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La ocupación hotelera de Teruel roza el cien por cien este fin de semana con motivo de Las Bodas de Isabel La ocupación hotelera de Teruel roza el cien por cien este fin de semana con motivo de Las Bodas de Isabel
El mercado medieval atrae a numerosos visitantes

La ocupación hotelera de Teruel roza el cien por cien este fin de semana con motivo de Las Bodas de Isabel

La Asociación de Hostelería y Turismo estima que por la ciudad pasarán cien mil personas
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La ocupación hotelera de Teruel rozará el cien por cien este fin de semana con motivo de la celebración de Las Bodas de Isabel, una recreación de la historia de los Amantes, Isabel y Diego, que transforma la ciudad en una villa medieval y que hace que los hoteles vayan a estar prácticamente al completo.

El presidente de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo, Juan Ciércoles, ha señalado que se estima que pasen unas 100.000 personas por la ciudad durante los tres días que dura esta celebración.

En declaraciones a Europa Press, Ciércoles ha precisado que la ocupación este jueves ya está al 70 por ciento, el viernes al 90 y el fin de semana llega al 99 por ciento. "El tiempo este año nos va a acompañar --este viernes se esperan máximas de 17 grados en la ciudad--, eso hace que la gente se anime y el fin de semana del amor vengan a ver Las Bodas de Isabel de Segura".

Ha señalado que esta celebración está cada año "más arraigada", algo que se nota en que los ciudadanos hacen las reservas antes y procuran pasar en la ciudad más tiempo. "Hace unos años sólo venían el fin de semana y ahora estamos viendo que empiezan a llegar turistas la noche del jueves", ha observado.

Ciércoles ha explicado que esta recreación medieval hace que febrero pase de ser un mes de temporada baja a uno de temporada alta. Ha relatado que, aunque es una fiesta local, el fin de semana también se llenan hoteles cercanos a la ciudad ante la imposibilidad de proporcionar alojamiento en la capital a todo el que se quiere acercar a ver Las Bodas.

"La verdad es que estamos contentos, el mes de febrero nos lo salvan Las Bodas de Isabel, es una fiesta ya muy señalada, y se nota que, poco a poco, los turistas se van gastando algo más de dinero en la ciudad", ha asegurado.

Integración de los comercios

Esta recreación llega también a los comercios de la ciudad ya que muchos de ellos se integran en la celebración. El gerente de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico de Teruel, Rodolfo Pangua, ha precisado que, aunque no es fácil, los establecimientos tratan de adaptarse a la fiesta.

"Hay comercios que se integran por completo, prácticamente montan su tienda en estos días, como puede ser un comercio de moda mujer que lo que hace durante estos días es vender o alquilar trajes medievales". Ha agregado que también hay una tienda de regalos que se adapta a esta celebración y establecimientos que directamente venden telas para hacer los trajes.

Además, hay joyerías que tienen líneas propias relacionadas con los Amantes de Teruel o el Mudéjar. No obstante, "el resto de establecimientos es más complicado que se beneficien de este tipo de eventos porque la gente que viene a celebrar Las Bodas de Isabel de Segura se implica mucho en la recreación medieval; hay muchas personas que vienen de visita, alquilan un traje y se mimetizan con todo lo que hay en la ciudad".

Comienzos

El gerente de la Asociación de Comerciantes del Centro Histórico de Teruel ha comentado que cuando comenzaron a celebrarse Las Bodas de Isabel de Segura en 1997 "colaboramos mucho con esta fiesta, nos vestíamos y ambientábamos los comercios, pero ha sido difícil integrar muchos establecimientos, por ejemplo, los dedicados a ropa deportiva o de electrodomésticos".

Sin embargo, muchos comercios lo han conseguido con un poco de ingenio. "Las ópticas han promovido el consumo de lentillas porque en la época medieval las gafas no existían y un centro asociado nuestro, de muebles, ha promocionado en su tienda el colchón del amor y tiene toda una línea de productos relacionados", ha relatado.

Pangua ha aclarado que la mayoría de los comercios que hay en Teruel son de pequeños autónomos, por lo que no es muy fácil desarrollar este tipo de iniciativas. A pesar de las dificultades con las que se encuentran para sacar el máximo provecho a Las Bodas de Isabel, ha subrayado que esta recreación aporta una proyección turística a Teruel muy buena, que repercute el resto del año en la economía de la ciudad.