La pandemia retrasa el inicio en el hábito de fumar y motiva a dejarlo

El médico especialista en Medicina de Familia y Comunitaria y coordinador de la XXII Semana Sin Humo en Huesca, José Luis Martínez, aseguró que las medidas restrictivas aplicadas para hacer frente a la pandemia del coronavirus han hecho que se haya retrasado el inicio en el consumo de tabaco en los más jóvenes y que más personas se hayan decidido dejar este hábito.

Según expuso el experto, “el toque de queda, el hecho de que no haya un lugar donde consumir, la imposibilidad de reunirse, sobre todo, los jóvenes y adolescentes, que son los que se inician en el consumo del tabaco, ha favorecido que quienes se hubieran iniciado no lo hayan hecho”, mientras que aquellos que ya fumaban “poco a poco lo hayan dejado porque se han visto muy limitados para hacerlo”, añadió Martínez.

Según los datos de la encuesta de la Sociedad Española de Medicina y Comunitaria, casi el 40 por ciento de los fumadores está a favor de la prohibición de hacerlo en terrazas, un porcentaje que se incrementa en el caso de los no fumadores y exfumadores al 83 y 76 por ciento, respectivamente. La encuesta también recoge que el 52 por ciento de quienes poseen este hábito tienen percepción de estar expuestos al humo ambiental en las terrazas.

Este año, la Semana sin Humo lleva por lema Dejar de fumar. Tu otra vacuna. Su objetivo es sensibilizar a la sociedad y a las administraciones sobre este problema y concienciar a los fumadores de los beneficios que tiene para su salud y su calidad de vida el abandono del tabaco, cuyo consumo es la causa de 52.000 muertes prematuras al año en España.

Campaña autonómica contra el tabaquismo

En Aragón, 124 centros de salud se han sumado a esta campaña e informarán sobre los beneficios de abandonar este hábito. En la comunidad autónoma, el porcentaje de no fumadores es del 48 por ciento, el de exfumadores del 35 y el de fumadores el 16, datos similares al resto de España.

La Semana sin Humo hace hincapié en la importancia de dejar este “hábito tóxico” para la salud. El primer paso para hacerlo es estar motivado, según dijo Martínez, que manifestó que el objetivo es que todos los pacientes que quieran abandonarlo, estén concienciados y cuenten en su entorno “con alguien que haya dejado de fumar o que se haya puesto enfermo”.

En función del nivel de compromiso, se establece un tipo de tratamiento u otro, aunque según Martínez, “en la mayoría de los casos no es necesario tratamientos, sino estar preparados”. El médico añadió que una vez estudiado cada caso, “es posible que sea suficiente con caramelos o parches y en otros casos son precisas otras actuaciones”.