El próximo reto de la España Vaciada tras la respuesta del último paro: fortalecer el tejido ciudadano en cada provincia

La coordinadora de la España Vaciada, que impulsó el paro ciudadano de 5 minutos el pasado viernes en 23 provincias, está avanzando en la vertebración social de los territorios afectados por la despoblación y el abandono institucional. Es uno de los logros que se están consiguiendo desde la manifestación en Madrid del 31M, y uno de los retos de futuro de cara a sus reivindicaciones, fortalecer el tejido ciudadano en cada provincia, según destacaron representantes de las plataformas en diferentes provincias.

En Teruel se le llama “mallar” el territorio, mientras que en otros sitios como Zamora se habla de “tejerlo”, pero en todos estos sitios el objetivo es el mismo, crear conciencia social para reivindicar lo que es de justicia, no cesar en el empeño de que haya un Pacto de Estado para la repoblación que ponga en marcha un nuevo modelo de vertebración territorial en España.

Más allá de las cifras absolutas de participantes en las 10.000 concentraciones que hubo el viernes pasado convocadas por la coordinadora de la España Vaciada, de las cuales mil se celebraron en la provincia de Teruel, los organizadores del paro de cinco minutos del 4 de octubre destacaron que acciones como la de ese día están consiguiendo “hacer músculo” para que las instituciones atiendan  las demandas ciudadanas y se impulse un Pacto de Estado que sea determinante para revertir la situación actual.

Desde diferentes plataformas de la España Vaciada destacaron a este periódico la importancia del eco mediático que tuvo el paro, pero sobre todo la buena respuesta que hubo en provincias donde la gente no está acostumbrada a este tipo de acciones, y en las que se está empezando a vertebrar socialmente el territorio con estas movilizaciones.

Teo Nieto, de la Coordinadora Rural de Zamora, comentó que aparte de “alzar la voz para que nos oigan”, el paro del viernes había servido también para que el mundo rural siga tomando conciencia de que “sí puede hacer algo para revertir su situación”.

Nieto se refirió a “desactivar la indefensión aprendida”, en el sentido de que durante décadas se ha enseñado al medio rural a no defenderse ni hacer nada, cuando movimientos como el de la España Vaciada están demostrando que sí se pueden hacer cosas.

El representante de la Coordinadora Rural de Zamora comentó que a partir de ahora “hay que ser moderados en los impactos mediáticos” para evitar que dejen de tener repercusión, a la vez que “mantener una tensión, porque esto es una carrera de fondo en el tiempo”, durante la que habrá que hacer “sentarse a la gente para negociar” a la vez que se sigue impulsando ese “tejido” social en el mundo rural. Apuntó en este sentido que “la gente en los pueblos nos ha enseñado la paciencia de tejer”.

El portavoz de Teruel Existe, Pepe Polo, incidió en la repercusión mediática que había tenido el paro del viernes para visibilizar el problema, pero también el sentimiento de “autoestima” que había provocado no solo entre los turolenses sino en toda la España Vaciada.

Polo comentó que la “ilusión” es lo que ha marcado el 4 de octubre al ver las 121 plataformas convocantes del paro cómo se iban incorporando los pueblos a las acciones reivindicativas, hasta el punto de haber desbordado a algunas de ellas. 

“El entusiasmo de la gente de sumarse a esta revuelta está siendo el caldo de cultivo de muchas provincias, cuyos habitantes coinciden en que no están contentos con las políticas territoriales que se han hecho en los últimos sesenta años”, indicó el portavoz de Teruel Existe, quien señaló que ahora en cada provincia debe hacerse un análisis interno de cómo se ha desarrollado esta acción, y posteriormente abordarlo en el seno de la coordinadora estatal para ver los próximos pasos en común.

Polo advirtió que “acción por acción ya no sirve”, y que aquello que se haga deberá ser pensando en objetivos concretos como el Pacto de Estado presionando tanto al Estado como a las Comunidades Autónomas. Será la coordinadora estatal la que concrete esa hoja de ruta en una próxima reunión, después de que el movimiento haya “cogido músculo” con este paro ciudadano de cinco minutos.

Antonio Martínez, de Amigos del Ferrocarril de la Comarca de Baza, valoró la buena respuesta que había tenido este paro convocado en 23 provincias. Señaló al respecto que habían notado un “cambio grande” en las reivindicaciones por el respaldo tanto de la población como de cargos públicos que también habían participado en la última acción. “Estamos ya hartos de tantas promesas y queremos hechos”, dijo.

Juan Carlos Soto, de Ávila Resiste, valoró lo “emocionante” que había sido el paro por la “pasión” que puso la gente, e indicó que vertebrar socialmente el territorio es un objetivo inmediato, para lo cual van a crear una red abulense por el reto demográfico.