Uno de los motores que utiliza el avión comercial de Airbus A300. Javier Escriche
“Todavía no me puedo creer cómo pueden volar si tan solo un motor pesa tanto”
Los visitantes disfrutan con la contemplación de varias aeronaves y sus partes en el Aeropuerto de Teruel
¿Por qué vuelan los aviones? Desconocer los principios básicos de la aerodinámica (sustentación, peso, tracción y resistencia), y por tanto la respuesta a ésta pregunta, no fue motivo para disfrutar este sábado de los aparatos (aviones, avionetas, helicópteros y drones) expuestos en la plataforma de estacionamiento del Aeropuerto de Teruel con motivo de la celebración del décimo aniversario de su puesta en funcionamiento.
Una de las personas que acudieron desde Teruel se cuestionaba cómo podía volar un A330 a la vista del imponente tamaño de uno solo de sus motores. “Mira que he subido y viajado en aviones inmensos, pero ver estas piezas tan grandes me hace preguntarme cómo puede volar”, dijo, antes de agradecer el acierto en la gestión de la infraestructura, “porque para la ciudad son fundamentales cosas así”.
“¡Mira cómo es el motor de un avión!”, “Ya tío, lo estaba mirando ahora mismo”, comentaban unos jóvenes situados también junto al A330 custodiados en el aeropuerto turolense.
Un chaval asomado al hangar de mantenimiento que opera la empresa Tarmac Aragón en el que se encontraba otro A330 explicaba a sus acompañantes porqué las alas de los aviones tienen la parte superior curvada y les aclaraba que había aprendido esta y otras muchas cosas en You Tube.
Entre los visitantes se encontraba Ramón Hernández, que se autodefinió como “un enfermo de la aviación”. Su mujer, Mari Carmen Jacinto, dijo que podía dar fe de que esa descripción “se queda corta”. De hecho, habían viajado a propósito desde el municipio tinerfeño de La Orotava para asistir a esta jornada.
Hernández forma parte de la Asociación de Spotters de Canarias CISpotting y sus visitas turísticas siempre están dirigidas a lugares ligados a la aeronáutica. “He seguido de cerca la evolución del Aeropuerto de Teruel y su conversión en el mayor depósito de aviones de Europa y he podido hacer realidad mi idea de venir”, explicó.
También muy ligados al sector de la aviación están los miembros de la Asociación de Veteranos Paracaidistas de Aragón. Llegados desde Zaragoza y encabezados por su presidente, Alfonso Merino, disfrutaron de la jornada perfectamente uniformados.
Una de las personas que acudieron desde Teruel se cuestionaba cómo podía volar un A330 a la vista del imponente tamaño de uno solo de sus motores. “Mira que he subido y viajado en aviones inmensos, pero ver estas piezas tan grandes me hace preguntarme cómo puede volar”, dijo, antes de agradecer el acierto en la gestión de la infraestructura, “porque para la ciudad son fundamentales cosas así”.
“¡Mira cómo es el motor de un avión!”, “Ya tío, lo estaba mirando ahora mismo”, comentaban unos jóvenes situados también junto al A330 custodiados en el aeropuerto turolense.
Un chaval asomado al hangar de mantenimiento que opera la empresa Tarmac Aragón en el que se encontraba otro A330 explicaba a sus acompañantes porqué las alas de los aviones tienen la parte superior curvada y les aclaraba que había aprendido esta y otras muchas cosas en You Tube.
Entre los visitantes se encontraba Ramón Hernández, que se autodefinió como “un enfermo de la aviación”. Su mujer, Mari Carmen Jacinto, dijo que podía dar fe de que esa descripción “se queda corta”. De hecho, habían viajado a propósito desde el municipio tinerfeño de La Orotava para asistir a esta jornada.
Hernández forma parte de la Asociación de Spotters de Canarias CISpotting y sus visitas turísticas siempre están dirigidas a lugares ligados a la aeronáutica. “He seguido de cerca la evolución del Aeropuerto de Teruel y su conversión en el mayor depósito de aviones de Europa y he podido hacer realidad mi idea de venir”, explicó.
También muy ligados al sector de la aviación están los miembros de la Asociación de Veteranos Paracaidistas de Aragón. Llegados desde Zaragoza y encabezados por su presidente, Alfonso Merino, disfrutaron de la jornada perfectamente uniformados.