Siete de cada diez usuarios de casas de apuestas tienen entre 18 y 24 años
Sonia Baselga ha centrado su TFG en un estudio sobre el perfil del ludópata en TeruelSiete de cada diez usuarios (71%) de casas de apuestas en Teruel tienen entre 18 y 24 años, según queda reflejado en el Trabajo de Fin de Grado (TFG) de la turolense Sonia Baselga, graduada en Trabajo Social por la Universidad de Valencia. El estudio indica que el nivel de ludopatía de los jóvenes de este tramo de edad es cada vez más elevado, ya que tres de cada diez usuarios que admiten tener necesidad de juego en casas de apuestas apenas acaban de cumplir la mayoría de edad.
En el TFG citado se observa también que muchos de los clientes de casas de apuestas no reconocen tener un problema con el juego y los más jóvenes aseguran que considerarlos ludópatas es exagerar, cuando en verdad sufren un desconocimiento importante porque casi un tercio de los usuarios sufren adicción al juego, acudiendo entre “seis y siete días por semana e invirtiendo unos 60 euros por día”, explica Baselga. En este sentido, la importancia de la creación de campañas de concienciación, charlas informativas para los jóvenes y asociaciones es cada vez más elevada para atajar este problema.
Sonia Baselga, que estudió el consumo de las casas de apuestas y el perfil del ludópata en Teruel, asegura que "los jóvenes no tienen conocimiento de lo que esto conlleva".
Para llevar a cabo el trabajo, entrevistó a un total de 21 usuarios, (19 hombres y dos mujeres) para conocer la frecuencia con la que asisten a las casas de apuestas, los motivos, la inversión que realizan en ellas y qué elementos de las mismas utilizan más.
Estos locales ofrecen numerosas actividades a realizar, pero hay tres en concreto que son las que más horas de uso reciben: las apuestas deportivas, las famosas "tragaperras" y el bingo online. Pero, sin duda, el pasatiempo favorito de los consumidores es la ruleta ya que 20 de los 21 usuarios admitieron utilizar con mucha frecuencia el atractivo juego de probabilidad y azar. "No saben distinguir entre azar y suerte", comenta la autora del estudio.
Según este estudio, los principales motivos por los que los consumidores acuden a estos lugares son la diversión, el dinero fácil y las amistades.
En Teruel capital hay un gran número de casas de apuestas y, a diferencia de otras ciudades españolas, no están situadas en los barrios con rentas más bajas, sino en los lugares más frecuentados por los jóvenes: en el barrio San León cerca de la zona universitaria, en el Centro Histórico contiguo a la plaza Bolamar, llena de locales de ocio nocturno, y en el Ensanche próximas a los pubs y bares más conocidos.
Esto se debe a que siete de cada diez usuarios de estos locales son jóvenes menores de 25 años adictos al juego. Muchos de los jóvenes son considerados "jugadores de riesgo” ya que casi el 50% aseguran asistir a estos lugares de ocio únicamente en compañía pero se ha demostrado que no es así, y que en numerosas ocasiones han acudido solos.
Casi la mitad de los entrevistados aseguran tener la necesidad de acudir a estos lugares (de ellos, tres de cada diez tienen 18 años), mientras que el otro 51% asegura no necesitarlo.
Tras la verificación de estas informaciones, se confirmó que, de once usuarios, seis decían no estar enganchados, realmente si lo estaban.
La frecuencia con la que se visitan estos locales también se ve condicionada por la situación económica, ya que casi la mitad de los usuarios (42,8%), se ecuentran en paro o tienen ingresos mensuales bajos.
En cuanto a la diferencia por sexos, es cierto que hay menos mujeres consumidoras de casas de apuestas que hombres pero, según el estudio, una de cada dos mujeres admite sufrir adicción por el juego. "El 30% de los ludópatas son mujeres y se sienten estigmatizadas", explica Sonia Baselga.
Las emociones que incitan al juego son la euforia (cuanto más se gana más eufórico se siente el usuario) y la tranquilidad que produce concentrarse para elegir la jugada que otorgue la victoria.