Seis barrios rurales de Teruel mejorarán sus sistemas de depuración de aguas

Seis barrios rurales están ya en disposición de mejorar sus aguas residuales después de que el Consejo Provincial de Urbanismo haya aprobado definitivamente una modificación puntual del PGOU para posibilitar la adecuación o construcción de instalaciones que lo hagan posible.

La justificación de la modificación se basa en la voluntad del Ayuntamiento de mejorar el saneamiento y depuración de las aguas residuales de los barrios rurales de El Campillo, Caudé, Tortajada, San Blas (con sus barrios de La Guea y Los Marines), Valdecebro y Villaspesa. Esta mejora tiene su razón de ser en que, desde que se redactara la Modificación del Plan General Sistema General de Saneamiento en 2002, el transcurso del tiempo ha hecho variar las demandas de los vecinos, y los diferentes sistemas de depuración y las posibilidades para llevarlos a cabo han evolucionado. Hoy en día son más eficientes sistemas que no se contemplaron en su día y que requieren la modificación del planeamiento para ser ejecutados.

El actual expediente se inició en la anterior legislatura, en 2016, por el entonces concejal de Barrios, Julio Esteban (PAR). Su aprobación definitiva para poder enviarlo al Consejo Provincial de Urbanismo se produjo en el pleno del pasado 2 de diciembre. Ahora el Boletín de la Provincia ha aprobado definitivamente este documento.

Cada uno de los barrios requiere de una solución diferente y en algunos de ellos hay más avances que en otros para poder acometer los trabajos o ponerlas ya en marcha, como explica el concejal de Infraestructuras, Juan Carlos Cruzado (PP).

En el caso de San Blas, se precisa una ampliación de la actual depuradora, debido a que la población de este núcleo urbano se ha incrementado sobremanera en la última década, y también porque la depuradora no ha funcionado correctamente en los últimos años, incumpliendo las aguas depuradas los estándares de calidad exigidos. Además, se pretende solventar el saneamiento de los núcleos habitados de La Guea y Los Marines, situados en la otra margen del río Guadalaviar, que en la actualidad no cuentan con saneamiento de aguas residuales.

Se prevé realizar una red de alcantarillado en cada núcleo, que recoja las aguas residuales de unas veinte viviendas en cada uno de ellos, aproximadamente. Las aguas se canalizarán hasta un depósito intermedio, situado en las inmediaciones de la desembocadura de la Rambla de Los Marines en el río Guadalaviar, desde donde se bombearán las aguas hasta la depuradora de San Blas. Las aguas residuales de Los Marines discurrirán hasta el depósito por gravedad, mientras que las de La Guea deberán ser bombeadas desde el núcleo habitado, ya que el terreno es abrupto y existe una mínima diferencia de cota entre él y el depósito intermedio previsto.

En El Campillo en la actualidad existe un colector en buen estado con una longitud de 1.180 metros, que finaliza en una estación depuradora de hormigón que presenta mal estado de conservación debido al paso del tiempo, la falta de mantenimiento y el deterioro de las instalaciones.  La nueva depuradora se prevé ubicar en el emplazamiento de la que se encuentra en desuso sin que se tengan que ejecutar nuevos colectores de aguas residuales, al aprovechar los ya existentes.

En Caudé se ha decidido trasladar el emplazamiento de la depuradora unos 325 metros aguas abajo del actual, en las proximidades del cruce del ferrocarril con el Arroyo de Concud. De este modo, la depuradora se aleja de la localidad y se evita construir un emisario que discurra bajo la vía del ferrocarril. El suministro de energía eléctrica se realizará a través de una línea de baja tensión que parte desde un transformador en el propio núcleo de Caudé. En cuanto a la inundabilidad de los terrenos, la depuradora se situará en una zona elevada sobre el cauce del Arroyo de Concud, quedando fuera de la zona de flujo preferente.

En Tortajada, dada la imposibilidad técnica de ubicar la depuradora fuera de la zona inundable del río Alfambra, se propone modificar el tipo de depuradora, que será una fosa-filtro biológico, sistema apropiado para una población equivalente máxima de 180 habitantes. La nueva propuesta evita los daños producidos por las posibles avenidas del río Alfambra.

Valdecebro cuenta con un colector general que conduce las aguas residuales hasta un equipo depurador de hormigón que, debido a su antigüedad y a la falta de mantenimiento ha perdido su capacidad de depuración. Un emisario vierte las aguas de la depuradora a una rambla cercana. el emplazamiento de la depuradora. Ahora se propone llevarla, junto a un camino rural y en el punto de vertido del antiguo emisario, lo que permitirá utilizar el colector y emisario existentes, y no precisará la construcción de un camino de acceso.

Villaspesa

La localidad de Villaspesa no dispone de sistema de depuración de aguas residuales, y vierte directamente al cauce del río Turia a través de un emisario que discurre bajo la Rambla de Villaspesa. Este emisario está obstruido y roto en su tramo final, por lo que las aguas residuales fluyen en superficie, desprendiendo malos olores.

Dado que la EDAR (estación depuradora) de la ciudad de Teruel se encuentra a menos de tres kilómetros, no se hará una nueva EDAR en Villaspesa y su sustitución por una estación de bombeo de aguas residuales, situada en la confluencia del camino que parte de la calle El Chorrillo con la carretera TE-V-6016. En este punto confluyen todos los colectores de saneamiento de la localidad. Allí se situarán el depósito principal y los equipos y cuadros del sistema de bombeo. El recorrido de la tubería de impulsión irá bajo caminos y cruzará la rambla de Valdelobos enterrada.

 bajo su lecho, para conectarse después con la EDAR de Teruel