Los hoteles de Teruel estarán llenos el sábado pero tienen camas libres el resto de la Vaquilla

Los 23 establecimientos hoteleros de la capital turolense, que según los últimos datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) ofertan 795 habitaciones y 1.709 plazas, estarán al completo la noche del sábado 6 de julio, el día grande de la Vaquilla del Ángel, cuando suena el Campanico y se pone el pañuelo al Torico. El viernes, las previsiones de ocupación superan por ahora el 90 %, mientras que el domingo y el lunes el porcentaje es notablemente inferior.

El presidente de la asociación provincial Teruel Empresarios Turísticos (TET), Roche Murciano, aseguró que las perspectivas para este fin de semana son “muy buenas”, tanto en los servicios de hostelería como especialmente en los de restauración.

Entre la clientela, explicó, se encuentran numerosos turolenses que viven en los barrios, urbanos o rurales, alejados del Centro Histórico y que quieren disponer de un lugar para asearse y descansar sin abandonar el corazón de la fiesta. La mayoría de ellos, añadió, piden que les guarden la habitación de un año para otro.

Las habitaciones de hotel también son demandadas por las peñas a partir de enero, probablemente coincidiendo con el cobro de cuotas y la contratación de las orquestas y charangas.

Por último, las reservas de última hora suelen obedecer a grupos de amigos que vienen a disfrutar de la fiesta y, cada vez más, para celebrar despedidas de soltero o soltera.

Las previsiones de ocupación son del 90 % para el viernes, del 100 % para el sábado, del 78 % para el domingo y del 60 % para el lunes, precisó Roche Murciano. Y es que para ese último día, laborable fuera de la ciudad, tampoco reciben otro tipo de reservas dado que los lugares de interés turístico permanecen cerrados, como Dinópolis, que retomará la actividad el miércoles.

El presidente de la asociación de empresarios turísticos explicó que, a diferencia de otros eventos, la Vaquilla “repercute muy poquito” en los hoteles de las localidades vecinas salvo en casos puntuales, como puede ser gente que acude a la plaza de toros y que a última hora decide prolongar su estancia.

La gerente de la asociación aragonesa de turismo rural Faratur, Sara Ros, coincidió en señalar que tan solo los establecimientos más cercanos a la capital permanecen ocupados estos días, en buena medida, por la alta oferta hotelera de la capital. Y añadió que incluso hay quienes han decidido cancelar sus reservas al saber que los lugares de interés turístico estarán cerrados. “Nuestros clientes suelen ser personas que no tienen nada que ver con la Vaquilla, así que la ocupación de las casas rurales es más elevada incluso cuando se celebran eventos en otras localidades del entorno”, dijo.

En otro ámbito, muchos de los jóvenes que disfrutan de la fiesta el sábado llegan ese mismo día en autobús desde otras ciudades como Calatayud, Zaragoza, Valencia o Castellón, con los que regresan a sus lugares de origen el domingo por la mañana. Y por último, añadió, hay quienes optan por hacer uso de la zona de acampada habilitada por el Ayuntamiento en Las Viñas.

Por otro lado, Murciano indicó que la Vaquilla es uno de los momentos con mayor actividad para bares y restaurantes “porque la gente disfruta comiendo y bebiendo”. El viernes y el sábado la mayoría de los establecimientos abiertos refuerzan sus plantillas con sus extras habituales o con personas llegadas de otras localidades, incluso desde Zaragoza y Valencia. El domingo y el lunes, cuando ya queda menos gente en la ciudad, algunos aprovechan para dar un día libre a sus trabajadores.