La salud pública se analiza en un curso de Medicus Mundi y la UZ en Teruel
Joan Benach abordó los determinantes sociales y políticos de las desigualdades en este ámbitoEl profesor de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona Joan Benach analizó este lunes en el Campus de Teruel los determinantes sociales y políticos de las desigualdades en la salud dentro del curso Salud y Desarrollo, que organizó Medicus Mundi y la Cátedra de Cooperación para el Desarrollo de la Universidad de Zaragoza y que este martes finalizó.
En su charla, ofrecida en el salón de actos del Colegio Universitario Pablo Serrano, Benach explicó que la salud es un tema por un lado individual, que es cómo lo entiende la mayor parte de los ciudadanos, pero por otro, es un tema colectivo y social, que es lo que define la salud pública. En tercer lugar, está ligado a los grupos sociales. “Cada grupo social tiene más o menos posibilidades de tener buena o mala salud”, comentó.
Benach, que ha llevado a cabo diversos estudios sobre el tema, se cuestionó por qué ocurre estas desigualdades. “La mayor parte de la gente tiene una visión de la salud asociada a médicos, hospitales y pastillas y desde la salud pública sabemos que lo que condiciona más la salud de la colectividad son básicamente los factores sociales, económicos y políticos”, afirmó.
Así está demostrado que la esperanza de vida en los barrios más ricos de las ciudades es ocho o diez años superior a la de otros barrios más pobres; “Las clases sociales más aventajadas tienen más oportunidades de vivir más y mejor mientras que los inmigrantes por ejemplo tienen más problemas”.
Frente a la creencia de que la salud depende de la biología o de una buena atención médica también es importante los estilos de vida y el acceso a los recursos.
“Hay una serie de características que hace que la elección de determinadas conductas lleven a un deterioro de la salud”, comentó pero también existen otros condicionantes que no tiene que ver con las elecciones individuales y es un tema “social y político”.
Por eso, las políticas públicas contribuyen a mejorar las características sociales de fondo y a mejorar la salud que no solo depende de una mera conducta individual.
La salud depende así de cuestiones estructurales de los países, más que de sus costumbres. “En Africa por ejemplo hay países muy ricos a los que no les han dejado desarrollarse y tienen una esperanza de vida muy corta”, apuntó el profesor Benach.
Las desigualdades en el ámbito de la salud depende así de factores estructurales que tienen que ver con la educación, los ingresos, las capacidades y el poder y al final “todo este repercute en el estado de la salud de la población”.
“Ser de una clase social desfavorecida hace que por vías muy diferentes puedas tener peor salud”, añadió. Los determinantes sociales de la salud contienen elementos ambientales, elementos laborales o políticos. “La salud depende de estos determinantes sociales”, apuntó este experto en salud pública.
La diferencia entre la población urbana y la rural es, sin embargo, compleja: “Hay que definir aquí qué es rural, qué es urbano o periurbano y la densidad de población pero también puede influir”.
El curso de Medicus Mundi sobre Salud y Desarrollo celebrado en el Campus de Teruel finalizó este martes con una conexión por Internet para conocer el caso de los afectados contra la multinacional Chevron-Texaco por la contaminación por hidrocarburos en la Amazonía ecuatoriana, cómo impacto en la salud y la lucha legal.