Los turolenses hacen kilómetros solidarios para pedir que se denuncie el acoso

Corriendo, andando, e incluso en bici o empujando un carrito. Los 800 participantes en la segunda edición de la Carrera Ruta 091 contra el Acoso, organizada por la Comisaría Provincial de Teruel, logró completar todas las inscripciones previstas a las que además se sumó el dorsal solidario. La actividad consistía en cubrir una distancia de 5 kilómetros por las calles del barrio del Ensanche y el Centro de la ciudad. Con ella se pretendía llamar la atención sobre el acoso y animaba a denunciar pero además tenía un fin solidario. En esta segunda edición era apoyar a la asociación aragonesa Aspanoa, que centra su actividad en los menores enfermos de cáncer y sus familias.

Con el desarollo de esta prueba, lo importante no era ganar sino participar en esta carrera que partía desde la calle San Juan Bosco a las 11 de la mañana.

Allí se congregaron turolenses de todas las edades, en grupos familiares, de amigos o de clubes deportivos. “Somos del club Gante y hemos venido a correr”, comentaba Raquel, que confiaba en hacer la carrera en unos 30 minutos. La prueba no era competitiva pero muchos deportistas turolenses quisieron sumarse a ella.  

El personal de la Comisaría de Policía de Teruel se ha volcado con la organización de esta carrera. El comisario Fernando Mencía fue el encargado de dar la salida y en menos de 30 minutos llegaron los primeros corredores a meta. La jornada culminó con la entrega de un cheque de 5.000 euros a la Aspanoa, la asociación con la que se ha querido colaborar en esta edición gracias a las aportaciones de diferentes entidades turolenses y empresas.

En representación de todas ellas, en el acto final se hizo una mención especial a Coviar, como también a las Concejalías de Policía Local y de Deportes del Ayuntamiento de Teruel por su colaboración para la organización de esta prueba solidaria. Carreras similares se hacen en otras ciudades de España organizadas igualmente por sus comisarías. Aquí la primera edición tuvo lugar en 2019 pero, debido a la pandemia, la segunda ha tenido que esperar hasta ahora. 

Equipos especializados

Durante la mañana, además, en la calle San Juan Bosco, hubo varias exhibiciones de los equipos especializados de la Policía Nacional, con la presencia de agentes procedentes de la Jefatura Superior de Policía de Aragón. Vino la Unidad Canina y también un dron que sobrevoló la zona de meta. Estaba previsto que volara el helicóptero hasta Teruel pero no pudo venir debido a las condiciones meteorológicas. La prueba estuvo pendiente del tiempo por la amenaza de lluvia pero finalmente se pudo hacer sin problemas.

Niños y mayores se pudieron fotografiar con los perros de la Unidad Canina. Una de las perritas que vino a Teruel era Mara. Amaestrada para la detección de drogas, es una pastor alemán de color negro que llamó la atención por su buen comportamiento con la gente que se acercó hasta ella.

La Policía Nacional en Aragón cuenta también con perros para la búsqueda de explosivos, como explicó Borja Lete, jefe de la Unidad Canina de la Jefatura de Policía de Aragón. Lete comentó que la Unidad cuenta con 25 perros y 10 instructores, cada uno se encarga de dos animales y los otros cinco se preparan para hacer el relevo. Comienzan a trabajar con poco más de un año y pueden estar hasta los 8. Luego, si no se lo quedan los propios instructores porque se crea un vínculo muy grande con ellos, hay asociaciones que se encargan de buscarles un hogar.

Pastores belgas o alemanes suelen ser unas buenas razas para el trabajo que desempeñan estos animales, pero también puede haber mestizos, que pueden ser amaestrados igual que los de pura raza. 

Una representación de esta Unidad vino a Teruel donde viene habitualmente en el desempeño de su trabajo, como también lo hacen a otros municipios de la Comunidad, de La Rioja y de Navarra. En Teruel participan por ejemplo en la detección de drogas durante las fiestas de La Vaquilla o de Las Bodas de Isabel. En el caso de los explosivos, su presencia es requerida, por ejemplo, cuando se detectan explosivos de la Guerra Civil en el término municipal  de Teruel.

La labor de Aspanoa

Aspanoa estuvo presente con un punto de información para dar a conocer su labor de apoyo a las familias que se enfrentan a la enfermedad del cáncer en un menor. El gerente de la entidad, Juan Carlos Acín, explicó que estas acciones dan visibilidad al trabajo que desempeñan. El dinero que la organización de la carrera Ruta 091, Kilómetros solidarios Teruel 2022, se destinará a esta labor de atención que realizan. Recordó que los niños que son diagnosticados de cáncer en Teruel son derivados a Zaragoza y allí esta asociación aragonesa dispone de viviendas de acogida para que sus familiares puedan alojarse durante el tiempo en el que el menor está ingresado. Además, tienen una serie de servicios en el propio Hospital Infantil Miguel Servet como apoyo psicológico y social, apoyo económico a la familia, atención neuropsicológica, fisioterapia y musicoterapia, atención psicológica en el medio rural, actividades de ocio y tiempo libre, respiros familiares o campamentos así como voluntariado.

La asociación atendió en 2021 a 37 personas de la provincia de Teruel, de los que 12 eran niños, 18 padres y siete hermanos. En Zaragoza fueron 364 personas y en Huesca 64. También atienden a personas de Navarra y La Rioja.

Acín subrayó que la actividad de la asociación ha vuelto a la normalidad después de la pandemia. En este periodo no han visto una reducción en el número de casos diagnosticados en menores, a diferencia de lo que ha pasado con los adultos que retrasaban la visita al médico, pero sí que detectaron un mayor aislamiento de las familias con casos de cáncer infantil, por miedo al contagio y el empeoramiento de la enfermedad.

Aspanoa trabaja en colaboración con el resto de asociaciones de otras comunidades y forman parte de una federación nacional.