Salud Publica señala que la cepa británica podría haber llegado a Teruel y que habrá herramientas para investigarlo en unos días

La situación epidemiológica de la provincia de Teruel es la más preocupante de Aragón en estos momentos. Hay múltiples factores detrás de esta realidad y entre ellos uno muy importante es la proximidad a la Comunidad Valenciana que vive también sus peores momentos de la pandemia, según explicó a este periódico el director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Javier Falo, quien también señaló que es muy factible que la cepa británica ya haya llegado al territorio.

Falo señaló que, a pesar de los confinamientos perimetrales autonómicos, la permeabilidad entre territorios próximos está ahí. “Todos sabemos que hay razones de movilidad entre comunidades próximas como el trabajo o los estudios y los movimientos se dan, por mucho que nos blindemos la influencia entre territorios se produce”, comentó el epidemiólogo quien recordó que ya ha habido en Aragón otros casos de incrementos de la incidencia en zonas limítrofes a otras comunidades con un gran número de positivos, como en septiembre u octubre en la Ribera del Ebro, en zonas colindantes con La Rioja y Navarra que en esos momentos tenían muchos contagios o en la campaña de recogida de la fruta entre la zona oscense y la catalana.

Pero el director general insistió en que no hay un único factor que pueda explicar la situación asimétrica que hay en Aragón, con Huesca con un marcado descenso en la incidencia del coronavirus, Zaragoza con muchos casos pero estable y Teruel en aumento. Algo que también se produce en España con Comunidades “con incidencias disparadas” y otras que están en mejor situación.

Falo recordó que “hay un claro efecto de las Navidades” porque ha habido muchos contactos sociales y por tanto mucha transmisión.

Cepa británica

El responsable de la Salud Pública aragonesa aseguró que es “perfectamente posible” que la cepa británica de la Covid-19 haya llegado a la provincia de Teruel y a todo el territorio aragonés. 

Precisamente, Falo explicó que esta variante del coronavirus ya está en España -en unos territorios más que en otros- y que los sistemas públicos de microbiología de salud pública necesitan poner a punto métodos de secuenciación e identificación de esta cepa y se está trabajando en ello.

Asimismo, el epidemiólogo comentó que en unos pocos días van a poder manejar “alguna herramienta alternativa que, si no con absoluta certeza, si va a permitir empezar a hacer estimaciones de hasta qué punto está circulando en Aragón” y que cuando se ponga en marcha esta investigación se vigilará especialmente Teruel, por su alta incidencia. “Eso ayudará a entender la transmisión”, aseguró el experto.

El director general insistió en que “no hay una explicación sencilla sobre lo que pasa en Teruel sino que es multifactorial, con muchos elementos que hay que tener en cuenta”.

Falo indicó que otro de los aspectos que hay que valorar es el invierno, ya que el frío tiene un doble efecto en las enfermedades respiratorias: por un lado, la gente se concentra en los interiores, con lo que esto supone para la transmisión de este virus y, por otro lado, complica los procesos respiratorios. Esto podría explicar, tras las temperaturas mínimas alcanzadas tras el paso de la borrasca Filomena, que se haya agravado la situación en Teruel y que en otoño la evolución haya sido diferente que en enero.

“La conjunción de varios factores hace que esa situación en Teruel se mantenga más tiempo, a diferencia del resto del territorio”, concluyó Falo.

Por otro lado, el responsable sanitario confió en que, a partir de la próxima semana, se empiece a ver cómo se corrigen las cifras, ya que el Índice reproductivo (Rt) se está aproximando a 1.  

En cuanto a las dos principales ciudades de la provincia, que están en confinamiento perimetral, Falo explicó que Teruel no ha alcanzado incidencias tan altas como las que tuvo en octubre y noviembre y que parece que, aunque no se haya alcanzado el pico de la curva, es previsible que se estabilice en los próximos días. 

En cambio, en Alcañiz las cifras se han disparado respecto a las que habían tenido durante toda la crisis sanitaria y parece que aún tardará un poco más en estabilizarse. 

“Alcañiz es uno de los territorios que muestra una imagen peculiar, con pequeñas ondas, ninguna ha sido excesivamente alta hasta esta última”, señaló Falo que recordó que en julio estuvo vinculado a un brote en alguna discoteca de Castellón y que volvió a tener un pico cuando estaba bajando en el resto del territorio, en septiembre, que son las fiestas de esta localidad.

El director general comentó que cuando ha hablado con los sanitarios de la zona, que son los que mejor explican la situación, le han detallado que ha habido “una intensa interacción comunitaria”, no solo en Navidad, sino también en los primeros días de enero.

“En muchas zonas rurales se han vuelto a reproducir esas celebraciones en peñas y reuniones de amigos en masicos”, advirtió y recordó la importancia de seguir manteniendo las medidas frente al virus de limpieza de manos, uso de mascarilla, distancia social y aislamiento de los positivos. Falo reconoció que, no solo en Teruel sino en todo Aragón y todas las comunidades, se está dando un “cansancio y un hartazgo” de la población por la duración de la pandemia que hace que cueste más que se cumplan las medidas. 

En cuanto al incremento de aulas cerradas y población escolar infectada, el director general aseguró que es un reflejo de la situación epidemiológica en la sociedad y que no se están produciendo más contagios en las aulas. Insistió en la importancia de no llevar a los niños al colegio si tienen síntomas.