería de Virgen de la Fuente se han convertido en pequeñas salas de cine acogiendo las proyecciones de distintas producciones.

En el restaurante Inspira Food se han pasado hasta ocho cortometrajes: seis realizados en España, uno producido en Italia, otro de Francia y un sexto de Alemania. El sábado en Peñarroya de Tastavins, en el Santuario de Virgen de la Fuente, se proyectaron cinco propuestas, dos españolas, dos italianas y un último cortometraje chileno.

Todos los cortometrajes “tienen un contenido social y medioambiental”, explicó Isabel Casorrán, coordinadora del festival en el Matarraña junto a su compañera Marián Pulido.

34 finalistas

El Ecozine Film Festival tiene carácter internacional. En esta decimo séptima edición se han presentado más de 380 producciones de 50 países, de las que el jurado, formado por profesionales del sector audiovisual, seleccionó 34 propuestas finales de 16 países distintos para la Sección Oficial Competitiva. Además de cortometrajes ha habido en este 2024 largos producidos en países tan dispares como Japón, Kenia, Francia, España, Rumanía, Estados Unidos, Italia, Polonia, Chile, Cuba, Colombia, Alemania, México, Canadá, India o Bélgica.

“Aunque el Festival se desarrolla desde hace 17 años en Zaragoza -el Centro de Historias y la Filmoteca de Zaragoza son las salas donde se proyectan las películas en la sede principal- cuenta actualmente con ubicaciones fuera de la capital como es el caso del Matarraña”’, detalló Casorrán, quien explicó que la clausura de la edición 2024 tendrá lugar en el Auditorio de Zaragoza el próximo viernes.

“Con los años nos hemos adherido otros municipios, porque lo que buscamos es dar a conocer los trabajos de temática socioambiental que desarrollan distintas personas en el mundo; en el caso del Matarraña hemos variados las ubicaciones en cada una de las ediciones que llevamos”, explicó la coordinadora del evento en el Matarraña.

Mas del Rei, Somnifabric...

La primera edición del Ecozine Film Festival en el Matarraña se celebró hace tres años en el Mas del Rei de Cretas, “una masía de turismo rural con un patio espectacular que ya tenía trayectoria en la organización de conciertos y actividades culturales, y aquella primera prueba resultó todo un éxito”, enfatizó la portavoz del Festival en el Matarraña.

El año pasado “buscamos otra ubicación porque el establecimiento de Cretas había cerrado, así que la proyección se celebró en el Hotel Somnifabric de Valderrobres, que también es un lugar muy especial”, valoró Casorrán.

En esta tercera ocasión han sido dos las localizaciones que han compartido protagonismo, con el mismo resultado satisfactorio, en opinión de las dos organizadoras, quienes dicen no saber todavía dónde recalara este evento el año que viene. “Vamos explorando localizaciones, y si encontramos algún lugar que cumpla con todos los requisitos, allí nos quedaremos, pero de momento no hay un espacio definido, ya que hay gente a la que le gusta el cine y que ha sido fiel al Festival en estas tres ediciones, desplazándose de un lugar a otro, como ha ocurrido este año en el que ha habido cinéfilos que han acudido tanto a Valderrobres como a Peñarroya”, explicó.

Los cortometrajes que se han proyectado en Valderrobres y Peñarroya de Tastavins este pasado fin de semana optan a los premios que otorga el Festival. La elección de los que se proyectan en cada espacio o ubicación “corresponde a la dirección del Festival”, comentó la responsable del evento en el Matarraña. En este caso, el Festival está dirigido por el productor audiovisual y cineasta Pedro Piñeiro. Según apuntó Isabel Casorrán, “se eligen los títulos en función de la relación que puede tener la zona con la problemática que abordan, porque encajan mejor en el lugar donde van a proyectarse”. En el caso del Matarraña, añadió , “el contenido social y medioambiental encaja perfectamente”. A su juico, el Ecozine Film Festival “intenta mover conciencias y poner sobre la mesa problemas reales que quizá no llegarían al público si no es a través de este tipo de formatos que dan pie a comentar, compartir ideas e incluso a estimular cambios de actitudes a través de la imagen y de los relatos en la pantalla”.

En suma, el balance de esta edición es “muy satisfactorio”, valoraron desde la organización: “ha habido gente que ha acudido a las dos localizaciones y que volverán, porque son personas interesadas en este tipo de temáticas (socioambientales) que se abordan en las producciones proyectadas durante los dos días”, enfatizó la responsable del Festival, quien añadió: “nos han quedado muy buenas sensaciones después de esta tercera edición en el Matarraña y estamos convencidas de que habrá una cuarta”. A su juicio, “las zonas rurales están muy necesitadas de actividades culturales de este tipo; además, con estos eventos demostramos que no es necesario irse a una gran ciudad a ver un cine de calidad o de compromiso, sino que perfectamente puede hacerse en el medio rural”.

Títulos y temas

Las producciones que se han podido visualizar en el Matarraña durante el viernes y el sábado abordan diferentes temáticas: el reciclaje (Cristal, papel, orgánico, de Almudena Vázquez); la sociedad consumista contemporánea, crítica surrealista dirigida por Alice Fassi (Italia) bajo el título Choco Hoax; propuestas fantásticas y futuristas como la que aborda el corto español Hiertalisis Nau, que habla de la escasez de verduras en el Madrid del año 2047; la caza furtiva de aves en el sudeste asiático, una producción italo indonesia de seis minutos realizada por Jorik Dozy y Sil Van Der Woed y titulada Broken Wings; la contaminación de un pueblo pesquero por una central térmica, del chileno Nicholas Hooper H (bajo el título La Mecha) o una visión crítica y caleidoscópica del mundo actual contada a través de las tragicómicas y esperpénticas vivencias de unos pájaros (To bird or not to bird, del español Martín Romero).