Síguenos
El programa del alumnado ayudante contribuye a mejorar el clima de convivencia escolar El programa del alumnado ayudante contribuye a mejorar el clima de convivencia escolar
La reunión del programa de apoyo entre iguales reunió en Utrillas a más de 200 jóvenes

El programa del alumnado ayudante contribuye a mejorar el clima de convivencia escolar

Más de 200 jóvenes de la provincia comparten su experiencia en el IES Lázaro Carreter de Utrillas
banner click 236 banner 236

Tener un compañero al que poder acudir si se tiene un problema y contar con su mediación cuando hay un conflicto ayuda a mejorar la convivencia en las aulas y a que todos se sientan más integrados en su centro educativo. Esa es la filosofía del programa del Alumnado Ayudante que está implantado en la práctica totalidad de los institutos aragoneses y en buena parte de los colegios de Primaria. Para dar visibilidad a esa importante labor, el instituto Lázaro Carreter de Utrillas celebró este martes un encuentro provincial en el que participaron más de 200 estudiantes de siete centros educativos turolenses y uno de Zaragoza.

La jornada que se celebró en el Día Internacional contra el Acoso Escolar se prolongó durante toda la mañana con diferentes actividades. Los escolares recibieron un diploma por su labor como alumnos ayudantes, se hicieron juegos de cohesión y disfrutaron de la obra de teatro Yo, vosotros y ella, con el Colectivo TO y Teatro Foro con la que reflexionaron sobre temas como la educación afectivo-sexual, la homofobia o la relación con los padres.

Participaron estudiantes del IES Lázaro Carreter de Utrillas, el CEIP Villa de Utrillas, el CEIP Juan Lorenzo Palmireno y el CEIP Juan Sobrarias, de Alcañiz; el CEIP Luis Turón de Híjar; el IES Bajo Aragón de Alcañiz; el IES Valle del Jiloca de Calamocha y el IES Pedro Cerrada de Utebo.

La importancia del programa

La directora provincial de Educación en Teruel, Mamen González, que asistió  a esta reunión en Utrilas, destacó la importancia de este programa porque es “una forma de ayudar a resolver los conflictos que hay en los centros y desarrollar la convivencia, de hacer que los niños estén sintiendo respeto y tengan un espacio seguro dentro de los centros”.

La jefa del Servicio de Equidad, Inclusión y Aprendizaje Permanente, Isabel Tolosana, resaltó que este apoyo entre iguales es una excente fórmula para la prevención de la situaciones de acoso escolar y valoró este encuentro como una oportunidad de “empoderar” a estos jóvenes y que entiendan la importancia de lo que están haciendo.

La idea de este encuentro surgió de las reuniones trimestrales que realizan los docentes que participan en el programa en estos centros en los que intercambian experiencias. “El objetivo principal es visibilizar la labor de este alumnado y del profesorado que lo acompaña”, explicó el jefe de estudios del IES Lázaro Carreter y coordinador de esta actividad, Chuan Burriel.

El instituto de Utrillas lleva ya siete años con este programa y el clima en las aulas ha mejorado. “Tenemos problemas de convivencia como en todos los centros, pero es verdad que nuestro alumnado está concienciado y en cuanto detecta algún tipo de acoso o conflicto, enseguida lo comunica al profesorado y nosotros podemos atajarlo”, comentó el jefe de estudios.

La selección de los estudiantes para este proyecto comienza en primero de ESO y hay alumnos ayudantes en todos los niveles y prácticamente en todos los grupos. Los docentes reciben formación y a su vez preparan a los estudiantes. Burriel detalló que con los más pequeños se trabaja la observación y la igualdad y con los mayores, la mediación en conflictos.

“Necesitamos un alumnado comprometido, que sea responsable, que sea compañero de los suyos. Les inculcamos la convivencia, la observación al alumnado, la asertividad y la igualdad”, comentó el jefe de estudios sobre el pertil de estos jóvenes.

Ayudar a los demás

Los escolares que asistieron ayer a este encuentro coincidían en destacar la posibilidad de ayudar a los demás como la motivación principal para su participación en este programa.

“Ayudar a la gente te llena por dentro”, afirmó Izan Aguado Ortiz, que estudia primero de grado medio de Mantenimiento Electromecánico en el IES Lázaro Carreter y que es alumno ayudante desde hace cinco cursos.

Izan reconoció que el acoso es algo que está en los centros educativos, sin embargo, afirmó que desde que se puso en marcha este programa se ha reducido.

Este proyecto también se lleva a cabo en los centros de Educación Primaria, en quinto y sexto curso. Sara María Bus, estudia sexto de Primaria en el CEIP Palmireno de Alcañiz y este es su segundo curso en el programa. “Quiero que todos se sientan tan bien como yo me siento en el aula y en el recreo”, comentó y recordó que una de las acciones que había realizado era intentar que una amistad no se rompiera cuando dos amigas se peleaban.

Mila Tercero, de segundo de ESO del IES Pedro Cerrada de Utebo, afirmó que se siente capacitada para ayudar a sus compañeros cuando lo están pasando mal porque ella misma se ha encontrado en la misma situación. “Sé lo que se siente y me encanta ayudar a la gente para que no les pase lo mismo”, afirmó.

Escuchar a la gente

Su compañero Jaime Bona comentó que se dedican “a escuchar a la gente” y a observarles para detectar “si tienen problemas con sus amigos y ver qué se puede hacer”.

“Lo que más nos encontramos es gente que no se siente integrada en su grupo de amigos”, detalló Jaime.

Jorge Sánchez, del mismo centro, explicó que fueron sus compañeros los que le votaron para este puesto, algo que aseguró que le hizo ilusión porque pensaron que “podía hacerlo bien”.

La trabajadora social del instituto de Utebo, Rocío Corchete, indicó que en este centro llevan ocho años con este programa y participar en el encuentro de Utrillas era una forma de manifestar que no son “los únicos” y que hay muchos centros “que están preocupados por que las cosas funcionen bien” y que haya “respecto y solidaridad” y se pueda ayudar a los alumnos que lo estén pasando mal en un determinado momento.

“Nuestros alumnos ayudantes son maravillosos y hacen una labor especial y queríamos que se vieran empoderados y reforzados”, resaltó Rocío Corchete.