Suspendidas las visitas a la residencia Javalambre tras un positivo por coronavirus
El residente fue hospitalizado por otro motivo y se comprobó que tenía Covid-19La aparición de un caso de coronavirus en la residencia Javalambre del IASS en Teruel ha obligado ha establecer una serie de medidas de prevención entre las que se incluye la suspensión de las visitas de familiares.
Desde el Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales del Gobierno de Aragón, se explicó que debido a la confirmación de un caso -de un residente que está en el hospital por otros motivos, pero que dio positivo- se ha activado todo el protocolo de seguridad en la residencia de mayores Javalambre del IASS, que incluye cerrar el centro a salidas y entradas, con un único objetivo: la protección y seguridad de los residentes”.
Desde esta residencia turolense, la más grande de Aragón, pidieron “comprensión y serenidad” e insistieron en que no hay ningún caso dentro del centro ya que la persona que ha dado positivo está hospitalizada pero insistieron en que “hay que extremar todas las medidas y eso es lo que se está haciendo”.
En cuando Salud Pública lo estime conveniente, se volverá a la situación anterior y se reanudarán las visitas y los paseos.
Igualmente, la dirección de la Javalambre recordó a todos los familiares que es imprescindible respetar las normas y protocolos de higiene para garantizar que el centro pueda mantener cierta normalidad en sus visitas, una vez se retomen de lo cual serán debidamente informados.
Finalizan las intervenciones
Por otro lado, la consejera de Ciudadanía, María Victoria Broto, firmó el lunes la desintervención de los dos centros que seguían bajo la gestión del Departamento debido a la difícil situación vivida durante la pandemia, los de Illueca y Mallén. Esta firma supone que los centros vuelven a pasar a manos de sus antiguos gestores y que, en estos momentos, no queda ningún centro intervenido por el Gobierno de Aragón. Todos ellos han tenido que entregar un detallado plan de contingencia especificando medidas de sectorización, aislamientos y procedimientos en previsión de lo que pueda ocurrir.
Las residencias que desde el mes de marzo han requerido esta acción por parte del Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales han sido ocho: a las de Mallén y Illueca, se suman Vera, Épila, el Hogar de San José de Teruel, La Merced, Los Olivos y el Portillo. Las intervenciones vinieron provocadas por varios motivos, como un número elevado de contagios o bajas entre el personal directivo. Todas ellas han tenido siempre como objetivo ayudar a encauzar la situación del centro y dar la mejor atención a los residentes. Una vez este objetivo se ha cumplido y la residencia ha superado los 28 días sin caso, finaliza esta acción y el centro vuelve a manos de sus responsables, con quienes se ha trabajado de forma coordinada durante la pandemia.
En estos centros se han reforzado las plantillas con el apoyo de 41 profesionales del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS), entre otros perfiles laborales. En el Hogar San José la intervención fue el 1 de abril y contó con 20 trabajadores de la Administración, la fundación titular contrató un servicio de cátering.