Paleontología: El color de las ranas de Libros sigue siendo un misterio a pesar de los avances

Maria McNamara, la paleobióloga que trabaja en la preservación de tejidos blandos que ha liderado el equipo que ha descifrado el proceso de fosilización de las ranas de Libros, es la misma científica que en 2016 determinó el color de una serpiente fósil procedente del mismo lugar y que se expone en el Museo Paleontológico de Dinópolis. La investigadora aclara que a diferencia de ese ofidio, con las ranas del mismo afloramiento es imposible determinar el color.

La científica del University College Cork de Irlanda lo explicó cuando estuvo en Teruel para dar a conocer el libro sobre las ranas de Libros. “Nosotros los humanos solo tenemos un tipo de pigmento, que es la melanina, pero los anfibios tienen tres tipos de pigmentos que son los mismos que tiene la serpiente estudiada y que se publicaron en su momento. Pero las ranas de Libros no conservan la piel con la misma definición, es decir, que los niveles donde deberían estar estos pigmentos no se han conservado, con lo cual su color es todavía un misterio”, explicó la paleobióloga.

McNamara recalcó que el caso de la serpiente de Libros es “excepcional”, además de ser un ejemplar único a nivel mundial para determinar el color. En otros fósiles la melanina conservada puede dar lugar a diferentes interpretaciones sobre la coloración, ya que por los organismos actuales se sabe que hay otros factores que influyen en su determinación.

Por ese motivo la científica irlandesa es concluyente al afirmar que si bien se están reconstruyendo colores de dinosaurios y de otros animales extintos a partir de la melanina, eso solo ofrece una “visión parcial de una parte de lo que pudo constituir el color, y entonces con mucha probabilidad se están reconstruyendo colores erróneamente porque la melanina no da por sí sola el color que pudo tener la piel de ese animal”.

Como ejemplo explica que si hoy se cogieran veinte pájaros muertos y se dejaran a la intemperie, solo se conservaría la melanina y el resto se destruiría fácilmente. “Cuando vayas a reconstruir el color de esos pájaros, independientemente de que sean distintos,  te va a salir que todos eran negros, porque solo se va a conservar la melanina y lo demás lo vas a perder por descomposición, puesto que solo te va a resistir la melanina, que da colores oscuros y te va a parecer que todos tenían el mismo color”, precisa. 

Por eso motivo McNamara concluye que “todas las reconstrucciones que se están haciendo de colores distintos, basadas en melanina, con muchísima probabilidad son incorrectas, de ahí que la serpiente de Libros sea un caso excepcional de conservación de todas las células que dan color a la piel de un animal”.