Presentación de la iniciativa
La Diputación de Teruel y el Colegio Oficial de Farmacéuticos de la provincia van a poner en marcha un programa para facilitar a los usuarios mayores el seguimiento correcto del tratamiento médico prescrito para enfermedades crónicas, destinado a pacientes del Servicio de Teleasistencia del ámbito rural, en municipios menores de 500 habitantes y con una farmacia adscrita al proyecto.
Los detalles del convenio entre ambas entidades han sido presentados este lunes por el presidente de la institución provincial, Joaquín Juste, y la presidenta del colegio, María José Villafranca, junto con la diputada delegada de Bienestar Social, Beatriz Redón.
Se trata de un sistema personalizado de dispensación de medicamentos por el que los usuarios reciben un blíster con la medicación que tienen prescrita y pautada por su médico para un tiempo determinado, organizada de tal forma que facilita la organización de las tomas y el cumplimiento de las dosis, lo que consigue un uso de la medicación más seguro y eficiente, ha explicado la Diputación de Teruel en una nota de prensa.
Este convenio para el desarrollo de este servicio profesional farmacéutico asistencial de mejora de adherencia terapéutica contribuye a prevenir y resolver problemas relacionados con la medicación, como olvidos y confusiones, y a mejorar la adherencia al tratamiento farmacológico.
La DPT financia esta actuación con 50.000 euros este año, de forma que atiende al coste del seguimiento farmacoterapéutico y el sistema personalizado de dosificación, que supone un importe máximo por paciente y mes de 20 euros, por lo que se garantiza la gratuidad para los usuarios.
Las farmacias deberán justificar estos gastos hasta el 30 de noviembre de este año, fecha en que termina la actuación, aunque desde la diputación afirman que tienen intención de dar continuidad a esta propuesta en próximos ejercicios.
Las oficinas de farmacia son las encargadas de planificar el proceso y de reacondicionar los medicamentos en el dispositivo, lo que garantiza la máxima calidad, garantía y seguridad.
Además, los blísteres están etiquetados con información personalizada para el paciente, lo que permite asegurar su correcta utilización.
Hasta ahora, las farmacias que han suscrito el convenio son más de 50 y podrán unirse más si así lo estiman, han precisado desde la DPT.
Los usuarios del servicio deben ser pacientes polimedicados, con posologías complejas o con tratamientos cuyo incumplimiento puede dar lugar a una urgencia médica.
Además, debe haberse contrastado la incapacidad del paciente para cumplir con el tratamiento prescrito o tener problemas de organización de los medicamentos, y se dará de alta por indicación del médico.
También pueden solicitarlo aquellos pacientes incluidos en programas específicos concertados con las administraciones sanitarias y los residentes de centros sociosanitarios.
El procedimiento es aplicable a toda la medicación que pueda permanecer estable durante el periodo de validez del blíster.
La semana pasada se llevó a cabo una reunión con trabajadoras sociales de las comarcas turolenses para dar a conocer este convenio y que sean ellas mismas quienes puedan asesorar a los posibles usuarios del servicio.
Los detalles del convenio entre ambas entidades han sido presentados este lunes por el presidente de la institución provincial, Joaquín Juste, y la presidenta del colegio, María José Villafranca, junto con la diputada delegada de Bienestar Social, Beatriz Redón.
Se trata de un sistema personalizado de dispensación de medicamentos por el que los usuarios reciben un blíster con la medicación que tienen prescrita y pautada por su médico para un tiempo determinado, organizada de tal forma que facilita la organización de las tomas y el cumplimiento de las dosis, lo que consigue un uso de la medicación más seguro y eficiente, ha explicado la Diputación de Teruel en una nota de prensa.
Este convenio para el desarrollo de este servicio profesional farmacéutico asistencial de mejora de adherencia terapéutica contribuye a prevenir y resolver problemas relacionados con la medicación, como olvidos y confusiones, y a mejorar la adherencia al tratamiento farmacológico.
La DPT financia esta actuación con 50.000 euros este año, de forma que atiende al coste del seguimiento farmacoterapéutico y el sistema personalizado de dosificación, que supone un importe máximo por paciente y mes de 20 euros, por lo que se garantiza la gratuidad para los usuarios.
Las farmacias deberán justificar estos gastos hasta el 30 de noviembre de este año, fecha en que termina la actuación, aunque desde la diputación afirman que tienen intención de dar continuidad a esta propuesta en próximos ejercicios.
Las oficinas de farmacia son las encargadas de planificar el proceso y de reacondicionar los medicamentos en el dispositivo, lo que garantiza la máxima calidad, garantía y seguridad.
Además, los blísteres están etiquetados con información personalizada para el paciente, lo que permite asegurar su correcta utilización.
Hasta ahora, las farmacias que han suscrito el convenio son más de 50 y podrán unirse más si así lo estiman, han precisado desde la DPT.
Los usuarios del servicio deben ser pacientes polimedicados, con posologías complejas o con tratamientos cuyo incumplimiento puede dar lugar a una urgencia médica.
Además, debe haberse contrastado la incapacidad del paciente para cumplir con el tratamiento prescrito o tener problemas de organización de los medicamentos, y se dará de alta por indicación del médico.
También pueden solicitarlo aquellos pacientes incluidos en programas específicos concertados con las administraciones sanitarias y los residentes de centros sociosanitarios.
El procedimiento es aplicable a toda la medicación que pueda permanecer estable durante el periodo de validez del blíster.
La semana pasada se llevó a cabo una reunión con trabajadoras sociales de las comarcas turolenses para dar a conocer este convenio y que sean ellas mismas quienes puedan asesorar a los posibles usuarios del servicio.
