Una jornada tranquila en la que Teruel estuvo entre los primeros en arrancar

La jornada electoral de este domingo discurrió con tranquilidad tanto en la provincia como en el conjunto del Estado, sin que se produjeran incidentes destacables. En Aragón, la provincia de Teruel estuvo entre las primeras en constituir mesas y realizar las votaciones, porque la de Montalbán fue la primera que se constituyó de entre todas las de Aragón, y en Aguatón a mediodía ya había votado todo el censo electoral. Este municipio turolense no superó en cambio en rapidez al riojano de Villarroya, donde sus siete vecinos votaron en tan solo 33 segundos.

En la provincia de Teruel y en la Comunidad Autónoma de Aragón la jornada se desarrolló con absoluta normalidad y sin incidentes notables, según informó el delegado del Gobierno de España en Aragón, Fernando Beltrán.

Beltrán explicó que se había producido algún incidente médico al requerir alguna persona asistencia sanitaria por sentirse indispuesta, pero después pudieron retomar su actividad en las mesas. También se refirió a algún votante que se había resbalado en un colegio electoral y tuvo un golpe, o de una persona que sufrió un ataque de ansiedad.

Apuntó que lo más relevante y “desafortunado” había sido el accidente de circulación que había sufrido el secretario del Ayuntamiento de Escatrón al acudir al colegio electoral, que estaba pendiente de ser intervenido quirúrgicamente por una fractura en la pierna.

La primera mesa constituida en Teruel y Aragón a las 8 en punto fue la de Montalbán, mientras que la última en toda la comunidad fue la de Codo en Zaragoza, que lo hizo a las 9:50. Al menos esa fue la hora de la comunicación oficial de su constitución.

En el colegio electoral de Valderrobres tuvieron que iniciar la jornada sin luz ni cobertura móvil debido a la caída del suministro eléctrico. Al no poder contactar, la Guardia Civil se acercó al local y al comprobar lo que había sucedido y que estaba ya constituida, lo comunicaron a la Subdelegación del Gobierno en Teruel.

En Aguatón a las 12 del mediodía ya había votado todo el censo electoral, formado por 16 personas, y a las 20:03 de la tarde, apenas unos minutos después de cerrar los colegios, Embid de Ariza (Zaragoza) fue la primera mesa escrutada.

Para velocidad, la de los 7 vecinos de la localidad riojana de Villarroya, que votaron en 33 segundos, con tranquilidad y sin ganas de batir récord, porque en los comicios generales del año pasado lo hicieron en tan solo 26 segundos.

La jornada se llenó de anécdotas en todo el país. En una mesa electoral situada en el Edificio Histórico de la Universidad de Barcelona, los votantes se encontraron con que la presidenta de mesa era una drag queen. Pitita, que es como se llama, acudió maquillada y vestida con la indumentaria con la que tenía que actuar la noche del domingo en la sala Apolo de la capital catalana. Era suplente, pero tuvo que asumir la presidencia al ausentarse el titular.

En Olivar de Alaquàs (Valencia), una de las mesas la presidió Pablo Tabener, un joven capellán de 33 años, ordenado hace apenas un año, que cumplió su obligación ciudadana vestido con la sotana negra y el alzacuellos. “Me he encontrado con gente muy maja y nos han dado de desayunar”, dijo Taberner en declaraciones a Efe en su primera experiencia en una mesa electoral.

En la localidad malagueña de Alhaurín de la Torre contaron con una presidenta de mesa sorda de nacimiento, Mercedes López, de 51 años. Contó para poder desempeñar su función con la ayuda de una intérprete de lengua de signos para facilitar la comunicación con los votantes. Dijo que su participación en una mesa electoral “sin barreras” es un avance para las personas con discapacidad. “Esto antes era imposible, estaba totalmente censurado y cerrado para nosotros”, dijo.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, fue el líder político que más madrugó para votar y lo hizo junto a su esposa, Begoña Gómez. Tras depositar su papeleta, Sánchez se retiró para dejar paso a Gómez y se olvidó de su DNI, por lo que tuvo que ser el presidente de la mesa el que le avisó del despiste.

El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, votó en el colegio madrileño Ramiro de Maeztu, donde estudió Sánchez, y tras ejercer el sufragio, se dirigió a los medios de comunicación para hacer unas declaraciones junto al alcalde de Madrid, José Luis López Almeida, en el patio del centro. Al empezar la comparecencia, el micrófono falló, por lo que tuvo que esperar unos minutos hasta solventarse la incidencia. “Podemos tomar un café el alcalde y mis compañeros y venimos en un par de horas”, bromeó Núñez Feijóo.

Por otra parte, el Partido Animalista con el Medio Ambiente (Pacma) denunció que en varios colegios de diferentes puntos de España las papeletas de su formación estaban rotas, escondidas o tapadas por las de otras candidaturas. También se quejó de que en algunos locales ni siquiera habían llegado, lo que llevó a interrumpirse la votación durante cerca de media hora en un colegio de Málaga hasta reponerse las papeletas.