El monte de Gúdar ofrece sus ricos tesoros y enseñanzas a mayores y pequeños

Gúdar ha incidido en la educación ambiental durante la celebración de las VIII Jornadas Micológicas, en las que en torno a un centenar de personas han disfrutado del monte, aprendido los valores que hay en él y recogido una variada cantidad de tesoros en forma de setas.

El público familiar, principalmente procedente de la Comunidad Valenciana, fue el más abundante y, sobre todo los niños, disfrutaron al máximo porque, como recalcó el alcalde, Alberto Izquierdo, se realizaron diversas actividades tanto para darles a conocer el mundo fúngico como el de los animales.

Con esa intención, los pequeños asistieron a un taller denominado En el bosque hay más que setas, en el que se realizó un recorrido para admirar la flora, las huellas de animales y conocer las diferentes partes de las setas. Además, la actividad El duende busca casa implicó también a los padres, que tuvieron que ayudar a sus hijos a realizar una especie de yinkana para buscar determinadas especies. Los niños recolectaron sus propias setas de cardo que, tras ser revisadas por los expertos en micología, se llevaron a sus casas para degustarlas.
 

Las dos actividades estuvieron dirigidas por Helena Parga, de la empresa oscense Pirinature, quien también llevó a cabo un taller nocturno de murciélagos en el que intentó derrocar algunos de los mitos que hay en torno a este animal “tan estigmatizado”, dijo, y que, a la vez, “es fundamental para el ecosistema, sobre todo como controlador de plagas”, aseguró.

Izquierdo destacó que con este nuevo enfoque hacia la educación ambiental se ha dado “un paso más” en la actividad micológica y adelantó que la intención es seguir esta línea de trabajo centrada principalmente en los más pequeños.
 

Economía y ecología

La inauguración de las jornadas contó con la presencia de la directora general de Educación Ambiental, Raquel Giménez Acón, quien subrayó durante su discurso las sinergias que existen entre la economía y la ecología, que “son dos caras de la misma moneda”, comentó. Al acto inaugural acudió también el vicepresidente de Gúdar-Javalambre, Dani Riera.

Giménez mostró la importancia que tiene el desarrollo sostenible en estas zonas rurales y abogó por la necesidad de impulsar su economía sin alterarlas. Así, concretó que hay que apostar por los propios recursos endógenos y relató que es importante que los vecinos de los pueblos los conozcan.

Asimismo, valoró que las jornadas de Gúdar lleven intrínseca la educación ambiental y destacó que este tipo de actividades son muy interesantes para la gente: “Es importante también que sepamos estar en los montes y disfrutar de ellos sin que se note que hemos pasado por allí”, aseveró.
 

La Dirección General de Educación Ambiental ha colaborado con la actividad realizada en Gúdar aportando un total de 8.000 euros. Precisamente Raquel Giménez destacó el esfuerzo que tienen que hacer los pequeños ayuntamientos para preparar jornadas de este calibre que “dinamizan el medio rural y contribuyen a que lleguen visitantes y a asentar la población” .

Hubo a su vez con un taller de gastronomía realizado por Belén Soler, del restaurante La Ojinegra de Alloza, quien les mostró diversas propuestas con setas y Tuber uncinatum, a la vez que sensibilizó a los asistentes de la importancia de evitar el despilfarro alimentario. Además, los restaurantes de la localidad ofrecieron menús tematizados en torno a las setas.