Palacio Episcopal de Teruel, a la derecha, en una foto de archivo. Bykofoto/Antonio García
La Diócesis de Teruel y Albarracín investiga una denuncia sobre abusos sexuales del siglo XX y la Archidiócesis de Zaragoza otras tres
La Iglesia de Aragón está organizando un servicio de apoyo psicológico, jurídico y espiritual para cualquier víctima de abuso
La Diócesis de Teruel y Albarracín está investigando una denuncia de abusos sexuales y otras tres la Archidiócesis de Zaragoza, de la que forma parte el Bajo Aragón histórico, que se refieren a hechos sucedidos entre los años 50 y 80 del siglo pasado. El resto de diócesis aragonesas no han recibido ninguna denuncia referida a sacerdotes dependientes de ellas y, por tanto, no tienen procedimientos canónicos en curso.
Así lo ha dado a conocer la web Iglesia en Aragón, que ha publicado un comunicado de las diócesis de la comunidad autónoma sobre la protección de menores y prevención de abusos sexuales.
En él, se informa de que, de acuerdo con la disciplina canónica y civil, los obispos de las seis diócesis aragonesas crearon el 30 de marzo de 2020 una 'Oficina para la recepción de informes y denuncias de abusos sexuales de las Diócesis de Aragón', que presta atención permanente.
Esta oficina no ha recibido denuncia alguna desde su creación, pero sí se están investigando las cuatro denuncias mencionadas, llegadas a través de la Santa Sede y de la Conferencia Episcopal y sobre las que "se informará oportunamente", según reza el citado comunicado.
También se explica que esa oficina se creó ante el "gravísimo daño que producen los abusos sexuales en las víctimas, cuyas secuelas afectan a sus familias y se arrastran en ocasiones durante toda la vida, y con el objetivo de facilitar y asegurar que las denuncias sobre posibles abusos sexuales sean tratadas en tiempo y forma".
La oficina está ubicada en la sede del Arzobispado de Zaragoza, en la plaza de la Seo, número 5. Su teléfono es 976 20 31 76 y el correo electrónico 'proteccionmenores@iglesiaenaragon.com'.
Las diócesis de Aragón han manifestado también que siguen "vigilantes y atentas, con un criterio de tolerancia cero ante cualquier tipo de abuso, ya sea pasado, presente o futuro" y si tienen alguna noticia a este respecto, abordarán cada caso siguiendo los estrictos protocolos que la Iglesia ha adoptado, y que incluyen la atención personalizada a las víctimas, estudiando cada caso particular.
En este sentido, los obispos de Aragón han ofrecido y ofrecen su disponibilidad para escuchar personalmente a las víctimas que manifiesten este deseo.
Además, ante esta "dolorosa y preocupante situación", las diócesis de Aragón están organizando un servicio de apoyo psicológico, jurídico y espiritual, abierto a cualquier víctima de abuso, sea cual sea el ámbito en el que fuera cometido.
"La sociedad ha despertado ante la extensión del drama del abuso sexual a menores" y también la Iglesia ha trabajado "con responsabilidad, sobre todo en las últimas décadas, para que esos delitos no vuelvan a repetirse", precisa el comunicado.
Añade que las reformas emprendidas han hecho a la Iglesia "transparente, responsable de sus actos y un lugar seguro para los jóvenes".
Además, recuerda que las diócesis de Aragón han actuado siguiendo las disposiciones del Papa Francisco, que a través del motu proprio Vox estis lux mundi, estableció que se crearan procedimientos dirigidos a prevenir y combatir los delitos de abuso sexual. También las órdenes religiosas presentes en Aragón, en el pasado y el presente, están siguiendo estas mismas directrices.
Las diócesis consideran el abuso sexual en la infancia y adolescencia "un problema grave que afecta a toda la sociedad". Según datos de la Fundación Anar, entre los años 2008 y 2019 se ha producido un incremento del 300 por ciento en el número de casos detectados. Por lo tanto, "es fundamental hacer hincapié en la prevención, detección temprana y en la atención a las víctimas".
La Fundación Anar también revela que el 80,8 por ciento de los abusos tienen lugar en el circulo de confianza, concretamente, un 49,2 por ciento se producen en el seno familiar. Asimismo, indica que los abusos cometidos por sacerdotes en España en dicho periodo son un 0,2 por ciento de todos los que se producen. No obstante, la existencia de un solo caso es algo "extremadamente grave para la Iglesia" y, por tanto, "no dejamos de pedir perdón", han afirmado las seis diócesis aragonesas en su comunicado.
Así lo ha dado a conocer la web Iglesia en Aragón, que ha publicado un comunicado de las diócesis de la comunidad autónoma sobre la protección de menores y prevención de abusos sexuales.
En él, se informa de que, de acuerdo con la disciplina canónica y civil, los obispos de las seis diócesis aragonesas crearon el 30 de marzo de 2020 una 'Oficina para la recepción de informes y denuncias de abusos sexuales de las Diócesis de Aragón', que presta atención permanente.
Esta oficina no ha recibido denuncia alguna desde su creación, pero sí se están investigando las cuatro denuncias mencionadas, llegadas a través de la Santa Sede y de la Conferencia Episcopal y sobre las que "se informará oportunamente", según reza el citado comunicado.
También se explica que esa oficina se creó ante el "gravísimo daño que producen los abusos sexuales en las víctimas, cuyas secuelas afectan a sus familias y se arrastran en ocasiones durante toda la vida, y con el objetivo de facilitar y asegurar que las denuncias sobre posibles abusos sexuales sean tratadas en tiempo y forma".
La oficina está ubicada en la sede del Arzobispado de Zaragoza, en la plaza de la Seo, número 5. Su teléfono es 976 20 31 76 y el correo electrónico 'proteccionmenores@iglesiaenaragon.com'.
Seguimiento
Las diócesis de Aragón han manifestado también que siguen "vigilantes y atentas, con un criterio de tolerancia cero ante cualquier tipo de abuso, ya sea pasado, presente o futuro" y si tienen alguna noticia a este respecto, abordarán cada caso siguiendo los estrictos protocolos que la Iglesia ha adoptado, y que incluyen la atención personalizada a las víctimas, estudiando cada caso particular.
En este sentido, los obispos de Aragón han ofrecido y ofrecen su disponibilidad para escuchar personalmente a las víctimas que manifiesten este deseo.
Además, ante esta "dolorosa y preocupante situación", las diócesis de Aragón están organizando un servicio de apoyo psicológico, jurídico y espiritual, abierto a cualquier víctima de abuso, sea cual sea el ámbito en el que fuera cometido.
"La sociedad ha despertado ante la extensión del drama del abuso sexual a menores" y también la Iglesia ha trabajado "con responsabilidad, sobre todo en las últimas décadas, para que esos delitos no vuelvan a repetirse", precisa el comunicado.
Añade que las reformas emprendidas han hecho a la Iglesia "transparente, responsable de sus actos y un lugar seguro para los jóvenes".
Además, recuerda que las diócesis de Aragón han actuado siguiendo las disposiciones del Papa Francisco, que a través del motu proprio Vox estis lux mundi, estableció que se crearan procedimientos dirigidos a prevenir y combatir los delitos de abuso sexual. También las órdenes religiosas presentes en Aragón, en el pasado y el presente, están siguiendo estas mismas directrices.
Problema grave
Las diócesis consideran el abuso sexual en la infancia y adolescencia "un problema grave que afecta a toda la sociedad". Según datos de la Fundación Anar, entre los años 2008 y 2019 se ha producido un incremento del 300 por ciento en el número de casos detectados. Por lo tanto, "es fundamental hacer hincapié en la prevención, detección temprana y en la atención a las víctimas".
La Fundación Anar también revela que el 80,8 por ciento de los abusos tienen lugar en el circulo de confianza, concretamente, un 49,2 por ciento se producen en el seno familiar. Asimismo, indica que los abusos cometidos por sacerdotes en España en dicho periodo son un 0,2 por ciento de todos los que se producen. No obstante, la existencia de un solo caso es algo "extremadamente grave para la Iglesia" y, por tanto, "no dejamos de pedir perdón", han afirmado las seis diócesis aragonesas en su comunicado.
