Jabaloyas apela a su nueva catalogación ambiental para detener una mina

El Ayuntamiento de Jabaloyas ha remitido sendas comunicaciones al Departamento de Economía, Empleo e Industria del Gobierno de Aragón y a la compañía Industria de Transformaciones, S.A. (Intrasa) informando a las dos partes de que tras la inclusión de parte del término municipal en la Red Natura 2000 y su calificación como Reserva de la Biosfera, “las condiciones que permitieron la concesión del Permiso de Investigación han variado significativamente con posterioridad”.

Por ello, el alcalde Óscar Castillo ha solicitado al Ejecutivo regional la revocación del permiso de investigación y su plan de restauración de arcillas y arenas para la mina Antonio 1, que se proyecta en los términos municipales de Jabaloyas, Albarracín y Toril-Masegoso, otorgado el pasado mes de diciembre y cuya tramitación se inició en 2017.

Así pues, el Consistorio solicita dicha revocación de los permisos de investigación al entender que “dadas las condiciones actuales y la variación significativa de las circunstancias consideradas en su momento para otorgar dicho permiso, siendo que las actuaciones contempladas afectarían zonas especialmente protegidas”.

Por otra parte, en la misiva remitida desde el Ayuntamiento a la empresa Intrasa se insiste en la modificación del escenario en el que le fueron concedidos los permisos de investigación “siendo, en estos momentos absolutamente inviable el sólo hecho de realizar sondeos, ya que conllevarían ejecutar las actuaciones en entornos naturales protegidos, pudiendo ser calificadas de delitos medioambientales”, explicó la carta.

Por ello, se avisa a la compañía de que “el inicio de los sondeos nos abocará a iniciar un expediente de paralización de los mismos para tratar de proteger un entorno natural calificado legalmente como tal, intentando evitar, antes de que sea demasiado tarde, daños irreparables en el paisaje, flora y fauna, así como en la riqueza geológica de la zona” y se advierte de que “en el hipotético caso de que se hicieran los sondeos y fueran favorables, nunca se podría otorgar una concesión de explotación en una zona especialmente protegida, así que, dichos sondeos, no servirían para nada”, conminando ala firma a “desistir de la realización de la investigación”.