El autobús escolar llega por primera vez a Rubiales tras décadas pidiéndolo
Padres y Ayuntamiento habían solicitado la inclusión del pueblo en la rutaCon emoción e incluso incredulidad recibieron los vecinos de Rubiales el pasado 9 de enero al autobús escolar. El pueblo se ha incluido por primera vez en la ruta de transporte escolar para trasladar a un alumno de 6 años después de décadas de peticiones sin respuesta.
La madre del pequeño, Alba Blanco, explica que lo solicitó en numerosas ocasiones, desde que su hijo empezó el colegio, al Gobierno de Aragón y ha sido ahora, a través de las gestiones realizadas por el Ayuntamiento, cuando por fin se ha logrado. Una petición que conoce bien puesto que hace 40 años ya la formularon sus padres para ella y su hermano pero que, sin embargo, nunca la vieron cumplida.
Mediación del consistorio
La madre comenta que hasta ahora le respondían que su hijo no tenía edad para la escolarización obligatoria, algo que ahora sí se cumple puesto que el pequeño cuenta ya con 6 años y ha empezado Educación Primaria. La madre reconoce que la mediación del Ayuntamiento y del alcalde, José Antonio Soriano, ha sido fundamental para conseguir la inclusión del pueblo en esta ruta de transporte de la Sierra de Albarracín.
“Empezaron ya mis padres con esta lucha hace 40 años, cuando íbamos al colegio mi hermano y yo, pero no lo consiguieron y ahora nosotros hemos vuelto a solicitar la parada. Llevan tres años negándomela, pero por fin esta semana, el 9 de enero llegó al autobús para recoger a mi hijo”, apunta.
Sus padres, al igual que ella hasta esta semana, llevaban a los niños hasta El Campillo, donde les recogía el autobús que hace la ruta de Valdecuenca y Bezas. Rubiales se ha incluido ahora en este circuito. Su incorporación supone un desplazamiento de 5 kilómetros, pero ha marcado un antes y un después en la familia de Alba Blanco, que tiene otra hija que en un par de años utilizará también el transporte para ir a clase.
Desplazarse todos los días hasta El Campillo suponía una fuerte atadura y el hecho de que Rubiales careciera ya no de colegio, sino también de transporte escolar, ha cerrado durante años muchas puertas para la llegada de nuevos pobladores. En la localidad apenas ha habido niños en las últimas décadas, algo que puede cambiar al contar con este servicio. Rubiales está muy cerca de Teruel, pero coger el coche todos los días para llevar al niño hasta la ruta escolar suponía una importante atadura para las familias.
El autobús no entra al pueblo puesto que la única familia que ahora lo utiliza vive a las afueras y lleva al niño a la carretera. Alba Blanco reconoce que fue ilusionante ver aparecer al autobús el lunes: “Mi madre estaba emocionada, casi llorando”, relata.