Arcatur edita un sello de Correos y una postal por el 150 aniversario del asalto frustrado

Arcatur y la Sociedad Filatélica de Zaragoza, en colaboración con el Ayuntamiento de Teruel, han editado una serie de sellos de Correos conmemorativos con la imagen de la medalla concedida a Teruel por su resistencia en 3 de julio y el 4 de agosto de 1874 al doble asalto de las tropas carlistas, con motivo del 150 aniversario de la concesión a la ciudad de los títulos de “heroica y siempre heroica” por el gobierno.

La primera tirada consiste en una serie de quinientos sellos que reproducen la imagen de la medalla, sobre fondo rojo, que sirve como emblema de las jornadas que se están celebrando en Teruel con motivo de la onomástica. Además se han editado quinientas postales con una imagen que reproduce un grabado de origen francés sobre el asalto carlista, que incorpora el sello y diferentes matasellos artísticos, con fecha del 26 de octubre, que tiene la oficina de Correos de Teruel. “La postal con el sello y matasellada es lo que entre los filatélicos se conoce como tarjeta máxima, una de las piezas más apreciadas por los coleccionistas, ya que incorpora los tres elementos”, explicó Rubén Saez, de Arcatur, durante la presentación del nuevo sello.

Aunque el sello tiene validez oficial para realizar envíos -cualquiera puede solicitar a Correos que se lance una serie de sellos válidos, si bien su motivo tiene que estar social o culturalmente justificado-, la serie está especialmente concebida para el coleccionismo. Rubén Saez recordó que “cualquiera puede realizar un envío de Correos con estos sellos, o utilizar la postal, este tipo de material conmemorativo se pone en circulación especialmente para los coleccionistas”.

Arcatur, la asociación para la defensa de los castillos turolenses, ya ha colaborado en anteriores ocasiones con la Sociedad Filatélica de Zaragoza. En octubre de 2019, por ejemplo, ambas entidades pusieron en marcha dos exposiciones de sellos sobre patrimonio histórico que pudieron verse en Mora de Rubielos y Monreal del Campo. Una se centraba en el Camino de Santiago y la Ruta del Cid, y la otra en castillos europeos y de historia sobre Aragón. “En aquella ocasión se puso de manifiesto que existen infinidad de expertos que no solo coleccionan los nuevos sellos que Correos va lanzando, sino que se especializan en terminadas temáticas, como puedan ser flores, castillos o conmemoraciones históricas como esta”.

Además Teruel acogió en 2023 la Exposición Nacional de Filatelia Exfilna organizada por la Federación Española de Filatelia, cuyo secretario general, José Antonio Arruego, es además presidente de la Sociedad Filatélica de Zaragoza.

Tanto el nuevo sello como la tarjeta postal -de la que se editarán nuevas tiradas una vez se agote la primera- se pondrán a la venta al precio de 2 euros y 50 céntimos respectivamente, en el centro de interpretación de la Muralla de Teruel.

 

Un grabado francés

La tarjeta postal que ha editado Arcatur y la Sociedad Filatélica de Zaragoza muestra la imagen de un grabado de origen francés, publicado en Le Monde Ilustré en 1874, el mismo año de los dos ataques carlistas que repelió Teruel. La obra es original de M. Vierge a partir de un boceto de M. R. Castellanos, y se titula Les voluntaires de Teruel repoussent une ataque du nuit del carlistes (Los voluntarios de Teruel repelen un ataque por la noche de las carlistas). Representa el segundo de los asaltos de las tropas del aspirante tradicionalista al trono, Alfonso Carlos de Borbón, nieto de Carlos María Isidro -primer pretendiente carlista, hermano de Fernando VII y tío de Isabel II, y cuya muerte en 1936 a los 87 años significó la extinción de la línea directa de aspirantes carlistas-.

La imagen muestra una escena de los carlistas intentando asaltar el 4 de agosto la muralla de Teruel, con escaleras y los Arcos del acueducto de fondo. “La hemos escogido porque, de todas las que existen, creemos que es la más fidedigna sobre cómo pudo ser el ataque”, explicó Rubén Saez. Según el historiador otras imagenes del ataque que se publicaron en la prensa de la época tenían menos rigor histórico y no estaban bien ubicadas. “Seguramente se hicieron leyendo descripciones del ataque, pero contienen errores, como ubicar el ataque en la zona de Dolores Romero, donde no había muralla y no se dieron los combates”.

Tras las dos conferencias sobre los intentos de asalto del 3 de julio y del 4 de agosto de 1874 a la ciudad de Teruel, y de la presentación oficial del sello conmemorativo, los actos de La Huella Carlista programados en el 150 aniversario concluirán este sábado a las 12 horas, con un recorrido guiado por diferentes escenarios de la defensa isabelina. Comenzará en la plaza Domingo Gascón, recorrerá diferentes espacios de la muralla y el Centro Histórico que registraron combates y terminará frente al Ayuntamiento de Teruel, donde se realizará la lectura de la concesión de los títulos de Heroica y Siempre Heroica a la ciudad.

Memoria

Durante la presentación del sello del 150 aniversario del doble asalto carlista frustrado, el concejal de festejos del Ayuntamiento de Teruel, Eduardo Suárez, y el historiador Rubén Saez, de Arcatur, se preguntaban la razón por la que, a diferencia de otras ciudades como Zaragoza, que celebra anualmente la Cincomarzada en memoria del 5 de marzo de 1838, cuando los carlistas fueron rechazados, en Teruel no haya fiesta o celebración que recuerde ese conflicto dinástico que se desarrolló en tres guerras entre 1833-40, 1846-49 y 1872-76.

No parece muy oportuno celebrarlo el 3 de julio, a las puertas de la Vaquilla, pero el 4 de agosto no parece mala fecha. Una razón probable, que además explicaría el secular silencio que hubo en los temarios educativos españoles sobre las guerras carlistas, podrían ser los estrechos vínculos que existió entre el carlismo de nuevo cuño, el que resurgió durante el primer tercio del siglo XX, y la dictadura franquista.

El propio Alfonso Carlos de Borbón, aspirante al trono y al frente de las tropas que atacaron Teruel en 1874 participó activamente en el complot golpista que originó la guerra civil, pese a su avanzada edad -murió en septiembre de 1936, a los 87 años, atropellado por un vehículo militar-. En Teruel hubo un monumento en la plaza de la Marquesa que celebraba la derrota de los carlistas, pero fue derribado por los requetés del ejército sublevado y no volvió a recuperarse.

Y aunque la relación entre el franquismo y el carlismo terminó como el rosario de la aurora, con los segundos duramente reprimidos una vez que dejaron claro que no aceptarían al príncipe Juan Carlos como heredero al trono de España, los elementos memorialistas previos contra los carlistas no fueron recuperados, en general, hasta la democracia. La cincomarzada zaragozana, por ejemplo, fue prohibida en 1937 y no se recuperó hasta 1981.