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El PSOE-Teruel defiende la permanencia de la presa de Los Toranes y su catalogación como BIC El PSOE-Teruel defiende la permanencia de la presa de Los Toranes y su catalogación como BIC
Mayte Pérez, tercera por la izquierda, junto a otros responsables y cargos socialistas que han visitado hoy Los Toranes

El PSOE-Teruel defiende la permanencia de la presa de Los Toranes y su catalogación como BIC

Los ayuntamientos afectados se dirigirán al Ministerio de Cultura y a la Confederación del Júcar
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El PSOE Teruel reivindica la permanencia de la presa de Los Toranes y brinda todo su apoyo a los vecinos y ayuntamientos afectados que tratan de paralizar la demolición de una infraestructura que aporta “múltiples beneficios”, tanto hidráulicos, medioambientales y económicos, a gran parte de la Comarca de Gúdar-Javalambre. Con el objetivo de salvaguardar el futuro de la zona, los ayuntamientos afectados remitirán una carta al Ministerio Cultura y a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para solicitar la apertura de un expediente que proteja el patrimonio industrial de la presa, de la central hidroeléctrica de Albentosa-Los Toranes y la acequia de El Diablo, informa una nota de prensa del partido.

“Mantener esta infraestructura es vital para muchos pueblos del entorno. La presa ofrece grandes posibilidades para el regadío de la zona, tiene una función de prevención de incendios y, además, la central hidroeléctrica sigue siendo rentable a la hora de generar energía renovable”, dijo Mayte Pérez, secretaria general del PSOE Teruel, durante la visita realizada hoy a la presa de Los Toranes, en el término municipal de Olba.

Junto a ella acudieron el diputado en el Congreso, Herminio Sancho, el diputado autonómico Ángel Peralta, el diputado provincial Diego Piñeiro, el presidente de la Comarca Gúdar-Javalambre y alcalde de Rubielos, Ángel Gracia, y varios alcaldes y concejales de los ayuntamientos afectados como Federico Martín, primer edil de Olba, Yolanda Salvador, alcaldesa de Albentosa, y José Edo, concejal de Alcalá de la Selva y presidente de Agujama.

La presa

La problemática de la presa de Los Toranes se remonta a noviembre de 2019, cuando el Ministerio de Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) declaró extinguido, por el transcurso del plazo de la concesión, el derecho de aprovechamiento de las aguas del río Mijares en la central hidroeléctrica de Albentosa-Los Toranes.

Una decisión que, además, ordenaba a Iberdrola, titular del permiso, a demoler la presa y las instalaciones construidas para el buen funcionamiento de la central.

En estos momentos, Iberdrola dispone de un plazo de seis meses para presentar un plan de demolición. “El tiempo juega en nuestra contra y se nos acaban las opciones para evitar el derribo de la presa”, indicó el alcalde de Olba, Federico Martín. Con el objetivo de intentar proteger la infraestructura, la Comarca de Gúdar-Javalambre y los ayuntamientos afectados están preparando un escrito para solicitar al Ministerio de Cultura y al CHJ la apertura de un expediente de protección para la presa de Los Toranes y su catalogación como Bien de Interés Cultural.

Cabe recordar que el Gobierno de Aragón inició en mayo el expediente para la declaración de la presa de los Toranes, la central hidroeléctrica de Albentosa-Los Toranes y la acequia de El Diablo como Bienes Inventariados del Patrimonio Cultural Aragonés, pero finalmente éste no prosperó porque son infraestructuras que son propiedad del Estado y debe ser el titular el que lo catalogue como BIC.

Medio Ambiente

“Fue un palo tremendo, pero vamos a seguir peleando por proteger una parte importante de nuestro patrimonio histórico. Queremos que desde el Ministerio comprendan lo importante que son estas infraestructuras para nosotros y para eso tienen que escucharnos”, subrayó el presidente de la Comarca Gúdar-Javalambre, Ángel Gracia.

Por su parte, el consejero de Agricultura, Ganadería y Medioambiente del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, envió una carta en enero al secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, en la que rechazaba la propuesta de demolición de la presa de Los Toranes. Asimismo, Olona aseguraba que la continuidad de la presa, y de los usos asociados, “no resulta incompatible con los objetivos de protección medioambiental” señalados por el Ministerio.

A día de hoy, los municipios que antes se beneficiaban del agua que bajaba por la acequia del Diablo llevan meses sin poder regar sus campos, concretamente desde que el Miteco acabara con la concesión de Iberdrola. “Seguimos esperando alternativas, pero lo cierto es que la única que consideramos viable es que la central vuelva a funcionar. Se han puesto encima de la mesa otras opciones para bajar el agua, pero lo cierto es que son demasiado caras e inasumibles para la comunidad de regantes”, comentó Federico Martín.

En este sentido, Mayte Pérez defendió la continuidad de la presa, además de por los beneficios hidráulicos para los regadíos de la trufa, como mecanismo de prevención de incendios de una zona de gran valor medioambiental.

“En esta zona existe una zona de captación de agua para los helicópteros que se perdería en caso de que se demoliera la presa, y ya vimos lo importante que fue este recurso para actuar rápidamente en el incendio de los Giles de 2017. Hay muchas razones para defender que la presa sigue en pie y las gentes que viven en el territorio, los vecinos, lo están demandando”.

No es un capricho

“Mantener la presa no es un capricho, es defender el sentir popular de una zona que ha convivido durante años con una infraestructura que aporta muchas más ventajas que inconvenientes. La presa está adaptada en el entorno y derruirla provocaría graves perjuicios en la zona. Provocaría desajustes en el entorno y los lodos serían un gran problema para el río Mijares”, destacó Ángel Gracia.

Por su parte, el alcalde de Olba sigue poniendo el acento en la necesidad de buscar alternativas para el mantenimiento de la presa de Los Toranes y para que la central hidroeléctrica vuelva a estar en funcionamiento.

“En su momento no entendimos porque se paralizó la concesión de la explotación y seguimos sin entenderlo. Estamos hablando de una infraestructura que genera energía totalmente limpia y que es rentable. Quizás se podría impulsar otra concesión a una empresa privada o incluso crear una empresa pública de energía que dejase beneficio en los pueblos de la zona”.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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