Aliaga saca a concurso dos licencias de taxi para trasladar a los senderistas de las pasarelas de los Estrechos de Valloré

El Ayuntamiento de Aliaga ha sacado a concurso dos licencias de taxi para atender a los turistas que completan el tramo de sendero y pasarelas de los Estrechos de Valloré entre este municipio y Montoro de Mezquita. La enorme aceptación que ha tenido el último tramo de los senderos de Valloré inaugurado el pasado 28 de marzo con pasarelas voladas a más de 12 metros del cauce del río ha motivado que el Consistorio haya apostado por ofrecer el servicio de traslado de los turistas de una localidad a la otra después de haber completado los más de 21 kilómetros del recorrido.

El lunes, el alcalde de Aliaga aprobó sacar el servicio de “remonte” con dos taxis a concurso.

“El sendero tiene unos 21 kilómetros y aunque  se puede hacer en fases de manera circular subiendo a los miradores  que lo jalonan a los lados, hay gente que lo quiere hacer lineal”, explicó el alcalde Sergio Uche. Por ello, “de acuerdo con la gente del Maestrazgo”, el Consistorio aliaguino  solicitó disponer de dos licencias de taxi para el municipio. Para ello se habló con el Gobierno de Aragón y con la Asociación Aragonesa de Taxi para ofrecer el “servicio de remonte en taxi del sendero” de manera que la gente que baje a Montoro pueda quedar con el taxista para que les recoja en algún punto.

El servicio se prestará con vehículo todo terreno 4x4  con nueve plazas para recoger a la gente y poder devolver a los pasajeros hasta donde hubieran dejado aparcados sus coches. Y el servicio se podrá prestar en los dos sentidos entre Aliaga y Montoro.

El servicio d e taxi saldrá por un “precio simbólico”, adelantó el alcalde, para el que lo importante “es dar servicio y generar empleo”.

Gran aceptación

Aliaga ha logrado el objetivo de multiplicar el turismo de deporte y naturaleza con la construcción y adecuación del sendero de los estrechos de Valloré. El PR-TE 10 se ha convertido en uno de los atractivos de turismo activo de la zona y es frecuente ver cómo los espacios de aparcamiento se llenan de coches de visitantes cada día festivo.  Uche lamentó no haber contabilizado los accesos pero estima que cualquier día se superan holgadamente los 400 visitantes. “No se han hecho aforos pero, por ejemplo, en Semana Santa en un solo aparcamiento había más de 70 vehículos por lo que contando una media de tres personas por coche  suma más de 200 personas. Y en los demás aparcamientos estaría igual. En un día festivo se pueden meter más de 400 personas”, explicó el alcalde.

Ese flujo de gente ha tenido la repercusión directa en la economía local. “La gasolinera, la tienda y los bares lo han notado. Para comer es imprescindible reservar con antelación. Desde que se abrieron las pasarelas, si no reservas te puedes encontrar  con que no tengas dónde comer”, explicó Uche.

El tramo de los estrechos de Valloré, que fue el último en inaugurarse y en el que se han invertido cerca de 400.000 euros, es el que más expectación está despertando. Además de por la novedad, las pasarelas voladas a más de diez metros sobre el cauce del río Guadalope se ha convertido en un atractivo turístico de primer orden.