María Dolores Serrano, presidenta de la Asociación de Amas de Casa de Alcañiz: “La asociación Ercávica de Alcañiz siempre ha estado al servicio de la sociedad”
Destaca el “inmenso voluntariado” con el que cuenta esta agrupación de mujeres alcañizanaMaría Dolores Serrano es la presidenta de la Asociación de amas de casa Ercávica de Alcañiz. Este año 2022 cumple seis años al frente de una de las agrupaciones vecinales de la capital bajoaragonesa que tiene un mayor número de socias. Su reto este año en el que se cumplen los 50 años de la fundación de la entidad es conseguir colocar un ascensor en la sede de la calle Palomar para que las mujeres con dificultades de movilidad puedan acceder a las instalaciones.
-Es presidenta de la asociación de amas de casa Ercávica desde hace seis años y ahora están han celebrado los 50 años de fundación de la entidad. ¿Cómo se llega hasta aquí?
-Estamos muy contentas de haber podido llegar a celebrar estos 50 años, porque ésta es una asociación muy viva, que creo que hace mucha falta. A nuestra sede vienen todas las tardes un montón de mujeres que realizan muchísimas cosas. Tenemos actividades como baile, pilates, bolillos, restauración de muebles, vintage, costura, confección de trajes regionales y manualidades. Pero, lo más importante es la armonía y el buen ánimo que hay en todas las clases.
-¿Cuántas asociadas son?
- La última remesa de cartas que enviamos en el último trimestre fueron 836, aunque desde que se anunció la celebración del 50 aniversario se han inscrito más de 20 mujeres más, por lo que ahora mismo estaríamos superando las 850 asociadas.
-¿Quiénes fueron las fundadoras?
-La asociación se fundó en 1972. La impulsora fue María Dolores Tremps, una señora muy activa, muy inteligente, que fue acompañada de gente como ella, con muchas ganas de hacer cosas. Las primeras mujeres que iniciaron la andadura de Ercávica fueron más de 300 y desde entonces la asociación ha funcionado muy bien. A todas las socias nos gusta hacer viajes y solemos organizar varios al año.
-¿Qué ha representado Ercávica para Alcañiz?
-La asociación es un lugar de encuentro importante donde las mujeres de cierta edad se divierten, hacen meriendas, organizan celebraciones...
-¿Ercávica ha ayudado a que otras personas dejen de estar en soledad?
-Por supuesto. Uno de los proyectos que teníamos previsto poner en marcha era la colocación de un ascensor, porque tenemos una casa en propiedad de más de 600 metros cuadrados, pero que están repartidos en cuatro plantas. Tenemos muchas socias que se desplazan con bastón y para las que subir tantas escaleras representa un problema. Queríamos poner un ascensor para dos personas y teníamos un proyecto. El Ayuntamiento nos prometió, hace seis años, cuando inicié mi andadura como presidenta, que nos ayudarían a costear parte de los gastos, pero resulta que este año, cuando hablamos con el alcalde para tratar del tema, nos dijo que costeáramos los costes y que después pidiéramos ayuda. Nosotras solo queríamos que nos avalaran para sacar un crédito y después ir devolviendo al banco lo prestado. Como no tenemos compromiso del Ayuntamiento, hemos paralizado el proyecto por el momento, aunque no renuncio a terminar de ponerlo en marcha, porque hay personas que necesitan un servicio como este para poder desplazarse.
-¿Tienen la asociación abierta todos los días?
-Está abierta de lunes a jueves, de cuatro a siete de la tarde, y los viernes se reservan, porque a veces organizamos charlas, en alguna ocasión hacemos un rabino al que acuden 50 mujeres, también se aprovechan los viernes para organizar cursos como el de maquillaje para mayores, charlas sobre personalidad y autoestima...
-La asociación suele colaborar en todo tipo de actividades...
- Es que nosotras siempre hemos estado al servicio de la sociedad de Alcañiz. Cuando Alcañiz ha necesitado algo, nos hemos puesto a disposición y hemos tenido la puerta abierta con mucha voluntad.
-¿En qué han colaborado?
-Cuando se hicieron las Jornadas Nacionales del Tambor, las banderolas las hicimos las amas de casa. Nos lo pidió la Junta Suprema de Semana Santa y hubo muchísimas mujeres dispuestas a colaborar. Durante la pandemia, llamó el alcalde, nos dijo que nos necesitaban, porque no había epis ni batas en el hospital. Corrimos la voz y desde sus casas una gran mayoría de mujeres que sabían coser, se pusieron a disposición. Envolvemos los paquetes que traen los Reyes Magos para los niños para que vayan en las carrozas, participamos en el Mercado Medieval... es una asociación importantísima en Alcañiz, porque el voluntariado de la asociación es inmenso y jamás he oído protestar a nadie. Creo que en todas las ciudades y pueblos pequeños es importante que haya personas que colaboren.
-¿Qué es lo más complicado de gestionar en una asociación de estas características?
-Lo más difícil es hacer nuevas juntas, porque las mujeres trabajan y después hay unos años, cuando ya no trabajan, que quieren descansar y, por último, lo que desean es divertirse en clase. Aún con todo, hemos conseguido formar juntas que han colaborado muchísimo, y he de decir que estoy agradecida a todas las compañeras, porque participan en todo y responden en todo.
-¿Cuál es el reto de cara a los próximos años?
-El ascensor, sin ninguna duda. El ascensor es lo más importante y necesario, porque hace falta para ayudar a todas aquellas mujeres a las que les falta movilidad a acercarse a la asociación, porque muchas dejan de hacerlo por no subir los tres pisos de la vivienda. Y, aparte del ascensor, lo que deseamos es seguir como estamos ahora, que somos felices y lo pasamos muy bien.