Malestar municipal en Teruel con la DGA por la mala gestión de las ayudas a los ayuntamientos

Municipios gobernados por distintos partidos políticos han motrado su malestar por la forma como el Gobierno de Aragón está gestionando las ayudas a los municipios, y la escasa sensibilidad que ha demostrado hacia las zonas escasamente pobladas a pesar de llenársele la boca continuamente a la hora de hablar de despoblación. El problema ha sido la resolución de las ayudas en materia de ahorro y diversificación energética del Departamento de Economía, Industria y Empleo, que apareció publicada en el BOA el pasado 29 de octubre y obligaba a los ayuntamientos a tenerlas acabadas una semana después para justificarlas el 5 de noviembre. La mayoría de los ayuntamientos han tenido que renunciar a ellas.

La gestión que ha hecho el Ejecutivo aragonés de estas ayudas, cofinanciadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder), demuestra que quienes están al frente de esta institución están “totalmente desligados de la realidad”, según denunció el presidente provincial del PP, y vicepresidente segundo de la DPT, Joaquín Juste.

La convocatoria salió publicada el pasado 25 de mayo y el Departamento de Economía no la resolvió hasta el 22 de octubre, apareciendo publicada en el BOA siete días después, dando de plazo hasta el 5 de noviembre a los ayuntamientos beneficiarios para justificar las obras.

Por supuesto, la mayoría no las habían iniciado todavía a la espera de conocer la resolución, puesto que se trata de ayuntamientos pequeños con recursos muy limitados que no pueden meterse en una inversión de estas características, por muy pequeña que sea, sin tener garantías de que van a recibir la ayuda.

Al publicarse la resolución y disponer de solo una semana para justificarlas, buena parte de los ayuntamientos han tenido que renunciar a ellas. Tal como denunciaron ayer alcaldes de todos los colores políticos afectados por la manera de actuar de la DGA, en siete días es imposible ejecutar una actuación tal como está la normativa de contratos.

Esto ha supuesto la pérdida de fondos europeos, pero también ha puesto en evidencia al Ejecutivo aragonés, que ha elaborado una directriz demográfica cuyos resultados no se ven todavía por ninguna parte, pero a la vez ignora la realidad del territorio al actuar de la forma que lo ha hecho con el procedimiento seguido en estas ayudas.

El periodo para hacer estas actuaciones abarcaba desde el 1 de enero hasta el 5 de noviembre, pero como criticó ayer Juste en rueda de prensa, cualquiera que conozca la realidad del medio rural y la escasez de recursos con que cuentan los municipios afectados por la despoblación es conscientes de que estos ayuntamientos no pueden asumir riesgos si no tienen garantizada previamente la ayuda.

Juste estuvo acompañado en la rueda de prensa por el alcalde de El Vallecillo, Pascual Giménez (PP), quien aseguró que en su municipio la ayuda era para instalar el suministro de energía eléctrica mediante placas solares para el bombeo de agua para consumo del municipio, que se hace con un motor de gasoil. 

La inversión aprobada era de 52.668 euros y la subvención concedida de 35.024 euros, a la que han tenido que renunciar en este municipio con una población de solo 40 habitantes que se reduce más todavía en invierno. Giménez mostró su “indignación” porque de esta manera se está perjudicando a los pueblos pequeños, en los que recordó que solo se pueden hacer cosas “cuando vemos que la subvención la tenemos”.

Sin atender la despoblación

Juste lamentó que nadie se haya dado cuenta de esto en la DGA por más que se hable de despoblación, y aseguró que tenía constancia de que había pasado lo mismo en todos los ayuntamientos del PP que se acogieron a esta línea de ayudas. De los 28 ayuntamientos beneficiados, 21 eran de Teruel.

La quejas se generalizaron ayer tras la rueda de prensa del PP, y alcaldes de otros partidos también protestaron por lo sucedido.  El Ayuntamiento de Torralba de los Sisones fue otro de los afectados por esta línea de subvenciones de ahorro y diversificación energética con un corto plazo para ejecutarla. Su alcalde, Asterio Abad, del Partido Aragonés, manifestó su malestar y señaló que no hay tiempo para sacar a concurso ni justificar estas ayudas, algo que impide aceptarlas.

En este sentido también se pronunció el alcalde de Puertomingalvo, el socialista Manuel Zafón, quien apuntó que se trata de subvenciones “que dan para aparecer en los medios de comunicación, porque luego no las puedes justificar, no llegan a los pueblos, no sirven para nada”. El edil lamentó el poco interés que hay por parte de las administraciones públicas en mantener los pequeños municipios, “por mucho que hablan de despoblación, con poco más de dinero del que se invierte pero menos burocracia se crearía empleo y se aguantaría con ello a muchos pueblos de Teruel”. 

En Ferreruela de Huerva ya se han despedido de comenzar su polígono industrial en 2018 que pretendían hacer con ayudas del Fondo Local de Aragón. Habían pedido una subvención de 150.000 euros que les han concedido –ellos debían de aportar otros 30.000– pero tendrán que renunciar a ella porque “es imposible técnicamente en ese tiempo hacer el proyecto, sacar las bases, y licitarlo”, lamentó el alcalde, Óscar Gracia (PAR). En este caso las subvenciones se resolvieron a finales de agosto y había que ejecutar hasta noviembre, aunque luego obtuvieron una prórroga hasta el 14 de diciembre, un plazo inviable a no ser que tengas avanzadas las obras antes de saber si vas a contar con el dinero para pagarlas.

El edil añadió que “desde el Gobierno de Aragón se escudan en que las ayudas contemplan construcciones iniciadas desde enero, “pero si no eres un pueblo grande no puedes iniciar un proyecto hasta que no tienes la seguridad de que te lo van a financiar”. El presupuesto anual de Ferreruela es de 200.000 euros y el proyecto para el polígono se eleva a 180.000.  “O hay alcaldes a los que les aseguran de palabra que les van a dar las ayudas y se fían, o una inversión así solo la puede afrontar un Ayuntamiento grande”, argumentó el responsable municipal de Ferreruela. Añadió que, en su caso, es inviable arriesgarse a hacer ahora la obra incumpliendo los plazos porque, si no les dan la subvención, no pueden hacer frente al pago. 

Yolanda Domingo es la alcaldesa de Villafranca del Campo (PAR) y forma parte del gabinete de Presidencia de la Diputación de Teruel, donde se han recibido múltiples llamadas de alcaldes quejándose o incluso solicitando apoyo para poder realizar las tramitaciones de la manera más ágil posible. Ella, como responsable municipal de un pueblo pequeño, indicó que el presupuesto de los Ayuntamientos solo da para el gasto corriente. En este sentido, señaló que aun en los casos en los que sí se pueden tramitar y ejecutar las ayudas, muchos pueblos deben de recurrir a los Plan de inversión municipal financieramente sostenible (FIMS) para poder hacer frente a la parte que le corresponde aportar al consistorio.