Carlos Ros, alcalde de Ariño: “Han dejado que el cuartel de la Guardia Civil se desangre”

“Han dejado que el cuartel de la Guardia Civil se desangre”, lamenta el alcalde de Ariño, Carlos Ros, ante la evidencia de que el puesto se ha quedado sin agentes y en los últimos años el Ministerio del Interior no ha convocado plazas para cubrir las vacantes que se han venido produciendo por cambios de destino. De “ataque directo” al Instituto armado y “a la seguridad nacional, de Teruel y Aragón” calificaba este lunes Vox el desmantelamiento en la localidad minera, mientras que la Delegación del Gobierno en Aragón indicaba que hoy hay un 6% más de agentes que en 2011 en la provincia.

Ros explicó que los problemas vienen desde 2014, cuando hubo que derribar el cuartel que había porque estaba “en estado de ruina y era peligroso” que los agentes siguieran operando desde allí. De modo que el consistorio habilitó la antigua vivienda del médico para ubicar el puesto de la Guardia Civil, en el que “tenían que estar fijos seis agentes, un cabo y un sargento”. No obstante, esta plantilla óptima se fue reduciendo hasta un solo efectivo, un cabo que se acaba de marchar a Galicia, su tierra, dejando las instalaciones sin agentes.

“Los guardias civiles han ido pidiendo desplazamientos mediante las vacantes que se ofrecían en el resto de España pero que no han salido aquí para reponer esta constante pérdida de efectivos”, reprochó Ros, quien lamentó que en los últimos meses el cabo no pudiera hacer ni siquiera funciones de patrulla porque para ello hay que ir en pareja, por lo que se dedicaba a funciones administrativas.

El pasado 11 de marzo, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) dio por clausurado el puesto “tras años de agonía por falta de personal”, si bien el alcalde indicó que “oficialmente no está cerrado; no nos ha llegado ningún informe ni ninguna notificación por parte de Comandancia de Teruel”. No obstante, “han dejado que se desangre” por falta de dotación, insistió.

Vox eleva el tono

“Aragón corre el riesgo de convertirse en un almacén de canallas, de islamistas radicales y delincuentes”, manifestó en Ariño el portavoz de Vox en las Cortes de Aragón, Alejandro Nolasco, acompañado de los diputados David Arranz y Juan Vidal, y de la concejal de Andorra, Aroha Rochela. Desde la villa minera, la formación denunció que “la pérdida de guardias civiles es un ataque a la seguridad nacional, a la seguridad de Teruel, de Aragón; un ataque directo a la Guardia Civil, y dar carta blanca y poner la alfombra roja a los criminales”.

“Que muchos de ellos vendrán de Cataluña, porque allí tienen una política de fronteras abiertas. Con todos los canallas, con todos los islamistas y con todos los salvajes que agreden la seguridad nacional”, denunció Nolasco.

“El panorama que se nos queda es el siguiente: cuatro guardias civiles para 100 kilómetros cuadrados. Esto es una barbaridad. Es darles carta blanca a los delincuentes. Que esto sea un territorio sin ley”, señaló Nolasco.

“Marlaska, que es el peor ministro de Interior de la historia, es lo peor que le ha pasado a esta comunidad y a la Guardia Civil también. Está incentivando la llegada de más Rambos de Requena, de más Igor el ruso”, dijo.

“Pedimos más Guardia Civil y más seguridad, porque para pagar paguitas de menas sí que tienen dinero. Pero para mandarnos aquí guardias civiles o para arreglar las carreteras no”, relató.

Albalate y Muniesa al rescate

AUGC explicó que desde la semana pasada la ciudadanía de las poblaciones de Ariño, Oliete y Alacón –circunscritas al puesto de Ariño– pasará a ser atendida desde los cuarteles de Albalate del Arzobispo y Muniesa.

“Con este cierre, el despliegue de la Guardia Civil de la provincia pasa a tener 31 puestos o cuarteles, aunque no sería de extrañar que alguno de estos podría correr la misma suerte que el de Ariño, debido sobre todo al grave problema de agentes que siempre está presente en todas las unidades de la provincia de Teruel, escenario hoy en día si cabe más agravado con la pérdida de otros 22 agentes por los destinos recientes de los últimos días”, indicó la AUGC.

“La problemática surgida en Alcañiz con los calabozos sugiere que podrían ampliarse vacantes en esta localidad”, destacó la AUGC, partidaria de que para mejorar el servicio es necesaria “una reorganización territorial, que aglutine unidades con más guardias civiles, aunque conlleve el cierre de pequeños puestos, a todas luces insostenibles cuando ya hemos alcanzado el primer cuarto de siglo”.

“Siempre defenderemos que es mejor tener patrullas operativas en la calle que cuarteles con uno, dos o tres agentes, los cuales carecen prácticamente de operatividad en funciones de seguridad”, lamentó la asociación.

Reorganización del servicio

Fuentes de la Delegación del Gobierno en Aragón indicaron que precisamente lo que se va a hacer es “una reorganización para dar un mejor servicio a la ciudadanía”, aunque no aclararon en qué términos. Sí indicaron que el incremento de agentes en la provincia desde 2011 ha sido del 6%, por lo que “se ha recuperado lo perdido por las políticas de recortes de la legislatura de Mariano Rajoy” que congelaron la tasa de reposición. “En diciembre de 2024 es cuando más agentes ha habido”, apostillaron estas fuentes gubernamentales.