“Las relaciones entre la iglesia ortodoxa y la católica en Aragón son muy estrechas”

La iglesia de los Padres Paúles de Teruel acogió este domingo la sexta edición del Encuentro de Parroquias Ortodoxas Rumanas en Aragón, en el que tomaron parte los coros de las 8 existentes en la Comunidad Autónoma, de las que una se encuentra en la capital y otra en Alcañiz, y de las 2 de Lérida adscritas al mismo protopopiado o arziprestazgo. El cónsul de Rumanía en Aragón, Alexandru Ion Steriu, aseguró que las relaciones entre la iglesia ortodoxa y la católica en la región “son muy estrechas, como entre hermanos” y que la “cooperación” entre ambas es total.

Según la Estadística del Padrón Continuo elaborada por el INE, Aragón comenzó el año con un total de 46.669 rumanos censados, de ellos 5.261 en la provincia de Teruel, lo que supone el 39% de los extranjeros residentes, lo que la convierte en la comunidad extranjera más numerosa. 

Steriu indicó que la primera y segunda generación de rumanos llegados a la Comunidad Autónoma están perfectamente integrados y que la tercera lo está tanto que corre el riesgo de perder muchas de las tradiciones de sus antepasados e incluso el idioma. Como ejemplo, dijo que son muchas las mujeres rumanas que desempeñan labores del hogar en este territorio, cuidando a ancianos y niños, y que también hay muchos profesionales en los ámbitos de la construcción y la industria.

 Steriu precisó que su número ha descendido desde 2012, coincidiendo con los años más duros de la crisis, pero que la mayoría no ha regresado a Rumanía sino que ha elegido como destino Gran Bretaña y Alemania. Añadió que más de 3 millones de rumanos residen fuera de su país, de los que el 80% son ortodoxos, por lo que la iglesia se ha organizado para darles “apoyo espiritual”.

En Aragón hay 8 iglesias ortodoxas, ubicadas en las localidades de Teruel, Alcañiz, Zaragoza, Huesca, Calatayud, Zuera, Mallén y Ejea de los Caballeros, la última en incorporarse. Además de estas, dependen del mismo protopopiado dos parroquias de Lérida, la de la capital y el monasterio de Vilaller.

Según el cónsul de Rumanía en Aragón, las relaciones de estas iglesias con las católicas “son muy estrechas, como hermanos”. Fruto de esta colaboración, en Teruel las ceremonias ortodoxas se ofician en San Nicolás de Bari por el sacerdote Adrián Miguel Fofiu y el domingo fue la iglesia de los Padres Paúles (La Milagrosa) la que acogió el encuentro de parroquias ortodoxas rumanas.

La sexta edición de este festival de villancicos contó con la participación de los coros de las 10 parroquias, cuyos miembros vestían trajes típicos rumanos. De esta forma, tratan de mantener las tradiciones navideñas que se remontan al inicio del cristianismo, con la llegada del apóstol Andrés a Rumanía. 

Por otro lado, Steriu indicó que la fecha en que se celebró el encuentro era muy señalada para los rumanos porque el 16 de diciembre de 1989 comenzó la revolución que puso fin al régimen de Nicolae Ceausescu. “Entre otros muchos derechos, se recuperó la libertad de la fe”, que durante la dictadura solo era “tolerada”.

Además, en 2018 se cumplen 100 años desde la creación del Estado rumano moderno con la anexión tras el final de la Segunda Guerra Mundial de Transilvania, Bucovina y Besarabia al reino de Rumanía.

Acogida

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, que asistió al encuentro acompañada de varios miembros de la corporación municipal, dio la bienvenida a los participantes y animó a los rumanos que residen en la ciudad a que “se sientan como en casa”. “Teruel siempre ha sido un territorio de acogida, y además necesitamos nuevos pobladores, con lo que su presencia favorece a todos”, afirmó.