La delincuencia sube un 2,9 % en Aragón en el primer trimestre del año y en Teruel se llega al 13,4 %
La delincuencia ha aumentado en Aragón un 2,9 por ciento en el primer trimestre del año respecto al mismo periodo del 2022 al contabilizar 12.238 infracciones penales, que se han mantenido en 3 en el caso de los homicidios y han crecido un 10,3 % los delitos contra la libertad sexual.
Según los datos de la criminalidad del periodo entre enero y marzo dados a conocer este lunes por el Ministerio del Interior, la delincuencia convencional ha descendido en Aragón un 3,8 por ciento con 9.194 delitos registrados.
No obstante, han subido los intentos de homicidio, un 175 % al pasar de 4 a 11, un 50 % las sustracciones de vehículos, un 19,8 % el tráfico de drogas y un 15,9 % los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, además del 10,3 % de los delitos contra la libertad sexual, mientras han descendido un 31,5 % los robos con violencia e intimidación y un 19,4 %, lo delitos graves y menos graves de lesiones y riñas tumultuarias.
Mientras, ha aumentado un 29,9 por ciento la cibercriminalidad en Aragón, con 3.044 infracciones penales frente a las 2.343 registradas en el periodo de enero a marzo de 2022.
Por provincias, la delincuencia ha subido un 13,4 % en Teruel, un 8,4 % en Huesca y un 0,9 en Zaragoza, y por capitales, ha aumentado un 16 % en la oscense (de 337 a 391) y ha caído un 10,6 % en Teruel (de 216 a 193) y un 4,9 % en Zaragoza (de 6.815 a 6.484).
En la capital aragonesa, se han registrado dos homicidios frente a uno en el mismo periodo del año pasado y han subido de 2 a 5 en grado de tentativa, mientras que han bajado un 26,9 % los delitos contra la libertad sexual al pasar de 52 a 38, y un 33,1 % los robos con violencia e intimidación (de 308 a 206). En el caso de la ciberdelincuencia, ha repuntado en Zaragoza un 4,3 %.
En el conjunto del país, la criminalidad ha crecido un 7,2 % con 588.785 infracciones penales contabilizadas por las fuerzas de seguridad, un alza que alcanzó el 13,5 por ciento en el caso de los homicidios consumados, que se cifraron en 84 frente a 74 del mismo periodo de 2022, y del 161,5 % en el de los secuestros, ya que se investigaron 34 frente a los 13 del primer trimestre del pasado.
Del total de 588.785 delitos registrados, 480.906, es decir, el 81,7 por ciento, se corresponden con la criminalidad convencional, consideradas aquí todas las formas de delito no cometidos en el espacio ciber y que presenta una variación del 5,8% sobre 2022.
Mientras, la cibercriminalidad con 107.879 infracciones penales, registró un incremento del 13,8 por ciento.
Y en este apartado, las estafas informáticas (96.561 delitos, es decir, el 89,5 % de toda la cibercriminalidad y el 16,4 % de toda la delincuencia registrada de enero a marzo), se incrementaron un 13,7 % sobre el mismo período del año pasado.
Interior hace hincapié en el aumento considerable de las estafas informáticas en los últimos años. Así, mientras que en 2016 los hechos registrados en esta tipología fueron 70.178 (con datos de todas las fuerzas de seguridad), en 2023 se situaron en 336.778.
"Eso implica que, en apenas seis años, las estafas informáticas conocidas en 2022 crecieron un 379,9 % sobre las registradas en 2016", enfatiza el Ministerio.
Sigue siguen subiendo los delitos contra la libertad sexual
Por lo que se refiere a los delitos contra la libertad sexual (excluidos los computados de manera "online"), Interior recalca que siguen en aumento, con un alza en el primer trimestre del 16,9 % sobre el mismo periodo del año anterior. Entre este tipo de delitos las violaciones crecieron un 3,8 por ciento.
Según Interior, estas subidas "deben ponerse, en parte, en relación con las activas políticas de concienciación y de reducción de la tolerancia social y personal frente a este tipo de hechos delictivos, lo que se traduce en una mayor disposición de las víctimas a denunciar".
De esta forma, añade, se están reduciendo "los niveles de infradenuncia que han podido y pueden existir en relación con estos tipos penales".
Por su parte, los delitos de tráfico de drogas subieron un 8,5 %; en tanto que los relacionados con los delitos contra el patrimonio (indicadores de robos, hurtos y sustracción de vehículos), que representan el 45,5 % de la criminalidad convencional, aumentaron en conjunto un 10,9 %.
La criminalidad creció en todas las comunidades autónomas a excepción de Galicia, Cantabria y Castilla y León, con descensos del 8,3 por ciento, 1,7 y 0,7 por ciento, respectivamente, además de en Ceuta, con una bajada del 9,3 por ciento.
Por el contrario, subió más en Murcia, con un alza del 14,5 %, por delante de La Rioja (13,8 %), Comunidad Valenciana (12,2 %) y Cataluña (11,3 %).
Algo más del 10 por ciento subieron los delitos en Andalucía, Baleares y Extremadura.