“La provincia de Teruel necesita nuevos proyectos tractores en el sector industrial”

“La provincia de Teruel necesita nuevos proyectos tractores en el sector industrial para acelerar el desarrollo económico a medio y largo plazo y el territorio es uno de sus principales recursos para atraer inversiones relevantes”. Esta fue la opinión vertida este viernes por el director de Comunicación, Marca y Relaciones Institucionales y subdirector de Ibercaja, Enrique Barbero, en la jornada sobre Situación y perspectivas económicas de la provincia de Teruel organizada por la entidad en colaboración con la Cámara en la que participó una nutrida representación del empresariado turolense.

Barbero hizo un repaso de la situación económica mundial “porque la provincia de Teruel no vive aislada sino en un entorno global que afecta a la demanda, los tipos de interés y el coste de las materias primas”. Sobre este asunto, dijo que hay “un cierto crecimiento” y que “el mayor riesgo para la actividad de las empresas no viene de la economía sino de la geopolítica”, en referencia a los conflictos en Ucrania y la Franja de Gaza y, sobre todo, “al cambio de tono hacia la beligerancia política, económica y militar de Donald Trump en Estados Unidos”.

Dijo que el crecimiento previsto del PIB en España, que Ibercaja cifra en un 2,2 %, se debe a dos factores: a que la recuperación tras la pandemia ha sido más progresiva que en otros países y al menor peso del sector industrial que padece la subida de las materias primas. Por el contrario, el turismo internacional es uno de los motores, con un crecimiento previsto del número de viajeros del 7 % hasta los 91 millones de viajeros y del 15 % en el gasto que realizan, además de l crecimiento de la competitividad de las empresas que se traduce en mayores exportaciones.

El subdirector de Ibercaja considera que la creación de empleo neto continuará durante los dos próximos años y que las empresas y los particulares, “menos endeudados y más patrimonializados”, incrementarán su renta disponible gracias a la bajada de los tipos de interés, que dijo que fluctuarán entre el 2 % y el 2,5 % en 2024 y 2025. Aunque prevé un escenario “estable”, advirtió de los riesgos de un escenario internacional complejo y recordó que hay retos estructurales, como la productividad, las pensiones y las infraestructuras.

Desde la Universidad de Zaragoza y el Consejo Aragonés de Cámaras, Eduardo Sanz, añadió que las perspectivas de crecimiento para Aragón llegan al 3 % por el tirón de las exportaciones.

Dado que la tasa de paro se encuentra en niveles de 2007, del 5,74 % en el caso de Teruel según la última EPA, advirtió del peligro de que la situación demográfica se convierta en un “cuello de botella” en referencia a la necesidad de mano de obra del mercado laboral turolense.

El presidente de la Cámara, Antonio Santa Isabel, apuntó que el sector servicios necesita personas trabajadoras pero también la industria y la agroalimentación, que requieren además perfiles cualificados. El director de Ibercaja en Teruel, Carlos Sánchez, recordó que la falta de vivienda dificulta la contratación de persona.

En opinión de Sanz, la región necesita “una mayor diversificación del tejido productivo y dar un mayor valor añadido a la producción”. “Los principales sectores exportadores están siendo el cárnico y la automoción, pero eso puede ser un problema a largo plazo como ha ocurrido en Alemania”, apuntó.

Aseguró que hacen falta inversiones que se conviertan en un polo de desarrollo, como las ampliaciones del Aeropuerto de Teruel o las inversiones de empresas punteras tecnológicas.

Enrique Barbero definió la plataforma aeroportuaria como una “locomotora” de la actividad económica, que genera “economías de arrastre” en la construcción y los servicios auxiliares.

“Teruel necesita proyectos tractores como éste porque lo pequeño suma pero lo grande multiplica”, aseguró. “Es necesario atraer inversiones relevantes para acelerar el desarrollo económico a medio y largo plazo”, añadió. En su opinión, la provincia cuenta con los recursos necesarios para ello: territorio, situación logística, fuentes de energía alternativa, población con tradición industrial y agroalimentaria y recursos financieros y económicos, como el Fite. “Con suelo más barato, los costes de instalación y operación son menores”, argumentó.

El subdirector de Ibercaja cree que esos proyectos deberían ser del ámbito industrial “porque es el que más tira del empleo cualificado y el que genera más economías de arrastre”.

Cámara

El presidente de la Cámara de Teruel, Antonio Santa Isabel, aseguró que el deterioro del tejido productivo en Valencia a causa de la dana generará un movimiento de personas y de empresas que, “por proximidad y vinculación”, pueden acabar en la provincia turolense.

Santa Isabel indicó que, “por desgracia”, las inundaciones van a provocar que numerosas empresas articulen expedientes temporales de regulación de empleo (Erte) y algunas incluso se deslocalicen y que “por cercanía” elijan la provincia turolense para su instalación.

En sentido inverso, la necesidad de reconstruir las infraestructuras afectadas por la dana podría provocar que empresas y trabajadores turolenses se desplazaran al litoral levantino, admitió.

Santa Isabel añadió que las consecuencias del devastador temporal tendrá consecuencias en el sector turístico turolense dado que la Comunidad Valenciana es el origen del mayor porcentaje de viajeros en buena parte de la provincia. Su llegada al territorio se vio de hecho “frenada” de inmediato, aunque el presidente confía en que se recupere de forma paulatina.