El PP impone de forma unilateral en el Senado sus medidas frente al reto demográfico

El PP impuso el viernes de forma unilateral sus propuestas para hacer frente a la despoblación en la última sesión de la Comisión especial sobre la evolución demográfica en España del Senado, después de que el resto de grupos parlamentarios criticaran la “instrumentalización política” que habían hecho los populares de este asunto. Los representantes del grupo mixto, del grupo vasco y de Esquerra Republicana ni siquiera acudieron a la convocatoria, mientras que el PSOE y Unidos Podemos la abandonaron tras expresar sus críticas y malestar por el uso político que el PP hacía de una cuestión tan sensible como la despoblación. El grupo popular criticó en cambio al resto de los grupos su actitud, acusándoles de no presentar alternativas y de abandonar la comisión “con más teatro que argumentos”.
La Comisión especial sobre la evolución demográfica en España, creada hace dos años, concluyó ayer con una bronca política que nada tuvo que ver con los acuerdos alcanzados en legislaturas pasadas en el Senado con el consenso de todos los grupos parlamentarios.
El motivo de la bronca fue la insistencia del grupo popular, que posee mayoría en la Cámara Alta, de sacar adelante el informe con las 100 medidas propuestas por ellos y que registraron a principios de este mes de febrero, antes de que se disuelva la Cámara, cuando los otros grupos habían pedido que se pospusiera para la próxima legislatura con el fin de poder llegar a un consenso.
Tras el tono alcanzado ya en las últimas reuniones de la mesa y portavoces, los grupos dieron la espalda ayer al PP ante lo que consideraron una “instrumentalización política” del Senado para imponer un informe partidista y con matices ideológicos, según denunciaron. La mayoría de los grupos ni acudieron a esta comisión, convocada a última hora después de la mesa y portavoces celebrada el martes y de que se suspendiese la que tenía que haberse celebrado el jueves.
Los únicos que acudieron fueron los senadores del PSOE, cuya portavoz es la parlamentaria de Teruel Perla Borao, y el portavoz de Unidos Podemos en Comú Podem-En Marea, Ignacio Bernal.
El PSOE, que presentó su propuesta en julio de 2017, plazo fijado entonces para hacerlo, intervino para condenar el uso partidista e ideológico que estaba haciendo el PP de una comisión de vital importancia para los territorios despoblados. No se llegó a someter a votación la propuesta que hace año y medio presentaron los socialistas porque el grupo no la registró, ya que entonces se acordó que todos hicieran sus planteamientos para debatirlos después y sacar adelante un informe consensuado.
Lo que hicieron los socialistas ayer tras la intervención de su portavoz fue abandonar la sala donde se desarrollaba la comisión, como muestra de repulsa por el uso que había hecho el PP del Senado por haber reventado la comisión, rompiendo el consenso al incluir matices ideológicos y partidistas.
Lo mismo hizo el senador de Unidos Podemos, que tras defender la propuesta que habían hecho ellos y que registraron, se quedó solo a la votación de la misma, que decayó al encontrarse en solitario ante la aplastante mayoría del PP, y a continuación como muestra de repulsa por el devenir que había adquirido la comisión en los últimos meses abandonó también la sala.

Propuesta de ER
Esquerra Republicana había presentado también una propuesta para que los trabajos se retomasen en la próxima legislatura ante la imposibilidad de concluirlos en la actual por el adelanto electoral, y la deriva que había tomado la misma al no haber presentado el PP su propuesta hasta el pasado 1 de febrero, cuando el plazo que se había fijado era julio de 2017, ampliado después hasta septiembre de ese año, tal como recogen las actas. Al no acudir los representantes de este grupo parlamentario, la propuesta no llegó a votarse y decayó.
Tras quedarse solos los 15 senadores del PP en la comisión, se votó el informe con las 100 medidas para luchar contra la despoblación y el reto demográfico registradas por el grupo popular a principios de este mes, y salió aprobado por mayoría como la propuesta que el Senado hace al Gobierno para afrontar este reto. El documento no podrá someterse a consideración del pleno de la Cámara Alta ya que esta semana se celebró la última sesión plenaria, puesto que las Cortes Generales se disolverán el próximo 5 de marzo por el adelanto electoral.

Traslado al Ejecutivo
La presidenta de la comisión, la popular María del Mar Angulo, explicó que inicialmente se había planteado poder llevar el informe al pleno que iba a haber el 5 de marzo, y que no se celebrará ante la disolución del Senado por la convocatoria de los comicios generales.
Añadió que la comisión daría conocimiento al Ejecutivo de la aprobación del informe e hizo una serie de consideraciones antes de dar por finalizados los trabajos de la misma, en el sentido de que se había seguido la hoja de ruta marcada en la reunión de la mesa y portavoces considerando que era necesario dar respuesta a lo encargado por parte de la conferencia de presidentes.
En realidad esto no es exacto porque la conferencia de presidentes se celebró en enero de 2017 y la creación de la comisión se acordó con anterioridad, a propuesta del PP, en el pleno del Senado del 30 de noviembre de 2016, si bien su constitución como tal no tuvo lugar hasta el 1 de marzo del año siguiente.
La presidenta destacó como algo positivo de la comisión que hubiese sido un “punto de encuentro” importante para la comparecencia de personas del ámbito académico que expusieron sus visiones sobre la problemática y posibles soluciones, así como el hecho de haberse desplazado a territorios afectados por la despoblación, entre ellos Teruel. Esa visita se llevó a cabo a principios del año pasado por varios miembros de la comisión.
Concluyó la presidenta que al margen de dar por finalizada la comisión, en la siguiente legislatura habrá plena autonomía por las personas que conformen esta Cámara de seguir atendiendo este fenómeno, como ya se ha hecho anteriormente.
Al término de la comisión tanto el PSOE como el PP emitieron sendos comunicados de prensa defendiendo sus posicionamientos y criticándose entre ellos. Mientras los socialistas acusaron a los populares de aprobar “de forma tramposa” un documento que calificaron de “pseudoinforme cargado de ideología radical”, el PP denunció que “el PSOE ha dejado una vez más solos a los miles de pueblos y sus habitantes, para los cuales este documento les ayuda a mantener sus pueblos y su forma de vida”, además de criticar el comportamiento de lo socialistas por no haber presentado “ninguna propuesta de trabajo” y haber “abandonado la comisión, con más teatro que argumentos”.
En este sentido, la senadora del PSOE Perla Borao recordó que sí presentaron en tiempo y forma un documento en julio de 2017, cuando el PP no lo hizo hasta junio del año pasado tras la moción de censura. Ambos se presentaron en la mesa y portavoces, pero a principios de febrero de este año el PP presentó otro documento distinto y lo registró, lo que no hicieron con el suyo los socialistas al no estar dispuestos a entrar en el juego planteado por los populares.
En la página web del Senado figura toda la documentación del funcionamiento de esta comisión y de las vicisitudes por las que ha atravesado, si bien como denunció la senadora socialista, en los últimos meses solo ha habido prácticamente reuniones de la mesa y portavoces y no así de la comisión con todos sus miembros, dentro de lo que a su juicio ha sido una estrategia para entorpecer la aprobación de un informe por consenso como se pretendía al principio.