"Nuestro objetivo es apagar el máximo de chimeneas y eliminar los combustibles fósiles"
Los responsables de la red de calor Rebi explican el proyecto que quieren acometer en la capital turolense“Nuestro objetivo es apagar el máximo de chimeneas y eliminar los combustibles fósiles como el gasoil o el gas para sustituirlo por energía renovable”. Así se refirió este martes en Teruel Constantino Álvarez, director de Rebi, Recursos de la Biomasa, al proyecto de red de calor que vino a presentar a asociaciones vecinales, administradores de fincas y particulares que se interesaron por ello, en un encuentro que se desarrolló en la sede de la asociación de vecinos de La Fuenfresca.
“En cada ciudad utilizamos las energías renovables que tengamos disponibles y aquí queremos hacer lo mismo y ampliar. Llevaremos primero una primera fase hasta el Viaducto y luego habrá una segunda fase”, explicó antes del inicio de la reunión.
La energía renovable que se utilizará será a partir de biomasa forestal, energía solar y otras fuentes renovables. La intención de la compañía es empezar las obras antes del final de año y empezar a dar servicio en un periodo comprendido entre 6 y 12 meses para ir ampliándose a lo largo de los próximos 5 o 6 años. De momento, la red se ha diseñado para llegar a unas 5.000 o 6.000 viviendas y los principales clientes son comunidades de propietarios, que no tendrán que hacer ninguna inversión previa para acceder a la red de calor. “El modelo que nosotros tenemos es de pago por uso”, indicó Álvarez.
También se refirió a las emisiones y señaló que la chimenea que se va a instalar emite muy pocas y el responsable de la Red en la ciudad, Manuel Bullón, indicó que por la rosa de los vientos no llegarán a la ciudad.
Inversión
La inversión prevista es de 30 millones de euros y los puestos de trabajo que se van a crear serán entre 60 y 80 en la fase de construcción y entre 30 y 40 posteriormente. La de Teruel será la primera red de calor que Rebi construirá en Aragón. En estos momentos, más de 20.000 hogares y 200 edificios públicos tienen contratado el abastecimiento de calor en Soria, Cuenca, Guadalajara, Aranda de Duero, Valladolid y Móstoles.
La Red de Calor de Teruel tendrá su origen en una central térmica que estará ubicada en el Polígono 33, Parcela 162, alejado del casco urbano. Desde ahí, distribuirá la energía producida con astilla de madera y otros sistemas de energía renovable a través de agua caliente a una temperatura de 90 grados por los tubos preaislados que recorrerán el subsuelo de la capital. El agua retornará fría y se volverá a calentar, para poder transmitir de nuevo energía.
El área de actuación con mayor densidad de red será la comprendida en los barrios de La Fuenfresca y el Ensanche. De la central de calor renovable, donde se generará el agua caliente, partirá el ramal principal que recorrerá la calle Luis Buñuel, con varias ramificaciones, con especial importancia en el ramal de la calle Ramón J. Sender. Este ramal secundario se subdivide a su vez en dos, hacia el sureste por la calle Arquitecto Muñoz Gómez y calle los Enebros, y hacia el suroeste continuando por la calle Ramón J. Sender, la calle los Olivos y la calle los Enebros, cubriendo así una amplia zona al sur de la ciudad.
Ramal principal
El ramal principal continuará hasta la calle Italia, para llegar a la calle Juan Salvador, ramificándose a norte y sur, por el camino de Castralvo y la avenida Europa. También recorrerá la calle Miguel Artigas, volverá a dividirse hacia el norte por la travesía Agustina de Aragón y hacia el suroeste por la avenida de Aragón hasta la plaza Constitución, para posteriormente avanzar hacia el norte por las avenidas Sanz de Gadea y Ruiz Jarabo, y la calle José Torán.
Israel Forner, portavoz de la asociación vecinal de La Fuenfresca, explicó que el objetivo de la reunión era informar a los vecinos, sobre todo de los barrios del Ensanche y La Fuenfresca, por donde va a pasar en esta primera fase, y -una vez conocido el proyecto- ver “el pulso del barrio”.