La Institución Ferial luce sus mejores galas para la celebración de la XL edición de ExpoCalamocha

La celebración de ExpoCalamocha se nota desde el mismo momento en el que se pone el pie en la capital del Jiloca. Desde el viernes por la tarde hasta el la tarde de este domingo, Calamocha ofrecerá su cara más comercial, más ganadera y más agrícola e industrial con el recinto ferial como epicentro de toda esa actividad.

La cuadragésima edición de ExpoCalamocha arrancó el viernes con la inauguración oficial y una master class de corte de jamón, pero la jornada más intensa fue la de este sábado, que comenzó con una mesa redonda ganadero-cinegética sobre la enfermedad hemorrágica epizoótica que, sorprendentemente, apenas contó con la respuesta del sector pero en la que se expusieron datos y enfoques distintos sobre la situación actual de la EHE y en la que se analizó, también, el futuro a corto y medio plazo de la ganadería bovina turolense.

Conforme fue avanzando la mañana, la actividad en el ferial y sus alrededores fue creciendo. Al mismo tiempo que se debatía sobre el virus del EHE en el salón de actos del palacio de exposiciones, en la Zona Expo habilitada en el propio espacio expositivo se presentaban dos libros. El zaragozano Miguel Cortés explicó los cómos y los por qués de su libro El Guiñote y, después, la escritora local Lucía Roy presentó su novela Georgia y Androy.

Acto seguido, ese mismo punto, la Zona Expo, se convirtió en una pasarela en la que desfilaron modelos de todas las edades. La colección propuesta por el comercio local Perifollo fue presentada por la periodista Laura Malo, que hizo de maestra de ceremonias con una descripción de cada conjunto que subió y bajó por la pasarela.

Mientras tanto, en el frenesí matinal, en el recinto exterior los aficionados al crossfit protagonizaron el reto solidario 1.000 Ascensos en favor de la asociación Aspanoa. Casi sin resuello después de haber ejecutado una larga tanda de subidas al cajón, Vanesa Martínez, socia del gimnasio Crossfit Jiloca, explicó que la intención del reto es “ayudar a Aspanoa para que haya más inversión para la investigación de esta enfermedad”. Y para ello se propuso durante toda la jornada del sábado el reto Chad que, explicó, “consiste en hacer 1.000 ascensos al cajón a una altura 50 centímetros. Los chicos con un chaleco (lastrado) de 20 kilos y las chicas, de 14”. No hay límite de tiempo y se puede realizar en el tiempo que “le cueste a cada uno”, continuó.

Cada atleta del gimnasio que quiso participar decidió cómo hacerlo, “sin peso o lastrados o el número de ascensos hasta el que se llegue”, pero además se realizaron clases de iniciación al crossfit en las que se trabajaron los movimientos básicos de esta disciplina deportiva.
La recaudación de fondos destinados a la Asociación de Padres de Niños Oncológicos de Aragón (Aspanoa) se realizó mediante una hucha colocada frente a los cajones en los que se desarrollaba el reto y en la que se podía colaborar depositando donativos en su interior.

A mediodía, mientras los atletas derrochaban calorías subiendo y bajando del cajón, a pocos metros del box improvisado se pudo probar un guiso de caldereta de cordero en el que colaboró Casa Ganaderos.

El gerente de la institución ferial, Juan Ignacio Ibáñez, destacó de las primeras horas de la XL ExpoCalamocha que los organizadores estaban “muy contentos” después de que el viernes  registrase “más público el viernes por la tarde respecto a otras ediciones”. Sin embargo, los momentos más boyantes, tanto en cuanto a flujo de visitantes como a ventas, se dan en la tarde del sábado y el domingo.

Oferta variopinta

La oferta de productos y servicios que se expone en Calamocha durante el fin de semana es inmensa y combina los vehículos agrícolas o la muestra de ganado a la exposición de productos industriales como placas solares de uso doméstico, pasando por un extenso surtido de puestos de venta casi de cualquier cosa.

Entre una amplia oferta, sobre todo gastronómica de embutidos y quesos, hasta elementos de decoración, animales domésticos o moda, se encontraban otros stands que, con un mayor o menor carácter institucional, mostraban una parte de la sociedad local. Así está el puesto del Centro de Estudios del Jiloca, donde su presidente emérito, José María Carreras, entregó a los socios el último volumen editado por la institución, así como otras publicaciones de su fondo editorial. También tuvo presencia institucional el Ayuntamiento de Calamocha, en cuyo stand permanecieron los escritores Cortés y Roy, después de haber presentado sus respectivos libros. No faltaron tampoco a la cita la Peña La Unión y los alumnos de 4º de la ESO del IES Valle del Jiloca.

Ana Lilao recordó que los estudiantes no faltan a esta cita para tratar de reunir fondos con los que ayudar a costearse el viaje de estudios. “Estamos vendiendo cosas para irnos de viaje a Mallorca”, explicó. En su reducido stand ofrecen una selección de artículos de segunda mano, “sobre todo bolsos, monederos y peluches” y sobres sorpresa “ a un euro en los que puede haber de todo”.

Mientras, en la parada de la Peña La Unión, se realiza durante el fin de semana una porra. “La Peña La Unión de Calamocha tiene una cesta de Navidad compuesta por diversos productos tecnológicos y juguetes. Comprando participaciones a un euro  se tiene la oportunidad de jugar en la feria a (adivinar) cuánto pesa esta calabaza”, explicó Ana Blasco. “El que más se acerque si pasarse se llevará un lote de productos”, concluyó.

Pero el grueso de la exposición resultó tan convencional como apetitosa. El zaragozano Rubén Calvo, del puesto Las Delicias de Mi Tierra, trae a la feria “productos de León, del Bierzo y Villandangos del Páramo, y queso manchego de Ciudad Real”. Es un habitual de esta cita comercial que compagina duplicando esfuerzos con otro stand en Mora de Rubielos. De Calamocha le gusta “la gente que viene y la aceptación que tienen los productos alimenticios” y reconoce que comercialmente “es una feria buena”.

A eso se ha encomendado Luis Enrique Guaján Flores, que ha apostado por regresar con su parada de venta a Calamocha después de cinco años de ausencia. Su puesto se ubica en la calle, fuera del recinto ferial. “Hemos vuelto este año a ver cómo resulta esta feria. La primera vez que vinimos sí que se trabajó”, recordó esperanzado en repetir ventas.  Guaján apuntó que la última vez que vino “hacía mucho, muchísimo frío. El tiempo ha cambiado”. Mientras en los puestos toda la calle se escucha sin cesar un coro de ladridos electrónicos de un juguete con forma de perrito, Guaján no precisó cuál será el producto estrella de esta edición.

En el apartado de decoración, Rubén Giménez, gerente del comercio La Gitanilla, de Calamocha, explicó que, aunque su negocio principal son las antigüedades y la restauración, a la feria han apostado por traer “piezas de artesanía. Para la ExpoCalamocha es lo que más pega porque es una feria mejor para vender productos que quepan en el bolsillo o debajo del brazo”. Entre la gama que expone junto a la entrada principal del ferial destacan bandejas de madera o adornos con forma de corazón que realizan con los retales sobrantes de madera que quedan en su taller.

Mesa redonda sobre la EHE

El asesor técnico veterinario de la Federación Aragonesa de Caza, Nicolás Urbani, destacó en la mesa redonda celebrada el sábado en ExpoCalamocha sobre la enfermedad hemorrágica epizoótica que “es un tema que preocupa. No es para despertar alarma, pero sí para estar atento”. Urbani reconoció que aproximadamente el 7 por ciento de los ciervos están infectados, aunque en lugares tan poblados como los Montes Universales esa cifra podría ser mayor.  Junto a él, el jefe de la Unidad Provincial de Agricultura, ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón en Teruel, carlos Tremul, abundó que en Teruel hay 59 explotaciones ganaderas afectadas, lo que supone el 58 por ciento. Además, señaló que Teruel ha sido una de las provincias elegidas para la realización de un estudio de ser prevalencia.

Domingo intenso

La jornada de dominical arrancará temprano, con la salida al campo programada a las 8:30 horas para buscar setas y hongos coordinada por la Asociación Micológica el Pinsapar de Orcajo, que después ayudará a clasificar los ejemplares recolectados.
A las 11:00 se presentarán las ayudas directas para digitalizar  un negocio en la exposición de la Oficina Pyme de la DPT. Después, Elena Cebollada, de la Pastelería Reynaldos, realizará una demostración de cómo aprovechar los turrones después de la navidad.

La última actividad del programa de esta edición será una cata de miel de la explotación de María José Simón, Miel El Figura, de Calamocha.