Finalizan las obras de restauración en la torre de los Escolapios de Alcañiz tras meses de trabajo

Las obras de restauración en la torre de la iglesia de Escolapios de Alcañiz han llegado a su fin tras meses de trabajo minucioso. La intervención, iniciada en julio de este año, ha sido realizada por la empresa local Corex Construcciones, bajo la supervisión del colegio San Valero, propietario de la torre y Patrimonio. José Garín, director titular del colegio de San Valero explicó las actuaciones llevadas a cabo por la empresa constructora y subrayó la importancia de conservar este significativo patrimonio histórico de Alcañiz.

Garín detalló que los trabajos principales se centraron en la sustitución del cimborrio de la torre, el cual presentaba signos de deterioro, y en la realización de un “palmeado” de la estructura completa. “Esto implica una revisión exhaustiva de toda la torre para identificar piezas en mal estado y garantizar su protección, así como la seguridad de los viandantes”, explicó. Este proceso permite asegurar que no haya elementos sueltos que puedan desprenderse, lo cual es esencial para la estabilidad y seguridad de la torre.

Además, la restauración incluyó la sustitución de varios pináculos deteriorados: las características bolas decorativas que coronan la estructura. Por otro lado, los alfeizares de la torre fueron recubiertos para protegerlos de los daños causados por la lluvia y el viento, en un trabajo similar al que se realizó anteriormente en el edificio del Ayuntamiento de Alcañiz. Garín explicó que estos elementos son “especialmente vulnerables”, debido a su exposición constante a las inclemencias meteorológicas, por lo que su protección era crucial para preservar la integridad del monumento.

Para el director, estas reformas han significado un gran paso para la ciudad. “Es un esfuerzo importante por parte de la institución, ya que todo el coste ha sido asumido de manera privada sin ningún tipo de subvención, pero creemos que vale la pena para proteger este patrimonio y garantizar la seguridad de quienes transitan por la zona”, afirmó Garín. Además, se realizaron otras intervenciones menores, como el tratamiento de las campanas para prevenir la oxidación y asegurar su buen funcionamiento.

Los antecedentes

Los trabajos se iniciaron con la instalación de un primer andamio en Semana Santa, aunque la intervención en sí comenzó en julio tras obtener los permisos necesarios de Patrimonio. “Aunque la torre es propiedad privada de la institución de San Valero, al estar catalogada como patrimonio artístico, las actuaciones deben ser autorizadas por Patrimonio, lo que ralentizó un poco el proceso, ya que estos trámites llevan su tiempo”, comentó Garín. Una vez obtenida la autorización, se amplió el andamio para cubrir toda la torre y se procedió con las reparaciones de manera integral.

Por su parte, Corex Construcciones, una empresa alcañizana con experiencia en restauración de patrimonio histórico fue la encargada de ejecutar la obra. Según Garín, se eligió a esta empresa local para “favorecer la colaboración con profesionales de la zona” y asegurar que el proyecto se ejecutara con el máximo cuidado y conocimiento del entorno.

La necesidad de esta intervención se hizo evidente tras un desprendimiento de material de la torre que, afortunadamente, no causó daños personales ni materiales de gravedad. "Fue una señal de que debíamos actuar con urgencia para evitar cualquier accidente en el futuro", explicó Garín, quien destacó que la intervención se llevó a cabo con la recomendación de arquitectos y especialistas en patrimonio.

El director titular del colegio de San Valero expresó su satisfacción con el resultado obtenido y anunció que el andamio será retirado próximamente. “Estamos a punto de quitar el andamio; ya mismo tenemos que dar la orden a la empresa, y entre este viernes y el lunes estará todo listo”, confirmó Garín. La restauración no solo garantiza la protección de la torre, sino que también mejora su aspecto, realzando así el patrimonio visual de Alcañiz.