Aragón Despierta reclama la puesta en valor del núcleo deshabitado de Mas del Labrador

La Asociación Sociocultural Aragón Despierta reclama la consolidación de los restos del núcleo deshabitado de Mas del Llaurador, en Valjunquera, y su puesta en valor como lugar de interpretación del trabajo tradicional agrario en la Comarca del Matarraña.

El presidente de la Asociación, Sergio Lagarra, detalló que en el despoblado, cuyos últimos habitantes abandonaron sus casas en la década de los años 60 del siglo XX, “queda una magnífica iglesia del siglo XVIII, recientemente restaurada, y los restos de algunas construcciones con destino agrario o ganadero”. No obstante, lamentó que desde hace unos meses, la fachada de la casa que mejor se conservaba se vino abajo y que actualmente apenas “quedan un par de casas con sus fachadas”. Por todo ello, enfatizó, “restaurar este lugar estableciendo un pequeño centro de interpretación de la agricultura tradicional de la zona, destinado a alumnos y visitantes, puede ser una salida para conservar lo que queda del núcleo”.

La Asociación considera que las Administraciones públicas, “ya sea la Comarca, la Diputación de Teruel o el Gobierno de Aragón, que son las que más potencial económico tienen, deberían plantearse hacer algo con este despoblado, porque la rehabilitación de la parte trasera del núcleo no parece nada complicada”. En este sentido, consideró que “el Ayuntamiento de Valjunquera tiene mucha menor capacidad económica” que el resto de administraciones. Según Lagarra, “habilitar algún espacio de interpretación no sería muy costoso y serviría para explicar a los niños y a los visitantes que vengan a la zona en qué consistía el trabajo tradicional rural de la vida agraria y ganadera”.

Restauraciones

Mas del Llaurador es un pequeño casco urbano en ruina en donde se mantiene en pie tras un proceso de restauración una magnífica iglesia, advocación a San Juan Degollado, cuya celebración reúne a vecinos de Valdeltormo y Valjunquera (donde residen los descendientes de los que habitaron el actual despoblado) cada 28 de agosto.

Del casco urbano, apenas quedan en pie un par de fachadas de antiguas casas, y un buen número de corrales, establos y similares, ya en desuso, pero que todavía guardan sus muros de piedra, accesos a través de puertas enmarcadas en piedra y la estructura original (los tejados, en teja, han caído en su inmensa mayoría también).

La Asociación Sociocultural Aragón Despierta consideró que este núcleo deshabitado merece una segunda oportunidad para que se consoliden los restos que quedan de algunas de las casas, donde vivían ganaderos y agricultores. Según su presidente, Sergio Lagarra, la asociación reclama la creación de un centro de interpretación del trabajo del campo de esta zona dirigido a que los alumnos de los centros escolares de la comarca conozcan el modo de vida de sus antepasados. Igualmente, añadió el presidente, “un pequeño lugar de estas características serviría para atraer visitantes, y salvar del olvido a Mas del Llaurador”. En opinión del presidente de la entidad, “la inversión necesaria no sería alta y permitiría optimizar el papel de atracción de la propia iglesia ya restaurada, para beneficio de los núcleos de la zona”.