El Concurso de Piano Antón García Abril regresa con fuerza al calendario turolense

Con un presupuesto de 50.000 euros, casi la mitad de los cuales irán destinados a premios, el Concurso Internacional de Piano Antón García Abril volverá a reeditarse diez años de su desaparición, cumpliéndose así “uno de los grandes sueños” del músico turolense, fallecido en marzo de 2021 por covid-19, según aseguró Adriana García-Abril, una de sus hijas y vicepresidente de la Fundación que lleva el nombre del compositor del Himno de Aragón.

El concurso, cuya última edición -la octava- de 2011 ganaron la polaca Pola Lazar, el abulense Antonio Hiroaki Benaldo y la malagueña Pilar Martín González, está abierto para pianistas de todo el mundo entre 16 y 31 años. El plazo de presentación finaliza el 16 de junio de 2022.

El certamen pretende recuperar el prestigio internacional del que gozó durante los primeros años del siglo, cuando pianistas de renombre como la rusa afincada en Galicia Ilona Timchenko o el valenciano Claudio Carbó, quien actuó en la Catedral de Teruel en junio de 2021 durante el homenaje que la ciudad brindó a su Hijo Predilecto.

La cita tendrá una primera parte selectiva online, en la que los aspirantes deberán colgar en una plataforma online un vídeo con una muestra de al menos 10 minutos de repertorio que incluya al menos una de las obras de Antón García Abril. El jurado, conformado por “personalidades de reconocido prestigio internacional” que no fueron detalladas este viernes en la presentación, seleccionada 16 finalistas.

La resolución y la parte presencial del Concurso de Piano Antón García Abril cerrará en noviembre los actos de homenaje del Gobierno de Aragón al compositor turolense, que incluyen además seis conciertos y dos mesas redondas que tendrán lugar en Zaragoza.

Será del 10 al 12 de noviembre en el nuevo Auditorio que actualmente está en construcción junto al Conservatorio de Teruel. Aunque la alcaldesa de Teruel no quiso adelantar fechas, aseguró que el equipamiento estará listo para la final del concurso de piano y que de hecho “no será ese el acto inaugural, porque el objetivo es terminarlo antes y desde luego no lo tendremos cerrado hasta noviembre”.

Los 16 finalistas deberán interpretar en directo, en esa fase del 10 al 12 de noviembre, un repertorio de al menos 20 minutos con varias composiciones de Antón García Abril. Tras esa actuación en directo el jurado deliberará y hará público de los ganadores del certamen.

Para ellos hay destinados 19.000 euros en premios; el Primer Premio Ciudad de Teruel de 10.000 euros, el Segundo Premio con 6.000 euros y el Tercer Premio dotado con 3.000 euros. Estas cifras suponen un importante incremento en los premios de las anteriores convocatorias, como recordó el concejal de Cultura Carlos Méndez, que además agradeció públicamente su trabajo a los organizadores de las ocho anteriores ediciones del concurso, músicos como José Ignacio Lozano, Carlos Paterson, Mari Carmen Muñoz y otros miembros de la Asociación Cultural Músicos de Teruel.

Para Emma Buj la presentación de este IX Certamen Internacional de Piano Antón García Abril, primero de la nueva época, supone la culminación “de un compromiso que adquirí conmigo misma desde el primer momento en que accedí a la alcaldía de Teruel”, además de “una obligación que teníamos con este músico fallecido el año pasado” y de “una oportunidad para la ciudad de Teruel”, en el sentido de que algunos de los mejores músicos jóvenes de todo el mundo podrán escucharse en directo.

Junto al Ayuntamiento de Teruel, el Gobierno de Aragón, la Fundación Ibercaja y la Fundación Antón García Abril, también forma parte del grupo de patronos del certamen la Fundación SGAE, cuyo presidente, Rubén Gutiérrez, visitó Teruel para asistir a la presentación de la cita ante los medios de prensa. Según Gutiérrez, que comprometió el apoyo técnico de su organización, el lanzamiento de la convocatoria supone poner en su sitio “a uno de los grandes músicos contemporáneos españoles”, a quien le fue concedida la Medalla de Honor de la SGAE a título póstumo, después de “este mismo lunes presentáramos un libro que recoge sus obras completas, y de que esté recién comenzado el ciclo de conciertos en Zaragoza con los que el Gobierno de Aragón homenajea a Antón García Abril”.

Víctor Lucea, director general de Cultura del ejecutivo autonómico, recordó durante la presentación que García Abril es autor del himno oficial de Aragón y felicitó a todos los actores vinculados al concurso “porque la colaboración entre las diferentes administraciones y entidades es la mejor manera de sumar en materia de cultura”. Una de ellas es la Fundación Ibercaja, cuyo director, José Luis Rodrigo, manifestó la intención de que la institución que dirige mantenga el compromiso “con los referentes aragoneses que son una importante muestra del patrimonio cultural, como es el caso de Antón García Abril”.

"Era uno de los sueños de mi padre"

Adriana García-Abril, una de las hijas y vicepresidente de la Fundación a la que da nombre el músico turolense, aseguró que en la presentación del concurso vivió “una de las mañanas más emocionantes de mi vida, porque se cumple uno de los grandes deseos de mi padre”, que no era otro que se retomara este concurso, “una de sus grandes ilusiones”. Según García-Abril, “Antón creía firmemente en este certamen, le dio muchas alegrías y también mucho trabajo, porque compuso mucha música pensando en los participantes. Consiguió que fuera un concurso reconocido internacionalmente y, aunque se dio un gran disgusto cuando el concurso se cayó, siempre conservó la esperanza de que se retomara”.

En este sentido, la hija del pianista agradeció a Emma Buj su “persistencia para reflotar el concurso “, que “tras varias intentonas” finalmente sale adelante en la que “ojalá que sea la primera de una serie de muchísimas ediciones”.

Incluso sin la figura de Antón García Abril como jurado, su hija Adriana no duda de que “el certamen volverá a tener el prestigio del que gozó”.

Como elemento inspirador, Adriana García-Abril explicó que el jurado no premiará “la técnica” o “la interpretación de la música de mi padre” por separado, sino un compendio de ambas cosas. “Un pianista tiene que tener una excelente técnica pero además una gran sensibilidad artística que le permita interpretar a los autores, especialmente cuando hablamos de música como la de mi padre, con melodías muy especiales que aunque suenan sencillas al oído encierran una gran complejidad compositiva”.

Adriana García-Abril aseguró que el día de la presentación del concurso “hubiera sido todo un sueño cumplido para mi padre. Él estaba loco por retomar este concurso, por volver a atraer a su tierra al talento musical nacional e internacional. Era una de sus grandes ilusiones y estoy seguro de que estaría feliz y exultante”.