La Guardia Civil detiene en Cella a un hombre implicado en un siniestro vial que quebrantó la orden de inmovilización del vehículo

La Guardia de Teruel ha detenido en Cella a un hombre de 36 años de edad como autor de un delito contra la seguridad vial y por desobediencia grave a la autoridad al romper e inutilizar el sistema inmovilizador de su vehículo para impedir su utilización.  El detenido había sido interceptado previamente conduciendo bajo los efectos del alcohol por lo que se había determinado una inmovilización de su automóvil que él mismo se saltó.

La cronología de los hechos, explica una nota de la Comandancia de Teruel, se inicia cuando a las las 18:00 horas del día 22 de mayo se procedió en Cella, por parte del Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de Teruel, tras requerimiento de una patrulla de seguridad ciudadana del Puesto de Albarracín, a la investigación de un conductor, de 36 años, al que se le practicaron las pruebas de alcoholemia por observar que el citado conductor, tras detenerlo, desprendía un fuerte olor a alcohol.

Dicho conductor, que previamente había cometido una infracción a la ley de seguridad vial y circulaba con una conducción anómala, arrojó un resultado positivo en las tasas de alcoholemia de 1,09 y 1,18 mlgs/litro de aire espirado, siendo inmovilizado el vehículo que conducía mediante la colocación de un cepo hasta que desaparecieran las causas que habían motivado su inmovilización por alcoholemia.

Sobre las 00:40 horas del mismo día 23, no habiendo transcurrido siete horas, el mismo conductor, quebrantó la inmovilización del vehículo rompiendo el inmovilizador y cuando se encontraba conduciendo el vehículo sufrió un siniestro vial en la misma localidad de Cella.

Atestado

Personado en el lugar del accidente, por segunda vez, el Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de Teruel, realiza nuevamente las pruebas de alcoholemia a este conductor, el cual vuelve a arrojar un resultado positivo de 1,07 y 1,09 mlgs/litro de aire espirado, procediendo los agentes a la detención del mismo por la comisión tanto de un nuevo delito contra la seguridad vial como por un delito de desobediencia grave a los agentes de la autoridad, al haber utilizado la fuerza para romper e inutilizar el inmovilizador que previamente se le había colocado a su vehículo para impedir su utilización.

Por dichos hechos, por parte del Equipo de Atestados del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Teruel se instruyeron las correspondientes diligencias judiciales que se remitieron al Juzgado de Instrucción núm. 1 de Teruel por la comisión de los delitos contra la seguridad vial indicados, así como por el delito de desobediencia grave a los agentes de la autoridad.

Dicho conductor podría enfrentarse, por la comisión de los delitos contra la seguridad vial, a penas de prisión de 3 a 6 meses, o una multa de 6 a 12 meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y, en cualquier caso, a la privación del derecho de conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior de 1 año, y hasta 4 años y, en cuanto se refiere al delito de desobediencia grave a los agentes de la autoridad, a una pena de prisión de tres meses a un año o multa de seis a dieciocho meses.