La Audiencia Provincial ha acordado esta mañana suspender el juicio por el caso de Puerto Calanda, en el que un empresario defraudó presuntamente 2,6 millones de euros de ayudas del programa Reindus, por no estar en condiciones de declarar el principal acusado, José Luis G.P.
La incapacidad para comparecer en la vista en el día de ayer la determinó la médido forense tras examinar al acusado y considerar que el mismo no cumplía con los criterios precisos para poder hacer una declaración acorde con la veracidad de un testimonio.
Argumentó que José Luis G.P. se encontraba desorientado tanto en tiempo como en espacio al no saber dónde se encontraba.
El acusado se encuentra en tratamiento por un problema médico de tipo mental que todavía no se ha diagnosticado, y que por tanto se desconoce si puede ser de origen psiquiátrico o neurológico.
Esta es la tercera vez que se suspende la vista por problemas médicos de esta persona. En las dos anteriores se llegó a suspender incluso antes del día de celebración por ingreso hospitalario.
Ayer se personó junto con las otras cinco personas acusadas en los mismos hechos por presuntos delitos de fraude y falsedad documental, entre otros, pero completamente desorientado, según pudo constatar la médico forense. El tribunal acordó por ello suspender el acta de juicio del día de ayer por incapacidad de declarar del acusado principal, a la espera de cómo evoluciona su situación.