Los Amantes se resienten y cierran el mes de agosto con 3.000 visitantes menos

Unas 3.000 personas menos han visitado este mes de agosto el Mausoleo de los Amantes de Teruel, cuyas cifras quedan muy lejos de las logradas en 2019, un “año punta” para muchos recursos turísticos de la provincia. Durante el último mes visitaron las momias de Diego e Isabel 13.700 personas frente a las 16.870 que se acercaron durante agosto de 2021.

La directora de la Fundación Amantes, Patricia García, señaló que en el complejo no se han logrado las cifras alcanzadas en los años previos a la pandemia y concretó que unos números similares a los de 2013, cuando pasaron 16.000 personas por las instalaciones.

Uno de los motivos de este descenso puede estar en el cambio de tarifas realizado en los últimos años ya que ahora no es posible ver únicamente el mausoleo, sino que hay que acceder al conjunto entero. El año pasado tampoco fue tan bueno como 2019 debido a que tenían que cumplir aforos –las visitas eran de grupos de un máximo de 20 personas– y hubo gente que se quedó fuera en muchos de los turnos.

Vaquilla cerrada

En cuanto a las visitas alcanzadas el pasado mes de julio, también son inferiores a las del mismo mes del año 2021, aunque García recalcó que ambos meses no son comparables porque la celebración de la Vaquilla hizo que cerraran de jueves a martes durante los días festivos. Este julio contaron con 5.362 visitantes frente a los 7.800 de ese mismo periodo del ejercicio anterior.

La gente de la Fundación Amantes indicó que la celebración de determinados eventos como la Baja Aragón o el Congreso de Toro de Cuerda provocan un descenso en el número de visitantes que ellos reciben puesto que los hoteles están llenos pero con un público que no suele demandar recursos patrimoniales.

También en la Sierra de Albarracín se ha notado un descenso  en la demanda en las actividades complementarias, según concretó la gerente de la Asociación Turismo Sierra de Albarracín, Begoña Sierra, quien destacó que las empresas de turismo activo se han nutrido de los veraneantes que han acudido hasta las localidades de la serranía. El descenso con respecto al gasto del turista ha sido notable y, precisó, se ha notado especialmente en las entradas a espacios de ocio y museos.