Fósiles de Libros protagonizan otro relevante avance metodológico en Paleontología
Dicha investigación establece un nuevo modo de reconstruir la anatomía de los vertebrados extintosUna publicación en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences USA, liderada por Valentina Rossi (University College Cork, Irlanda) y por su supervisora, Dra. Maria E. McNamara, realizado en colaboración con un equipo internacional de químicos de Estados Unidos y Japón, presenta los resultados de utilizar las últimas tecnologías de sincrotrón para analizar la composición de los melanosomas en organismos fósiles y actuales. Entre los primeros, destacan los estudios realizados en dos fósiles de Libros conservados en las colecciones del Museo de Historia Natural de Londres.
Los resultados obtenidos consisten en el establecimiento de un nuevo modo de reconstruir la anatomía de vertebrados extintos mediante el estudio de la composición química de los melanosomas fosilizados correspondientes a sus órganos internos. Ello es debido a la constatación de que la composición química de los melanosomas está relacionada con el órgano al que pertenecen (lo que permite identificar piel, pulmones, hígado, intestinos, corazón e incluso tejido conectivo).
Estas nuevas aportaciones son una consecuencia del sorprendente descubrimiento, realizado recientemente, de que la melanina es abundante, además de en piel y plumas, en los órganos internos de anfibios, reptiles, aves y mamíferos actuales.
Hay que destacar que esta publicación se enmarca en una línea de investigación que fue premiada en 2017 en la decimoquinta edición del certamen científico-divulgativo que convoca anualmente la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis con la denominación de Premio Internacional de Investigación en Paleontología Paleonturología y que se detalla en la publicación de dicha Fundación titulada Una historia de muerte, melanina y azufre (Maria E. McNamara, Bart E. Van Dongen, Nick P. Lockyer, Ian D. Bull y Patrick J. Orr, serie ¡Fundamental!, número 31, 2018). Además, algunos fósiles semejantes a los que protagonizan el novedoso estudio forman parte de las exposiciones de Dinópolis.