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La sequía arruina un 15 por ciento de  los almendros de secano en el Bajo Aragón La sequía arruina un 15 por ciento de  los almendros de secano en el Bajo Aragón
Un agricultor cosecha un almendro en Valdeltormo

La sequía arruina un 15 por ciento de los almendros de secano en el Bajo Aragón

La cosecha de 2024 menguará, de media, una tercera parte en toda la margen derecha del Ebro
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La sequía reducirá un 35% la cosecha de la almendra con respecto a lo previsible en la margen derecha del Ebro y la merma llegará al 50% en los árboles de secano en zonas como el Matarraña, según apuntan los agricultores en el ecuador de la campaña. En las zonas más extremas se han secado un 15% de los almendros, que habrá que reponer y no producirán en términos de rentabilidad hasta dentro de seis años.

No son buenas las sensaciones del sector del fruto seco turolense mediada la campaña de este año. La sequía se ha cebado con las producciones de secano y también ha afectado al regadío porque, por zonas, se ha regado hasta un 40% menos de lo habitual debido a la escasez de reservas en el sistema del Guadalope.

Esto ha hecho que, aunque la floración ha sido buena, “el cuajado del fruto no lo ha sido: la almendra se ha quedado muy pequeña; cuando despellejamos se queda la pepita por cualquier agujero de la máquina y muchas pelonas se quedan cerradas, no abren, o salen con poco peso”, dijo el productor y responsable de Frutos Secos de UAGA, David Andreu, que estimó que la cosecha en Aragón se quedará por debajo de las 18.000 toneladas cuando estaba estimada en 22.000 antes del verano.
 

Diferencia de calibre entre las almendras (secano) de 2023 y las de 2024 en Valdeltormo


Esta merma del 20% en las previsiones será mucho más acusada en la margen derecha del Ebro, desde Cariñena hasta el Matarraña. “Por lo menos habrá un 30-35% menos de almendra en el Bajo Aragón”, indicó Andreu, quien alertó: “Tenemos un problema grave en los secanos, donde hay daños estructurales de un 10-15% de árboles que se han secado” debido a que, hasta las lluvias de agosto, no ha llovido en condiciones desde los 60 litros que cayeron hace un año.

El último aporte hídrico, de media unos 45 litros en la Tierra Baja, no ha sido suficiente como para salvar ni la cosecha de este año ni algunos árboles, por lo que “igual que se habilitan ayudas para el cereal necesitamos ayudas para reponer estas plantaciones secas”. Las nuevas no serán rentables hasta el cambio de década. Una necesidad que trasladarán al Gobierno de Aragón en próximas reuniones.

4,20 euros el kilo

En cuanto a precios, “en convencional están repuntando” desde los 3,20 euros del inicio de la campaña a los 4,20 euros de estos días, mientras que “la ecológica, para sorpresa del sector, no ha repuntado nada y se queda en torno a los 5,15 euros”, dijo Andreu, quien mostró su sorpresa porque “en el sur se está pagando 50 céntimos más que aquí”.

David Filloy, agricultor de Valdeltormo, corroboró que la floración fue “muy buena” pero la sequía acabó por arruinar la pepita porque no llovió hasta las tormentas de agosto. Además, “este año el árbol tiró almendra de una manera espectacular, como mecanismo de supervivencia”, indicó este productor, que ratificó que piel y pepita se van este año por el mismo hueco en las peladoras, lo cual genera “una merma muy grande”.

Con todo, Filloy calculó que en las zonas de Valdeltormo y Calaceite se ha perdido entre un 40 y un 50% de la cosecha, mientras que en ubicaciones “más extremas, de Valdealgorfa a Alcañiz”, el porcentaje puede llegar, por zonas, hasta el 60%.

“El campo está agonizando”

Con todo, “este año va a ser bastante malo para la agricultura porque con la sequía no va a haber una aceituna en ningún sitio” y para 2025 las previsiones son malas en todos los cultivos de secano “salvo que empezara a llover habitualmente”.

“El campo está agonizando. El año pasado no hubo aceituna, el cereal ha sido ruinoso y la merma en la almendra ha sido bastante grande. Como venga otro año como este, muchos agricultores plegarán. Encima nos han reducido la PAC un 20-30%. ¿Qué hacemos entonces? La inversión en maquinaria hay que amortizarla”, reflexionó Filloy, que descarta que, en caso de construirse las reivindicadas balsas laterales del Matarraña, los que están en el secano se transformaran al regadío por la incertidumbre actual. Además, “somos menos gente pero cada vez gastamos más agua”, dijo, principalmente por las granjas.

El gerente de Frutos Secos Gil, Albert Gil, subrayó que “en regadío están saliendo kilos”, principalmente en el Ebro, pero “el secano está sufriendo mucho”, con una pepita de un calibre muy inferior. “El problema es que el año que viene puede ser inferior aún”, alertó.

Esta empresa, afincada en Valderrobres, emplea a 16 personas en campaña. Compra almendra en toda España y la vende por toda Europa, por lo que tiene una visión general del sector. “Como en los Pirineos llovió bastante el Ebro está bien y los regadíos están produciendo, pero la zona de Teruel es la que más déficit de agua lleva”, concluyó Gil.

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