La vacunación de residentes en Aragón acabará en seis semanas y comenzará la de sanitarios
El próximo domingo arranca el proceso de inmunizaciónEl próximo domingo, 27 de diciembre, comenzará en Aragón, como en el resto de España, la vacunación de la covid de los residentes y trabajadores de las residencias de mayores y discapacitados, que finalizará en seis semanas, a mediados de febrero, y en ese momento comenzará la de los profesionales sanitarios y sociosanitarios, a los que seguirán la de las 98.000 personas que en la comunidad tienen más de 80 años.
El director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, ha presentado este miércoles el plan de vacunación contra el coronavirus en una rueda de prensa en la que ha explicado que desde el próximo domingo y durante enero llegarán a Aragón entre 50.000 y 60.000 dosis de vacunas, que se destinarán a una población diana de unas 30.000 personas, los residentes en centros de ancianos y de discapacitados y los trabajadores de estas instituciones.
Teniendo en cuenta que son necesarias dos dosis y que deben de pasar 21 días entre ellas, se calcula que en unas seis semanas podría estar acabada esta primera fase de vacunación, a razón de unas 12.000 vacunaciones cada semana.
Serán los profesionales de los 123 centros de salud a los que están adscritos las residencias quienes la administren, en colaboración con el personal sanitario de estos centros.
Las primeras dosis llegarán el mismo domingo, ya descongeladas y dispuestas para su administración, que comenzará ese mismo día previsiblemente en un centro residencial de cada provincia.
Las residencias deberán de presentar semanalmente, los jueves, el plan de vacunación para la semana siguiente, con el detalle de todas las personas que se van a vacunar con el objetivo de no desperdiciar ni una dosis.
Las vacunas saldrán de los congeladores del Hospital Clínico en los que se van a almacenar a -80 grados en bandejas con mil viales, que se enviarán a los centros de salud para que estas se repartan diariamente entre las residencias con las dosis exactas, donde se vacunará de lunes a jueves para dejar los viernes para el "rescate" de las personas a quienes no se les haya podido administrar por cualquier motivo.
En esta primera fase habrá suficientes vacunas de Pfizer para las personas institucionalizadas, pero además a lo largo de enero es probable que se pueda incorporar al plan de vacunación la de Moderna, y poco tiempo después podrán llegar otras que están ya en la fase tres de ensayos, como la de Oxford o la de Janssen, lo que ampliará notablemente la capacidad de administración.
Una vez acabada esta fase comenzará, probablemente a mediados de febrero, la segunda ola, con la aplicación de la vacuna a los profesionales sanitarios y sociosanitarios en los servicios de prevención de riesgos de los hospitales, y la tercera ola de la vacunación llegará a los mayores de 80 años, que deberán citarse en los centros de salud, aunque el Servicio Aragonés de la Salud tiene previsto emprender una campaña de apoyo de comunicación telefónica.
A este grupo de edad le seguirá después el de las personas entre 65 y 79 años, unas 185.000, que se irán citando progresivamente, una fase para la que podrían necesitarse espacios alternativos, según ha dicho en la rueda de prensa el jefe de servicio de Promoción de la salud y prevención de la enfermedad, Luis Gascón, aunque eso es algo que aún habrá que determinar porque aún queda tiempo para el inicio de esa cuarta ola de vacunación.
Después será el turno de la vacunación de los colectivos específicos acordados por todas las comunidades en el Consejo Interterritorial, como personas con determinadas patologías, personal de grupos esenciales o docentes.
La priorización, según Gascón, no se ha hecho por razones "caprichosas", sino por criterios de vulnerabilidad, equidad, riesgo de exposición o capacidad de transmisión, con el objetivo de contener los indicadores ligados a una mayor gravedad, como son los ingresos y la mortalidad, que es mayor en los colectivos de personas mayores.
Pero al principio del proceso de vacunación se seguirá produciendo transmisión comunitaria de la covid, ha advertido Falo, quien ha aprovechado para volver a hacer un llamamiento a la prudencia en Navidad, fechas en las que se incrementan la movilidad y las relaciones sociales.
Gascón ha reconocido que los gestores de la sanidad aragonesa sienten "alegría general y cierto vértigo" ante un proceso que se prevé "largo" aunque está "muy planificado".