Los vecinos demandan que se dote al nuevo hospital de Teruel de espacios polivalentes para hacer frente a pandemias
La Federación propone una ampliación del centro que se está construyendoLa Federación de Vecinos San Fernando de Teruel quiere hacer un último esfuerzo para convencer al Gobierno de Aragón de que plantee una revisión del proyecto del nuevo hospital de Teruel que consideran que es pequeño para las necesidades de la población. Propone una segunda fase que permita disponer de un mayor número de habitaciones individuales y también dotar a esta infraestructura de espacios polivalentes que puedan dar respuesta a futuras pandemias como la actual que se está viviendo con el coronavirus y que podrían repetirse en los próximos años.
El presidente de la Federación, Pepe Polo, defendió que se trata de una cuestión de “voluntad política” y que se podría planificar porque es “factible” y hay espacio suficiente.
Polo recordó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha advertido de que volverá a haber pandemias como la que se está viviendo en estos momentos y que esta cuestión se tiene que tener en cuenta en la planificación de un equipamiento sanitario como este, que funcionará durante 50 o 75 años.
La asociación vecinal argumenta que, como se ha demostrado en obras similares como el nuevo hospital de Toledo, “no hay ningún obstáculo técnico que impida una modificación o ampliación del proyecto en el sentido de aumentar de manera significativa la superficie útil disponible”. Polo indicó que se trataría de “alargar” determinadas alas del hospital pues hay suelo disponible y no existen limitaciones de ningún tipo. “Se conseguiría así una ampliación homogénea y equilibrada en todas las plantas”, añadió.
La Federación defiende que ni el aumento de los costes presupuestarios, que consideran que será escaso, ni el retraso en el plazo de construcción que puede ser mínimo, serían significativos y por eso plantea que en ningún caso pueden considerarse argumentos consistentes en contra de la propuesta.
Los vecinos recuerdan que las diferentes modificaciones que se han hecho de este proyecto han supuesto la reducción de la superficie construida en más de 4.000 metros cuadrados, respecto al modelo inicial de 2007.
Con su propuesta se busca precisamente retomar ese primer plan funcional para recuperar el modelo habitacional, aumentando el número de habitaciones individuales o polivalentes. También se propone que exista una reserva de espacios polivalentes que puedan tener diversas funcionalidades, según las necesidades o urgencias planteadas en cada momento para poder hacer frente a situaciones de emergencia sanitaria.
La Federación de Vecinos también recuerda que ha surgido debate entre profesionales sanitarios que desempeñan su labor en el Hospital Obispo Polanco sobre los usos y funciones de los espacios en el nuevo hospital, así como sobre la previsión del personal necesario y de los equipamientos adecuados y que han planteado que debería retomarse el mismo espíritu y esquema de funcionamiento que se hizo cuando se redactó el plan funcional de 2007, un buen ejemplo de colaboración entre la Administración y la comunidad médico-sanitaria.
La Federación propone la reelaboración del plan funcional del nuevo hospital con un proyecto de ampliación de espacios encima de la mesa que pueda acometerse de manera inmediata y sin que implique retraso alguno en las obras actualmente en curso.
“La radioterapia tiene que concretarse y que sea un realidad en la inauguración”
La Federación de Vecinos San Fernando recordó la reivindicación que defendió de forma conjunta con la Asociación Española contra el Cáncer en Teruel para que el nuevo hospital tenga una unidad satélite de radioterapia. Una demanda que está respaldada por 35.000 firmas de vecinos del sector sanitario de Teruel. Su presidente Pepe Polo, afirmó que cuando se ponga en marcha el nuevo centro sanitario tiene que hacerlo ya con este servicio.
El representante vecinal subrayó que si, como parece, en la fase constructiva ya realizada se ha reservado el espacio para el alojamiento de esta unidad (el necesario búnker), considera que debe culminarse esta intención, acondicionando perfectamente el espacio y dotándolo del equipamiento necesario para su inmediata puesta en marcha.
“Exigimos que el día de la inauguración del nuevo hospital, la Unidad de Radioterapia esté en condiciones de prestar servicio a los pacientes. No nos conformamos con nuevas promesas de proyectos futuros”, argumentó Polo que recordó que esta petición tuvo un respaldo histórico entre la ciudadanía. Actualmente estos tratamientos se tienen que hacer en Zaragoza o Valencia con largos desplazamientos.