La campaña de vacunación de la gripe arranca el lunes con un 37% más de dosis distribuidas en Teruel
Sanidad considera “esencial” la vacunación de la gripe este añoAragón comienza el próximo lunes una campaña de vacunación antigripal crucial ante la coincidencia de este virus con la pandemia de Covid-19, con un especial llamamiento a la inmunización en los grupos de riesgo y en las personas que estén en contacto con los mismos. Se han distribuido más dosis que al inicio de la campaña del año pasado, en concreto, para la provincia de Teruel son un 37,12% pasando de 31.570 a 43.290.
En esta temporada la campaña se realizará en dos fases. La primera, que comenzará el próximo lunes, 5 de octubre, estará dirigida a residentes en centros sociales residenciales y profesionales sanitarios y socio-sanitarios; y la segunda, que comenzará el 15 de octubre, tendrá como objetivo a la población general y finalizará el 18 de diciembre, si bien habrá vacunas disponibles en los centros hasta finales de febrero.
La Comunidad ha adquirido un total de 300.000 dosis, 30.000 más que en la temporada anterior, con la posibilidad de ampliación en 138.411 dosis más si fuera necesario, adquiridas por el Ministerio de Sanidad. Globalmente, la vacunación de este año supondrá una inversión de 1,2 millones de euros. En estos momentos ya se han distribuido un total de 291.990 dosis: 54.720 en Huesca, 43.290 en Teruel y 193.980 en Zaragoza.
“Es esencial evitar las coinfecciones de gripes y coronavirus. No nos podemos permitir la sobrecarga del sistema asistencial y en el caso de la gripe tenemos una vacuna fiable y segura. Hay que vacunarse”, aseguró el director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, que presentó la campaña junto al gerente del Salud, Javier Marión, y el jefe de servicio de Promoción de la Salud, Luis Gascón.
Durante la campaña 2019-2020 se administraron un total de 208.491 dosis, un 6% más respecto a la temporada anterior (197.097). El incremento del número de dosis para esta nueva campaña se debe a la necesidad de asegurar una amplia cobertura de vacunación en un contexto de previsible incremento de la demanda por parte de la población.
El objetivo de la vacunación es disminuir la incidencia de gripe, los ingresos y fallecimientos que causa, y obtener coberturas óptimas de vacunación, en una temporada en la que esto es especialmente relevante ante la pandemia de Covid-19: la coinfección con ambos virus multiplica por dos el riesgo de muerte, explicó Falo. Además, la disminución de la incidencia de gripe en la próxima temporada mejorará las posibilidades de detección de Covid-19 en presencia de cuadros respiratorios.
Este año más que nunca es necesario obtener unas coberturas elevadas de vacunación, muy especialmente entre las personas mayores de 65 años y entre los profesionales sanitarios y socio-sanitarios. En ambos grupos, el Departamento de Sanidad, en coordinación con el resto de comunidades autónomas, ha establecido como objetivo alcanzar coberturas de al menos el 75%. En el mismo sentido, el objetivo es lograr coberturas de al menos el 60% en embarazadas y personas con factores de riesgo.
“Hago un llamamiento a la responsabilidad de los trabajadores sanitarios. Es preciso que se vacunen, no solo por su salud, sino también por la salud de sus pacientes”, indicó el gerente del Salud, Javier Marión que añadió que hay que “vacunarse y proteger a la población a la que se cuida”.
El año pasado las coberturas que se obtuvieron están “lejos” de lo que se espera para este año y aunque mejoraron en mayores de 65 y mayores de 80 años y fueron “mucho más altas” en el ámbito rural, en los sanitarios ronda el 24-25%, es decir, “no se vacunan tres de cada cuatro”, informo Falo. Según el director de Salud Pública, el virus de la gripe “siempre es poco predecible” y en el caso de este año “no se sabe cómo va a actuar” y recordó la alta incidencia de las dos últimas temporadas, con picos en los que se superaron los 500 casos por 100.000 habitantes y en el caso de la última coincidiendo con la introducción del coronavirus en Aragón y que hizo “difícil” distinguir los dos virus.
Ante la previsión de más vacunaciones se establecerán más espacios y se dispondrá de más tiempo para que no se produzcan acumulaciones de pacientes.
La campaña irá acompañada de una estrategia de comunicación y el envío de cartas, hasta 40.000, para que los pacientes se citen a la vacuna y, si es posible, de forma telemática para evitar el uso de la vía telefónica.
Se va a hacer hincapié en el registro de vacunación porque también se empieza a trabajar en los requisitos de vacunación frente al coronavirus cuando llegue el antídoto.
Marión aseguró que “no hay ninguna razón para pensar que la vacuna de la gripe no es sino beneficiosa” y se refirió a un estudio con 3.000 pacientes que sufrieron Covid-19 que demuestra que la vacuna de la gripe “no aumenta la severidad de las infecciones por coronavirus” y hará que “la gestión de quienes se infecten sea más sencilla”.
Este año se va trabajar en algunas con una vacuna trivalente, con dos cepas, una del grupo A y otra del B.
Prioridad, grupos vulnerables
Por su parte, el jefe de servicio de Promoción de la Salud, Luis Gascón, incidió en que la prioridad son los grupos vulnerables (mayores de 65 años, enfermos crónicos que son de riesgo, prematuros y embarazadas) y conforme avance la campaña se podrá ofertar a otros grupos, y advirtió de que haber pasado la Covid-19 no conlleva una contraindicación para vacunarse contra la gripe.
Como ejemplo del impacto que tiene la gripe en el sistema sanitario, Gascón citó un estudio del Centro Nacional de Epidemiología y el Instituto Carlos III que calculaba que en la última temporada de gripe a Aragón le corresponderían unas 1.000 hospitalizaciones, por lo que si se repitiesen esas características y con la Covid-19 “sería complicado”.