La Mochiganga de Mas de las Matas echa mano de molinos y robos para hacer crítica social

Crítica con humor y sarcasmo en la Mochiganga de este 2023, recitada este sábado por el masino Luis Borras a la salida de misa, con más versos que otros años y no poca crítica política y algún escarnio social, eso sí, con mucho respeto y sin pasarse más de las cuenta. De la primera hubo ración para los políticos, los proyectos eólicos y la inflación, y de lo segundo para la fiesta del Comendador, los robos en el pueblo, los corrillos de bar y también alguna borrachera.

La Mochiganga arrancó como toca, dando la bienvenida a toda la autoridad, cura y sargento incluidos, pero, sobre todo, a San Antonio Bendito, patrón del pueblo en estas fiestas de invierno.

Tres estrofas dedicó el recital “a los políticos de Teruel”, a quienes se acusó de hacer “tanto caso a Zaragoza”. Y, como no podía ser de otra manera, la sensibilidad por los paisajes de la provincia afloró enseguida en estos versos, que fueron acompañados por varias interrupciones de aplausos de la concurrencia: “lo único que os complace/ es llenarnos de molinos/ miles de placas solares/ y arcillas pa los vecinos”, decía una de las estrofas. La siguiente seguía así: “los que nos traéis molinos/ no tenéis conocimiento/ nos engañáis como a chinos/ Forestalia a tomar viento”. 

Y, finalmente, una última: “pero luego habrá sorpresa/ al repartirnos los euros/ un millón para la empresa/ y un euro ‘pa’ los del pueblo”.

Otro tema social que afloró en la composición de este 2023 fueron los robos que han sufrido distintos domicilios del pueblo. !“Nos vigila la secreta/ la guardia civil nos para/ los cacos tienen más jeta y se ríen en la cara”.

Y como los agricultores y San Antón son los protagonistas de esta festividad de invierno, no podía faltar una alusión en la declamación a uno de los problemas de los que más se ha hablado en los últimos meses: “agricultores masinos/ nos podemos preparar/ que hasta los restos de poda/ no quieren dejar quemar. / Igual ahora reculan/ y nos los dejan quemar/ cobra igual el que regula/ lo haga bien o lo haga mal”.

Temas más intrascendentes

Además de los asuntos serios, también hubo estrofas para cuestiones más insignificantes: “en los bares y tabernas/ se juntan por la mañana / gentes con poca faena/ con gente que no hace nada./ A estos corrillos de bar/ es conveniente asistir/ pues se suele criticar/ a todo el que no está allí”. Y como no, no podían faltar las alusiones a las próximas elecciones municipales: “Los afines al partido/ se esconden por las esquinas/ la alcaldesa ya ha salido/ a buscarlos ‘pa’ las listas”.

Y, antes de terminar con el típico pareado “nada en la vida es mentira/ nada en la vida es verdad” con el que acaba cada año la Mochiganga, Luis Borrás mencionó a aquellas personas que no han podido escuchar este recital por haber fallecido en el último año, lo que arrancó nuevos aplausos del vecindario.

Tradiciones populares

El recital de La Mochiganga tuvo lugar al terminar la misa y la procesión de San Antón, a la que asistió la Corporación, con su alcaldesa a la cabeza, María Ariño, que estuvo acompañada de la consejera de presidencia del Gobierno de Aragón, Mayte Pérez, del presidente de la Diputación, Manuel Rando, y del diputado delegado de Turismo, Diego Piñeiro, entre otros. Rando, hizo hincapié en la importancia de mantener tradiciones populares como ésta: “hay que dar a conocer estas fiestas, primero porque son fundamentales para conocer a nuestros pueblos, patrimonio cultural para transmitir nuestra forma de ser y de entender la vida, pero también porque suponen una gran oportunidad para la atracción de visitantes, como recurso turístico en una época que está fuera del periodo estival”, señaló. Para Rando, “la Mochiganga es un sano ejercicio común y hay que entenderla dentro de la jocosidad que tiene”, enfatizó, aunque matizó, también en tono de humor, que “se han olvidado de decir que a Mas de las Matas nunca ha llegado tanto dinero de la Diputación”.

También la consejera de presidencia, Mayte Pérez, resaltó que “utilizar el humor y la ironía es un buen ejercicio para hacer un análisis de la realidad, que puede ser real o algo más distorsionada”. En cualquier caso, Pérez destacó la importancia de “recuperar estas tradiciones después de los años de pandemia, y hay que ponerlo en valor”.

Finalmente, la alcaldesa, María Ariño, consideró que “la gente dice sus opiniones en La Mochiganga y los políticos estamos aquí para tomar ejemplo; son un conjunto de versos que, de forma jocosa, propone mejoras a hacer en el pueblo”. En relación a la festividad de San Antón, la alcaldesa enfatizó la relevancia que se le da en el pueblo: “solo hay que ver la cantidad de mujeres que se visten para repartir el pan bendito”, observó. Defendió el mantenimiento de las tradiciones y señaló que el Ayuntamiento seguirá apoyando a la cooperativa del campo en la organización de una festividad como la de este fin de semana.