Celma achaca a la DGA y la burocracia de la UE el fiasco del PSTD de Beceite

El alcalde de Beceite, Juan Enrique Celma, echa balones fuera tras haberse visto obligado a renunciar a una subvención de 1.578.000 euros del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino (PSTD). Achaca el no haber podido justificar el 30% de la inversión antes de que acabe el año a la burocracia europea y a la “falta de asesoría prometida por la Dirección General de Turismo”.

En una carta dirigida a los vecinos sin atisbo de autocrítica, Celma argumenta por qué el ayuntamiento se ha visto obligado a devolver el importe que figura en el convenio que firmó con el Gobierno de Aragón para la ejecución del programa, financiado por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia estatal que a su vez se nutre de fondos Next Generation UE.

El PSTD buscaba compatibilizar el auge turístico que vive la localidad del Matarraña con la vida rutinaria de los vecinos. Entre otras actuaciones, figuraba un plan de gestión de accesos a espacios naturales como El Parrizal que evitara la circulación de vehículos dentro del casco urbano. Contemplaba un “aparcamiento disuasorio” a la entrada de la población, desde el que los visitantes se dirigirían a los atractivos naturales con microbuses.

“Cúmulo de circunstancias”

El alcalde achaca a un “cúmulo de circunstancias” la renuncia a una importante subvención de transformación turística que, según aseguró, no se concedió “formalmente” hasta marzo de 2024, tras la renuncia del Gobierno de Aragón al proyecto de Canal Roya en el Pirineo oscense. “Es decir, un año y medio más tarde que el resto de ayuntamientos” beneficiarios de la nueva hornada de PSTD en Aragón y sin posibilidad de prórroga.

Justo en marzo, prosigue el alcalde, la secretaria anterior dejó su puesto y la nueva no se incorporó hasta verano, algo que retrasó la ejecución “cuatro meses más”, aseguró el alcalde.

Celma carga en su argumentario contra la Dirección General de Turismo, que según él le prometió asesoría, y contra “los constantes cambios de criterios proporcionados desde” esta misma dirección. El primer edil critica “la demora en la respuesta a las consultas”, y pone como ejemplo que las planteadas en agosto se comunican en octubre. A esas alturas, los técnicos municipales ya advirtieron del “serio peligro en la ejecución por no disponer del visto bueno en las actuaciones programadas”.

Según Celma, “la demora en la convocatoria de las Comisiones Bilaterales de turismo, celebradas en Madrid cada dos meses, impedían poder adelantar en la ejecución de los cambios”.

Además, señala Celma, “la burocracia con la justificación con Europa a través de sus diferentes plataformas y documentación y certificaciones previas antes de iniciar cualquier actuación llevaron a no poder incluir los gastos de la nueva Oficina de Turismo por haberse ejecutado antes de la comunicación formal de la ayuda, cuando previamente se dijo que sí se incluirían, así como el proyecto de señalización vertical, que en principio se nos dijo que se aceptaba”.

14 proyectos de impacto

Otro escollo, en palabras del alcalde de Beceite, fue “la dificultad de ejecución de las medidas planteadas” en el PSTD, “que implicaban 14 proyectos de impacto ambiental, autorizaciones en CHE (Confederación Hidrográfica del Ebro)” y en Carreteras “que imposibilitan tener los permisos antes de realizar ninguna actuación”. Algunas de ellas incluso “precisaban cambios en los usos del suelo a través de modificaciones de NNSS (normas subsidiarias) en Comisión Provincial de Urbanismo”, apostilla Celma.

El regidor asegura que la Dirección General de Turismo llegó a informar a las entidades beneficiarias de PSTD de que “gozarían de preferencia y prioridad en las tramitaciones ambientales, pero en la última reunión mantenida el pasado 11 de octubre en Zaragoza se cambió de criterio”.

“El PSTD –prosigue la carta– se aprobó por parte del Gobierno de Aragón sin advertir de todas estas dificultades”.

“Las actuaciones planteadas en las zonas de aparcamiento no se aceptaban por no ser de titularidad municipal (no les servía un simple contrato de arrendamiento)”, añade el alcalde, quien indicó que “se miró incluso de adquirir alguna finca pero los precios eran desorbitados” y el coste “no era subvencionable”.

“Todavía estamos esperando la respuesta desde Madrid con los cambios solicitados, para poder cumplir con los requisitos. Estos cambios, de notificarse, tendrían que pasar por un pleno y posteriormente licitarse. Como verán, en las fechas que estamos resulta imposible cumplir con el objetivo de ejecutar el 30% a 31/12/2024”, zanja el regidor, que insiste en que “todas estas dificultades se desconocían inicialmente cuando se empezó a gestionar el plan”.

“Corríamos el riesgo de devolver toda la cantidad abonada más los intereses de demora, y hacer frente a las actuaciones ejecutadas con presupuesto propio, lo que resultaría inviable para este ayuntamiento”, indica, y concluye: “Desde la Consejería (de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno aragonés) me han comunicado que nos van a compensar esta devolución por otra vía”.

Críticas de la oposición

La oposición, conformada por Teruel Existe, achacó la pérdida de la subvención a la “alarmante falta de previsión y de gestión del alcalde, que ha sido incapaz de impulsar los proyectos necesarios para materializar los fondos y cumplir con los plazos”.

“Los proyectos para los que estaba destinada esta ayuda no eran nuevos; ya se habían intentado solicitar sin éxito en convocatorias anteriores desde 2021, lo que deja claro que se necesitaba avanzar en estos objetivos” con anteproyectos y planificación de autorizaciones.