Una olivera con 20 aceitunas, una por cada municipio, representará mejor al Bajo Aragón

Una olivera centenaria con 20 aceitunas en su copa, una por cada uno de los municipios integrantes, es el nuevo logotipo de la Comarca del Bajo Aragón.

La nueva imagen de marca, que sustituye a las ventanas de la Torre Gótica de Alcañiz por algo que identifica a todos los municipios sin excepción, fue aprobada el jueves por el consejo comarcal y ayer fue presentada durante la celebración del Día Mundial del Olivo en Jaganta. 

A raíz del proyecto Tierra de Centenarias “decidimos cambiar el logo de la comarca por algo que realmente nos identificase a todos los bajoaragoneses”, dijo el presidente comarcal, José Miguel Celma. “Buscamos un artista del territorio que diera forma a nuestra idea y lo ha conseguido, con detalles sugerentes que a todos nos va a gustar y, sobre todo, con los que nos vamos a identificar”.

La artista, Ángela Pérez, explicó en un artículo anterior que el logotipo “está inspirado en los olivos centenarios y milenarios que caracterizan nuestra comarca”. Tomó como referencia varias de las oliveras catalogadas y documentadas por el proyecto Tierra de Centenarias. 

“Los colores seleccionados evocan esa misma esencia, con tonalidades de verdes y tierras que reflejan el paisaje. En cuanto al estilo, he optado por líneas y formas limpias y minimalistas, de modo que funcione bien en cualquier tipo de soporte. La tipografía es similar a la anterior, pero con un mayor grosor y acabados más contemporáneos para darle un aire actualizado y robusto”, concluyó. 

La olivera representada destaca por su gran zueca, con la base abierta. “Después de la helada de 1956 no salían olivas y había que, o arrancar, o aprovechar”, dijo el presidente. De modo que los huecos que presentan los árboles legendarios son porque de ellos se sacó leña para calentarse.

“Tenemos que ponernos en valor como territorio y comarca”, dijo Celma, quien explicó también los fondos amarillo, negro y verde que acompañan al logo, en relación al color de aceite, el color de las olivas y el color de los paisajes de olivares. 

Acompañó el acto a las puertas de la iglesia de Jaganta, entre otras autoridades, la directora general de Administración Local del Gobierno de Aragón, Marina Sevilla, quien subrayó que la Comarca del Bajo Aragón, dentro de sus competencias, se esfuerza por “fomentar la actividad cultural y tradicional de su territorio”. En particular, “ha apostado por poner en valor lo que la identifica ante todo Aragón, España y el mundo: esas grandes oliveras y esa puesta en valor del aceite que es absolutamente excepcional”.

“Deseo que los ciudadanos del Bajo Aragón sientan su comarca como ese gran árbol que protege a todos, que da cobijo; como esa administración cercana que lucha y defiende a los pequeños municipios para que tengan vida, actividades culturales, que puedan optimizar mejor la gestión de residuos; y les deseo el mejor de los éxitos en el futuro a los vecinos y a su administración comarcal”, concluyó Sevilla.