Desalojados del Muro de Santiago de Alcañiz por las obras de emergencia y sin alquiler

Llevan desalojados desde el mes de junio de 2022 de la vivienda que tenían alquilada en el segundo piso de la calle Muro de Santiago 75. Desde entonces viven junto a su hijo en un piso pequeño. Llevan meses intentando acordar con el Ayuntamiento el alquiler de un piso que no llega y su situación es, aseguran, “desesperada”.

Así lo explican María Ángeles Morillas y Miguel Ángel de la Torre, un matrimonio con recursos limitados que fue desalojado del inmueble en el que estaban alquilados después del tornado del verano del año pasado. Se vieron  obligados a salir con lo puesto del número 75 de esta calle, después de que piedras, tierra y agua llegaran arrastradas desde el cabezo de Pui Pinos. La salida era para un día, según les dijo la Policía Local cuando les sacó de allí, pero ya llevan 11 meses sin poder ocupar la casa.

En el interior se quedaron todas sus pertenencias: muebles, ropa, electrodomésticos, fotografías de la familia y recuerdos de toda una vida que siguen en el interior de este inmueble en cuya parte posterior se están realizando las obras de emergencia que acomete el Ayuntamiento desde que se produjo el desprendimiento del cerro y que se intensificaron tras aquel temporal que conllevó el tornado y que obligó a cerrar la travesía de la carretera nacional 232.

Ahora, semanas después de que el paso por la carretera se haya vuelto a autorizar, el inmueble sigue sin poderse ocupar, aunque “ahora ya podemos acceder sin necesidad de que nos acompañe la Policía Local”, explica María Ángeles Morillas, de baja laboral tras regentar durante años un bar y que asegura que la situación la está destrozando anímicamente: “no dejo de llorar cada día, porque no vemos salida”.

Propuesta

La última propuesta que planteó la pareja al Ayuntamiento fue que se les pagara la mudanza hasta Guadalajara, donde residen dos de sus hijas y sus cuatro nietos. Allí, afirma, aspira a poder alquilar un piso, algo que le ha resultado “imposible” desde que salió de su domicilio. Señala que “ninguna inmobiliaria quiere alquilarles si el alquiler ha de estar a nombre del Ayuntamiento, porque dicen que pagan tarde y mal”. Así que, de momento, siguen ocupando la vivienda de su hijo, que “es un piso que tenemos que dejar, porque la propietaria lo necesita y ya nos ha hecho un favor dejándonos estar más tiempo”, añadió la afectada.

En el piso de la calle Muro de Santiago, María Ángeles y Miguel Ángel muestran el escrito presentado en el registro del Ayuntamiento en el que solicitaban ayuda para realizar la mudanza con todos sus enseres. “Lo presentamos, pero nos han contestado que no hemos entregado la documentación, y estamos desesperados”, enfatiza la mujer, que amenaza con “irme a vivir al piso de Muro de Santiago y si se hunde todo que sea lo que Dios quiera y le paguen la indemnización a nuestros hijos por lo que pueda pasarnos”.

Lamenta la falta de empatía que ha encontrado en la casa consistorial. “Hasta Cáritas nos ayudó con 350 euros para que pagáramos la fianza del alquiler, pero la devolvimos, porque no quieren alquilarle los pisos al Ayuntamiento”.

A pesar de sus escasos recursos -ella está de baja y él cobra una ayuda de 400 euros- siguen pagando los gastos del piso que tuvieron que abandonar: “unos 12 o 16 euros mensuales del mínimo de luz y casi 40 euros por los servicios de telefonía móvil e internet, que no podemos dar de baja”, explicó Miguel Ángel de la Torre.

La pareja no quiere desprenderse de sus efectos personales. De hecho, está buscando un piso vacío al que puedan trasladar el mobiliario. “El problema es que no hay pisos vacíos y que sean asequibles”, enfatiza Morillo, que denuncia que en este periodo en el que ha estado fuera de su casa “se ha estropeado el frigorífico, que era nuevo, porque alguien entró en la casa y dio la luz desde el contador de la entrada, cuando nosotros la habíamos dejado cerrada y con el frigorífico abierto, que es como deben dejarse los electrodomésticos cuando tienes que pasar una temporada fuera”. Ahora reclama que se le compense la pérdida, pero tampoco ha habido respuesta.

Baldosas rotas

En el piso, un segundo, se observan unas baldosas rotas en el suelo de la cocina, desperfectos que la pareja atribuye a las obras de emergencia que se están llevando a cabo en la parte posterior del inmueble. Además de ello, el agua que entró en la casa durante el tornado ha dejado regueros de tierra en un rincón del comedor y en las escaleras comunitarias de la casa, donde también vivían dos inquilinos más que también fueron desalojados.

Desde el Ayuntamiento de Alcañiz, el teniente de alcalde, Javier Baigorri, explicó que la pareja se encontraba “subarrendada por la empresa Promociones Laivres en el inmueble de la calle Muro de Santiago y desde que se les ha desalojado lo que hecho el Ayuntamiento de Alcañiz es indemnizar al arrendatario”, es decir, a la empresa a nombre de la cual estaba el alquiler del inmueble.

Del edificio, según explicó el teniente de alcalde, “fueron desalojadas dos familias, una de ellas ya encontró vivienda y se les aprobó una indemnización de 280 euros al mes desde junio de 2022, cuando se produjo el tornado, hasta marzo de 2023”. En cuanto a la pareja formada por Miguel Ángel y Maria Ángeles, explicó que “se ha indemnizado al arrendatario, porque ellos son subarrendados”. A la empresa que arrendaba “se le abona el importe del alquiler desde junio de 2022 a marzo de 2023, unos 350 euros al mes”. Baigorri señaló que “a la familia en concreto se le ha aprobado un abono de 108 euros por costes energéticos y 168 por la cuota fija de telefonía e internet” que tienen contratada.

Por otra parte, enfatizó que “es probable que haya otros gastos adicionales, puesto que las obras de emergencia no han concluido y van a seguir en los próximos meses”. No obstante, Baigorri señaló que “son los arrendadores -Promociones Laivres- los que tienen el deber de ofrecer vivienda a los inquilinos que tienen subarrendados”.

En relación a las explicaciones del teniente de alcalde, la pareja desalojada explicó que “ya hemos hablado con la empresa que nos tenía subarrendados, pero nos dice que no encuentra nada para alquiler y que no tiene medios por sí misma para ofrecernos otro alquiler”. Respecto a los costes energéticos y telefonía móvil, negaron haber recibido ninguna cantidad hasta la fecha y manifestaron que“tampoco la empresa Promociones Laivres ha recibido ninguna indemnización por el alquiler, según lo que nos dicen”.