Los veterinarios turolenses velan por la sanidad animal y la seguridad alimentaria
El colectivo es otro eslabón imprescindible para mantener el abastecimientoLos veterinarios trabajan durante el estado de alarma en granjas, mataderos, industrias alimentarias, empresas distribuidoras, servicios oficiales de salud pública e inspección y laboratorios de análisis, entre otros lugares, para garantizar el abastecimiento de la población y la seguridad alimentaria. Otros prosiguen su labor a diario para atender a los animales domésticos y la fauna silvestre.
El presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Teruel, Héctor Palatsi, destacó que “como garantes de la sanidad animal y de la seguridad alimentaria, los veterinarios tenemos que seguir en nuestro puesto de trabajo con las precauciones impuestas por la pandemia por coronavirus, al igual que las clínicas que atienden a las mascotas”.
Héctor Palatsi indicó que la actividad de la industria cárnica, desde las granjas hasta la dispensación de los productos en carnicerías y lineales, se está llevando a cabo “con normalidad aunque con las precauciones debidas” y que la seguridad alimentaria está garantizada.
Los 290 colegiados cuentan con una credencial para poder acudir al trabajo y, de momento, no han encontrado ninguna restricción a su trabajo.
Palatsi recordó que en el primer decreto solo se autorizaba a las clínicas veterinarias a suministrar alimentos para los animales, pero que a posteriori se aclaró que también podrían seguir atendiéndolos. Añadió que los centros turolenses están funcionando con normalidad, aunque han constatado una caída de las visitas porque la gente solo acude cuando se trata de urgencias.
Palatsi aclaró que, en caso de necesidad, los veterinarios también pueden realizar visitas a domicilio haciendo uso de su carnet de colegiado o de un certificado.
El presidente de la Organización Colegial Veterinaria-OCV, Luis Alberto Calvo Sáez, destacó en una nota de prensa la labor de estos profesionales, cuyo papel es “imprescindible para asegurar a los ciudadanos el abastecimiento en todos sus sentidos: disponibilidad, acceso, uso y estabilidad de los recursos”.
Calvo Sáez agradeció a los veterinarios que, a pesar de las dificultades, “se mantengan en sus puestos de trabajo para contribuir de forma decisiva a que funcione con normalidad la cadena de valor alimentaria, y el consumidor tenga la certeza de que estará abastecido durante esta crisis de salud pública”.
Además, subrayó que “este trabajo es posible gracias a que millones de hombres y mujeres de toda la cadena de producción, desde la granja a la mesa, también mantienen su actividad, lo que evidencia la solidez de todo el sistema agroalimentario español”.
Así mismo, el presidente de la OCV recordó que otros veterinarios prestan servicio a la sociedad, en medio del estado de alarma, en aspectos tan esenciales como atender las urgencias de los animales domésticos, velar por la fauna silvestre y el entorno natural, salvaguardar el comercio exterior alimentario –desde puestos fronterizos y aduanas o garantizando la continuidad de la exportación–, y mantener la actividad investigadora para, entre otras cuestiones, contribuir en la búsqueda de vacunas contra el coronavirus Covid-19.
Para difundir entre la ciudadanía el papel fundamental que desempeñan los veterinarios en cuanto a prevención de enfermedades, salud pública o seguridad alimentaria, la OCV ha comenzado una campaña en redes sociales bajo el hashtag #VeterinariosEnAcción con el fin de visibilizar la labor del colectivo durante el estado de alarma.