El Mitma sacará "poco a poco" este 2022 las licitaciones de la redacción de proyectos que faltan de la futura autovía A-68

El secretario general de Infraestructuras del Mitma, Xavier Flores, aseguró este martes que durante este 2022 “irán saliendo poco a poco” las licitaciones para las redacciones de los proyectos que faltan por desatascar de la futura autovía A-68, un “eje vertebrador” entre Zaragoza y el Mediterráneo por el Bajo Aragón que el ministerio quiere seguir “impulsando”.

Flores recordó que el tramo entre El Burgo de Ebro y Fuentes de Ebro (Zaragoza) está con “obra lanzada” hoy día, algo que “mejorará la relación de Alcañiz hacia Zaragoza”.

Además, “estamos redactando los proyectos de la A-68 entre El Regallo y Alcañiz, y entre Alcañiz y las Ventas de Valdealgorfa”, explicó, de la misma forma que el tramo entre Fuentes de Ebro y Quinto de Ebro (también en la provincia de Zaragoza). Todos ellos “son proyectos importantes que han de mejorar y configurar esta auténtica A-68, ese eje vertebrador”, manifestó.

Preguntado por los tres tramos que aún están sin licitación de proyecto (Quinto de Ebro-Azaila, Azaila-Híjar e Híjar-El Regallo), explicó que serán impulsados “durante el año” 2022, porque el compromiso del Mitma es “dar continuidad a todo”, aunque “irán saliendo poco a poco”.

Cabe recordar que los tramos que faltan son los que menos prioridad tienen para el ministerio, según el estudio informativo de la A-68 entre Fuentes de Ebro y las Ventas de Valdealgorfa que determina una longitud de 88,5 kilómetros de autovía entre los puntos kilométricos 118 y 208 de la carretera nacional N-232 que conecta Vinaròs (Castellón) con Santander (Cantabria).

El primer tramo a construir será el que va de Fuentes a Quinto (del kilómetro 74,035 al 88,540), según la priorización que hace la Dirección General de Carreteras “por la demanda de tráfico y su proximidad a Zaragoza y a las variantes de El Burgo y Fuentes”, además de “por la longitud de la travesía de Quinto”.

Los dos tramos entre las Ventas de Valdealgorfa y El Regallo (del kilómetro 0 al 16,120 y de ahí al 30,840) son los segundos en orden de prioridad   -ya en redacción-, mientras que de Puigmoreno a Híjar (hasta el kilómetro 45,930) adopta una cuarta categoría. Terceros en el orden de prevalencia son los dos trazos entre Híjar y Quinto (del 45,930 al 60,320 y de ahí al 74,035), que según la prioridad deberían ser los siguiente en licitar.

Con “A de autovía”

Por otra parte, Flores aseguró que la A-40 entre Teruel y Cuenca será “autovía porque es lo que significa la letra A”, de lo contrario “tendría otra calificación”. Por ello, instó a otras formaciones políticas a no “buscar polémicas estériles sobre qué se dice o cómo”, pues “no sé si nos ayuda, no sé si contribuye a avanzar y realmente a determinar lo que necesitamos”.

“Lo importante es que haya un estudio” informativo, dijo, “que además, por suerte para todos, se someterá a información pública” y “todos lo podremos ver, podremos alegar y decir lo que opinamos” con “total transparencia para todo el mundo”.

El secretario general aseguró que el nuevo estudio, ahora en redacción, “cumplirá estrictamente lo que determina la Declaración de Impacto Ambiental negativa que hubo en su momento” porque “lo que se espera es poder superarla y demostrar que vamos a hacer un proyecto de la A-40 que cumplirá con todas las prescripciones medioambientales”.

N-230 y variantes

Por otra parte, Flores explicó que el Mitma iniciará en marzo o abril, una vez que se adjudique y formalice el contrato que se licitó en septiembre de 2021, la mejora de la conexión de la N-330 con la variante de la N-234 en Teruel, adecuación de accesos y mejora de la seguridad vial entre Villastar y Teruel.

Además, recordó, se trabaja en la redacción del proyecto de la variante de Utrillas (N-420) y “estamos a punto de licitar la variante de Montalbán (N-211)”. También “tenemos en cartera, para poder impulsar, las variantes de Calanda (N-211) y de La Mata de los Olmos (N-211), con el fin de “mejorar las infraestructuras y, al final, la calidad de vida y la competitividad del territorio”, zanjó.