La cocina y el comedor cuentan con infinidad de elementos de la época
La Casa Museo Familia Minera de Escucha abrirá en mayo y estará atendida por vecinos del municipio
El nuevo recurso turístico completará la visita al Museo Minero y acercará los visitantes al casco urbano
Pocas veces el hogar de un minero tuvo tantas visitas como las que recibió este sabado la Casa Museo Familia Minera de Escucha que ha preparado el ayuntamiento de esta localidad para completar la visita de los miles de turistas que cada año visitan el patrimonio industrial y minero de esta localidad. El nuevo recurso turístico se presentóen sociedad con una jornada de puertas abiertas preparada para que los vecinos conocieran este nuevo espacio y, de paso, reclutar voluntarios para poder atenderlo conjuntamente con el pozo Pilar durante los fines de semana de la temporada de verano.
La Casa Museo y el pozo Pilar completarán la oferta turística para todos los visitantes que accedan al Museo Minero de Escucha y permitirán, además, que los visitantes entren en el municipio y prolonguen su estancia. La teniente de alcalde del Ayuntamiento, Tania Peña, confirmó que el objetivo es “que la gente baje al pueblo, que consuma local, para ayudar a los establecimientos del municipio, porque hay restaurantes, hay bares, hay una tienda y al final también hacen un poco de economía circular y que todo se quede aquí”.
En el mismo sentido se expresó la consejera de Turismo de la Comarca de Cuencas Mineras, Enma Garcés, que coincidió en que el objetivo es acercar ese flujo turístico que tiene la mina al casco urbano. “El Museo Minero es el segundo museo de Tero, el que más gente atrae detrás de Dinópolis, o sea, me parece que es un puesto muy representativo y en Escucha se tiene que ver esa repercusión dentro del pueblo. Es una muy buena iniciativa para atraer más a la gente”, dijo.
Garcés no descartó que esta experiencia se pueda exportar a otros municipios de la comarca porque, explicó, “Escucha no es el único que tiene patrimonio (minero), sí que creo que es uno de los que mejor provecho les está sacando y que me parece que tiene unas iniciativas buenísimas, pero por supuesto que puede ir a más municipios o incluso a una mayor explotación en el mismo municipio de Escucha”.
Pese a su preestreno, la Casa Museo no abrirá sus puertas al público hasta el mes de mayo. “La idea es abrirlo cuando llegue la temporada alta, que empieza a partir de mayo”, confirmó Peña. En el tiempo entre la presentación y su apertura, el Ayuntamiento tratará de componer una bolsa de voluntarios para que, en turnos de cuatro personas, atiendan cada fin de semana tanto la Casa Museo como el pozo Pilar. Para ello se abrirá un listado en el que los interesados pueden apuntarse indicando su disponibilidad con el que se confeccionará, más adelante, el calendario de apertura.
Para la puesta en marcha de este recurso se han invertido 70.000 euros del Fondo de Inversiones de Teruel y 28.000 de la Diputación de Teruel, además de las aportaciones que ha hecho el Ayuntamiento de Escucha y las donaciones de enseres de los vecinos.
Maria Ángeles Latorre, vecina de Escucha afincada ahora en Zaragoza, fue de las primeras visitantes de la Casa Museo. Latorre reconoció nada más salir del edificio que sí que se había reconocido en la recreación de la vivienda de una familia minera. Y no es raro que se reconociera porque, de hecho, María Ángeles es una de las muchas hijas de Escucha que han colaborado con el proyecto aportando elementos de la época para la musealización del espacio.
María Ángeles Latorre se pudo reconocer en algunas de las fotos que hay guardadas en una caja de latón en la sala de estar, sobre una mesa camilla con brasero de carbón porque fue ella quien las aportó.
La teniente de alcalde de Escucha explicó que los vecinos que habían aportado enseres no conocieron hasta el mismo sábado la disposición de esos objetos dentro de la estructura de la vivienda minera. Además, previó que después de la jornada de puertas abiertas sean muchos más los vecinos que desempolven sus objetos antiguos para aportarlos a la visita.
La consejera comarcal de Turismo también incidió en este aspecto, destacando que la musealización ha permitido darle “una segunda vida a todo lo que nos ha representado durante tanto tiempo”.
Aunque la intención del Ayuntamiento de Escucha era presentar el nuevo recurso turístico a sus parroquianos, también hubo turistas entre los visitantes en la premier de la Casa Museo Familia Minera. Ese fue el caso de la familia Llorens, de Gandía, que pudieron pasear entre los enseres de la familia minera antes de bajas a la mina. “Está muy bien recreado y muy bien representado”, aseguró Juan José Llorens. Su hija, de veinte años, valoró, sobre todo, la experiencia de realidad mixta. “Muy bien adaptado, sobre todo a las nuevas tecnologías con el iPad, recreando las cosas porque hay veces que no te lo puedes imaginar si no lo ves”, expresó.
Pasear por la cantina o el economato de un barrio minero de los años sesenta es posible en Escucha gracias a la implementación de la técnica de realidad mixta que se ha implantado en la Casa Museo Familia Minera de Escucha, que ofreció a sus vecinos una jornada de puertas abiertas.
La planta baja del inmueble, que supone el comienzo de la visita, consta de dos estancias diáfanas que los turistas mirarán a través de la pantalla de las tablet que se facilitará durante visita para ver en un formato híbrido entre realidad y realidad aumentada.
“Cada persona llevará una tablet con auriculares”, explicó la teniente de alcalde, Tania Peña. De esta manera, cada cual puede arrancar la experiencia virtual cuando sea oportuno sin sufrir ni provocar molestias por el sonido del resto de dispositivos en la sala.
En cada uno de los espacios los protagonistas explican de forma campechana y con sonoros localismos cómo era la vida cotidiana. En la planta baja se puede visitar la tienda y la cantina de forma totalmente virtual, mientras que la realidad aumentada se mezcla con elementos reales en la primera planta en el dormitorio, el pasillo y el palomar para, como broche final, despedirse a la salida mientras un minero carga carbón para la estufa.
La empresa encargada de la creación del espacio virtual ha sido la firma turolense Imaginando Universos, del Matarraña.
La Casa Museo y el pozo Pilar completarán la oferta turística para todos los visitantes que accedan al Museo Minero de Escucha y permitirán, además, que los visitantes entren en el municipio y prolonguen su estancia. La teniente de alcalde del Ayuntamiento, Tania Peña, confirmó que el objetivo es “que la gente baje al pueblo, que consuma local, para ayudar a los establecimientos del municipio, porque hay restaurantes, hay bares, hay una tienda y al final también hacen un poco de economía circular y que todo se quede aquí”.
En el mismo sentido se expresó la consejera de Turismo de la Comarca de Cuencas Mineras, Enma Garcés, que coincidió en que el objetivo es acercar ese flujo turístico que tiene la mina al casco urbano. “El Museo Minero es el segundo museo de Tero, el que más gente atrae detrás de Dinópolis, o sea, me parece que es un puesto muy representativo y en Escucha se tiene que ver esa repercusión dentro del pueblo. Es una muy buena iniciativa para atraer más a la gente”, dijo.
Garcés no descartó que esta experiencia se pueda exportar a otros municipios de la comarca porque, explicó, “Escucha no es el único que tiene patrimonio (minero), sí que creo que es uno de los que mejor provecho les está sacando y que me parece que tiene unas iniciativas buenísimas, pero por supuesto que puede ir a más municipios o incluso a una mayor explotación en el mismo municipio de Escucha”.
Pese a su preestreno, la Casa Museo no abrirá sus puertas al público hasta el mes de mayo. “La idea es abrirlo cuando llegue la temporada alta, que empieza a partir de mayo”, confirmó Peña. En el tiempo entre la presentación y su apertura, el Ayuntamiento tratará de componer una bolsa de voluntarios para que, en turnos de cuatro personas, atiendan cada fin de semana tanto la Casa Museo como el pozo Pilar. Para ello se abrirá un listado en el que los interesados pueden apuntarse indicando su disponibilidad con el que se confeccionará, más adelante, el calendario de apertura.
Para la puesta en marcha de este recurso se han invertido 70.000 euros del Fondo de Inversiones de Teruel y 28.000 de la Diputación de Teruel, además de las aportaciones que ha hecho el Ayuntamiento de Escucha y las donaciones de enseres de los vecinos.
Segunda vida
Maria Ángeles Latorre, vecina de Escucha afincada ahora en Zaragoza, fue de las primeras visitantes de la Casa Museo. Latorre reconoció nada más salir del edificio que sí que se había reconocido en la recreación de la vivienda de una familia minera. Y no es raro que se reconociera porque, de hecho, María Ángeles es una de las muchas hijas de Escucha que han colaborado con el proyecto aportando elementos de la época para la musealización del espacio.
María Ángeles Latorre se pudo reconocer en algunas de las fotos que hay guardadas en una caja de latón en la sala de estar, sobre una mesa camilla con brasero de carbón porque fue ella quien las aportó.
La teniente de alcalde de Escucha explicó que los vecinos que habían aportado enseres no conocieron hasta el mismo sábado la disposición de esos objetos dentro de la estructura de la vivienda minera. Además, previó que después de la jornada de puertas abiertas sean muchos más los vecinos que desempolven sus objetos antiguos para aportarlos a la visita.
La consejera comarcal de Turismo también incidió en este aspecto, destacando que la musealización ha permitido darle “una segunda vida a todo lo que nos ha representado durante tanto tiempo”.
Aunque la intención del Ayuntamiento de Escucha era presentar el nuevo recurso turístico a sus parroquianos, también hubo turistas entre los visitantes en la premier de la Casa Museo Familia Minera. Ese fue el caso de la familia Llorens, de Gandía, que pudieron pasear entre los enseres de la familia minera antes de bajas a la mina. “Está muy bien recreado y muy bien representado”, aseguró Juan José Llorens. Su hija, de veinte años, valoró, sobre todo, la experiencia de realidad mixta. “Muy bien adaptado, sobre todo a las nuevas tecnologías con el iPad, recreando las cosas porque hay veces que no te lo puedes imaginar si no lo ves”, expresó.
A través de la tablet
Pasear por la cantina o el economato de un barrio minero de los años sesenta es posible en Escucha gracias a la implementación de la técnica de realidad mixta que se ha implantado en la Casa Museo Familia Minera de Escucha, que ofreció a sus vecinos una jornada de puertas abiertas.
La planta baja del inmueble, que supone el comienzo de la visita, consta de dos estancias diáfanas que los turistas mirarán a través de la pantalla de las tablet que se facilitará durante visita para ver en un formato híbrido entre realidad y realidad aumentada.
“Cada persona llevará una tablet con auriculares”, explicó la teniente de alcalde, Tania Peña. De esta manera, cada cual puede arrancar la experiencia virtual cuando sea oportuno sin sufrir ni provocar molestias por el sonido del resto de dispositivos en la sala.
En cada uno de los espacios los protagonistas explican de forma campechana y con sonoros localismos cómo era la vida cotidiana. En la planta baja se puede visitar la tienda y la cantina de forma totalmente virtual, mientras que la realidad aumentada se mezcla con elementos reales en la primera planta en el dormitorio, el pasillo y el palomar para, como broche final, despedirse a la salida mientras un minero carga carbón para la estufa.
La empresa encargada de la creación del espacio virtual ha sido la firma turolense Imaginando Universos, del Matarraña.
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